"Genius Lab"

YoonJin

SEOKJIN
"Genius Lab"

—Ahhh... Ha... ¡Ah...!

Reconocimiento, placer y horror, todo se dio paso en el pequeño rostro de Yoongi, en ese orden. Jin pudo ver cómo su rostro pasaba del pálido color de la crema al delicioso tono del algodón de azúcar.

Admiró el desastre que era su cara, a pesar de verse más tentadora para sus sentidos a cada segundo. Podía adivinarse la velocidad de su corazón y exponerse los rincones más oscuros de su mente, sin recato, sin sutileza alguna.

Los labios de Yoongi habían estado presionándose, uno contra el otro, pero finalmente se separaron, incapaces de contener por más tiempo un sonido en respuesta a los gemidos del mayor.

—¡No comiences con tus obscenidades, Jin hyung!

El aludido soltó una carcajada entonces.

—¿Quién es el obsceno? ¿Yo, quien solamente bebe inocentemente un vaso de whisky demasiado fuerte... O tú, quien decidió interpretar el dolor de mi garganta como un sonido sexual?

Yoongi volvió a cerrar la boca, luciendo agraviado. Era un punto más para Kim Seokjin. Jin había estado tres hora dentro de Genius Lab, siendo solicitado intermitentemente por Min Yoongi para grabar una o dos notas para que pudiera añadirlas a la pista, y eso lo había vuelto un poco loco.
Jin estaba aburrido. Y cuando se aburría se ponía realmente simple: el caos tenía que ser invocado.

—La última canción está terminada por fin —anunció el productor, de pronto, sucumbiendo a una sonrisa muy honesta: una sonrisa grande y franca, de dientes pequeños y bonitos. Se alejó del monitor con brusquedad y decidió festejar bebiendo, finalmente, el vaso de whisky que dejó abandonado desde que Jin se lo sirvió hace una hora. Lo apuró casi de un solo trago y se sirvió más. Jin enarcó una ceja, mirándolo hacer aquello.

—¡Y con tres días de anticipación a la fecha límite! Ah, vaya... Soy genial —se felicitó Jin, haciendo un significativo movimiento con la cabeza.

—Tú no hiciste nada —dijo Yoongi de inmediato, lanzándole unos ojos de pistola desde detrás del vaso.

—¡Pensé que éramos un equipo!

Suga no dijo más nada, pero fue a servirse una tercera vez.

—Deja eso ahí, ¡ven, ven, tenemos que festejar el término del proceso de producción! —Jin tuvo éxito a la hora de envolver el pequeño cuerpo de Yoongi en un abrazo lateral, a la vez que tomaba el vaso de whisky con la mano libre y lo colocaba sobre uno de los estantes de la pared.
El más joven pareció levemente confundido, pero se dejó hacer y llevar al sofá, donde ambos cayeron con gesto exhausto—. Por que el nuevo álbum sea más exitoso que el anterior —Jin alzó el vaso de whisky y se lo terminó de un trago; después, tuvo que evitar que Yoongi se levantara (en busca del suyo, para complementar el brindis). El de menor estatura frunció el entrecejo, pareciendo todavía más confundido—. ¡Y porque tengamos una feliz Navidad!

—Estamos a finales de mayo... —Suga hizo una mueca de desdén, medio distraída. Intentó levantarse nuevamente del sofá, pero el brazo de Jin fue más rápido (y era diez veces más fuerte), y se colocó frente al cuerpo de Yoongi como barrera física, que lo echó hacia atrás sobre el mullido respaldo.—¿...Hyung... Acaso... Acaso estás saboteándome para que no beba...?

—¿Yo?

—La pregunta más tonta del mundo —Yoongi puso los ojos en blanco.

Jin adoraba cuando Suga era grosero porque, básicamente, tenía una preferencia secreta por los personajes tsundere. Intentando ser fríos pero fallando olímpicamente a ojos de buenos espectadores.