El llorón y el puto ❄ Cortos VMin

La mejor.

–Tae... Aquí no...–Susurró

JiMin sentía sus manos temblar y los nervios de punta, la mano del más alto entraba lentamente debajo de su pantalón por la parte de atrás. Se encontraban en una cafetería, en una cita.

–¿Entonces ahora no quieres? ¿Quién fue el que me rogó que fuéramos a los baños la última vez que vinimos? –Taehyung entrecerró los ojos seductoramente, mientras con su mano libre jugaba con el café en su taza casi vacía.

–Al menos déjame terminar mi café...

–No quiero... –Taehyung apoyó su cabeza en el cuello de Jimin, deslizándola hasta terminar con su respiración posada en el cuello del contrario, sabía muy bien que ese era su punto sensible. –Yo estoy caliente ya.

Jimin soltó un muy débil jadeo mientras tapaba su boca con su mano, sintiendo la excitación debido a su punto débil.

–Vamos, pero rápido... –Habló Jimin con un hilo de voz, mientras agarraba la mano de Taehyung y lo jalaba con brusquedad al baño.

Ya en el lugar se encerraron en uno de los cubiculos mientras tae soltaba risas traviesas y Jimin jadeos debido a su erección. Tae se lamió los labios y se agachó en frente de Jimin, quien estaba sentado en la poceta. Desabotonó el pantalón y bajo el cierre, dejando ver aún más el bulto y el líquido preseminal que apenas comenzaba a salir. Bajó su pantalón junto con su boxer hasta la rodilla, ahora dejando aquella erección al aire.

Volvió a lamer sus labios con deseo y sin inmutarse introdujo la erección húmeda de Jimin en su boca. Jimin soltó un gemido sonoro y después tapó su boca con su mano, suprimiendo los gemidos que siguieron saliendo por la lengua de Taehyung que no dejaba de darle placer.

Tae le dio un beso sonoro en la glande a Jimin, y Jimin agarro con su mano libre la cabeza del contrario, impulsándolo a seguir. Cada vez que algo le excitaba mucho le jalaba el pelo, hasta que pasó lo que tenía que pasar y antes de que el líquido preseminal se transformará en semen y llenara la boca de Taehyung, Jimin soltó un gemido demasiado sonoro mientras arqueaba la espalda.

Taehyung se paró del suelo y Jimin de la poceta, intentando subir sus pantalones mientras su erección bajaba.

–¿Estás satisfecho? Idiota

Taehyung detuvo a Jimin antes de que lograra subirse los pantalones y se sentó él en la poceta, atrayendo a Jimin para que se sentara encima de él. Lo cual hizo.

La erección de Taehyung y la excitación ya no lo dejaban pensar bien, solo sentía la necesidad de tener las paredes de Jimin rodeándolo una vez más mientras lo embestía fuertemente.

Taehyung se bajó los pantalones junto con los boxers de forma rápida y acercó a Jimin más a él. Apoyo su cabeza en el hombro del más bajo y susurro en su oído:

–Estando contigo, nunca me sentiré satisfecho...

Comenzó a rozar la punta de su pene contra la entrada de Jimin, cosa que hizo que su erección volviera y soltara jadeos.

–Taehyung, tranquilízate, por fa-por favor

–No puedo, ya no puedo...

Presionó las caderas de Jimin y comenzó a entrar en el rápidamente, de una sola estocada, causando que Jimin pegara un grito de dolor y excitación al mismo tiempo. El mayor mordió su labio inferior con fuerza, tanta que esperaría pronto sentir el sabor metálico de la sangre en su boca, o tal vez el sabor del semen de su novio.

Rápidamente comenzó a embestirlo sin piedad, completamente cegado por el placer.

–Ah~ ¡Tae! ¡Más lento! ¡AH! A-ah... Mhmm...ah~

Taehyung posó una de sus manos en la nuca de Jimin y lo acercó mucho más a él, hasta tener la posibilidad de besarlo con lujuria para callarlo ya que los podían descubrir. Jimin sentía como se ahogaba en placer, cada estocada era precisa, justo en donde le gustaba, se sorprendía de como Tae lo había descubierto tan rápido.

Y como estaba de loco por él, porque cogía demasiado rico.

Siguió dando estocadas y ahogando los gemidos de Jimin en sus besos calientes y duros, involucrando lengua. Así fue hasta que sintió sus piernas temblar y las paredes de Jimin lo apretaron, ahora soltando todo su líquido seminal en su interior.

Taehyung apoyo su cabeza en el hombro de Jimin, jadeando. Estaba cansado. Jimin también jadeaba.

–Perdón... No fuí gentil

–Mierda, Kim... Creo que deberías dejar de ser gentil porque es la cogida más rica que me han dado en la vida.

Taehyung rió y ambos se vistieron, para después salir del baño agarrados de las manos con una sonrisa en sus rostros.

Y en un cubiculo vecino, un camarero llamado namjoon tenía sus manos en su boca por la sorpresa, un sonrojo en su cara y una posible erección.