Embarazada a los 18

Capitulo 16

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CAPITULO 16

Al ver que tampoco responde al mensaje, vuelvo de nuevo a la habitación de su madre. Sin saber si lo encuentre allí, si habría vuelto. Toco a la puerta, y entro sin esperar respuesta. Necesito saber si el esta ahí dentro.

Nada mas entrar veo a su madre tumbada en la cama, que me mira sorprendida.

-¿Donde esta mi hijo? Me dijo que enseguida volvía, y ya hace mas de media hora - dice la mujer intentando inclinarse en la cama.

-No lo se, voy a ir a buscarlo. Se habrá perdido, a veces es muy despistado - digo intentando bajar la preocupación de la mujer.

Salgo de la habitación.

Me quedo mirando el pasillo -¿Es él? Susurro entre dientes. Empiezo a caminar hacia lo que me parece que es él. No tardo ni un minuto en llegar - Es él - digo sonriendo y tirandome en sus brazos. Su abrazo no es como el mío, es frio. Como si estuviera enfadado, su cara no repleta alegría.

-¿Donde estabas? Llevo un rato buscándole - digo hacia pucheros.

-Estoy enfadado, no quiero que te quedes con gentuza como él. Nunca mas - escucho que dice, su voz suena y enfadada. Su actitud es de un celoso, que por una parte lo pueda llegar a entender.

-Saul, por dios digo sin pensarlo mucho - No puedo hacer eso, es el padre de mi hijo. Y quiere formar parte de la vida de mi hijo - digo bajando la cabeza.

Asiente apartándome de él. No parece estar muy conforme con la decisión, que acabo de tomar.

Camina a la habitación de su madre, y yo detrás de él. No quiero perderlo de vista de nuevo. Mi cabeza no logra entender porque reacciona tan celoso. El mismo sabe que Leo, es como un hermano para mi, que nunca quería nada con él. Es como mi mayor mayor, que me protege de la gente que intenta joderme la vida.

Sigo detrás de Saul. ¿De que van a operar a su madre ? Una hora un poco rara, para operar a nadie. Ya que son las once de la noche. Me inquietaba preguntar de que te van a operar, pero no dije nada me quede callada caminando detrás de Saul. Antes de entrar veo a Leo en la puerta de la habitación de la madre de Saul.

-Me enterado que la van a operar ¿Qué le ocurre? - pregunta Leo, acercándose un poco mas a mi.

-Deberías irte, Saul no quiere verte cerca de mi.

Me siento en el banco mas cercano a la puerta. Veo como Leo se sienta a mi lado. Me levanto de asiento y me siento en uno mas alejado, no quiero que Saul nos vea tan juntos. No es momento de llamar la atención.

Lo miro de reojo, no puedo evitarlo. Mientras esperamos que la lleven para la operación, cuando empiezo a sentir un dolor bastante fuerte en la zona de la barriga. Intento no llamar la atención de nadie, intentar que nadie se de cuenta. Veo salir a Saul, y detrás de él dos celadores empujando la camilla, me quedo mirando a Saul y a su madre ellos formaban parte tanto de mi vida, como mi hermano.

Levante el culo del asiento y hice el esfuerzo de caminar detrás de ellos. Pero el intenso dolor de barriga pudo conmigo. Estoy apunto de caer, cuando noto que alguien coge mi brazo, al levantar un poco la mirada me doy cuenta que es Leo.

Pudo ver como Saul, me mira de reojo unos segundos. Se nota enseguida que le arde la sangre, al vernos a Leo y a mi tan juntos. Los dos nos mirábamos mientras pierdo mi energía con cada dolor que me da la barriga, cuando veo que sigue caminando sin volver a por mi, ni si quiera venir ayudarme.

Me levanto del todo, con la ayuda de Leo. Como puedo y con su ayuda voy caminando hacia la sala de espera. No tardamos mucho en llegar a ella. Al entrar veo a varias tías de Saul, todo el mundo murmuraba. Seguramente no se acordaban de mi, pero en aquel momento solo hay dudas de porque esa mujer le han tendió que operar de forma tan repentina, la misma pregunta que me hacia yo.

Nos acercamos a uno de los banquitos que hay libres y nos sentamos los dos allí. Veo a Saul, al final de la sala hablando con sus tías, no recuerdo ninguno de sus nombres. No quiero molestar me quedo murmurando. No quiero ser el centro de atención, aunque me este muriendo de dolor.

23:30 Hospital general. Sala de espera.

Toco mi barriga, ¿Le estará pasando algo bebe? Seguía doliéndome muchísimo pero no quería llamar su atención, después de mas de media hora esperando. Podía esperar un poco mas para llamar a un medico.

Cuando veo a un medico acercarse a la zona donde esta Saul y sus tías. Seguramente les este contando que ha pasado en la operación. Veo como el medico toca el hombro de Saul, susurrando algo que no llego a escuchar.

-Tu madre esta fuera de peligro - Llego a escuchar que dice el medico.

Todas sus tías y Saul, sacan una sonrisa. Aquella que durante la media hora que había durado la operación ha estado escondida. Cuando de repente la sonrisa de Saul, va perdiendo esa luz, mientras camina hacia nosotros. Se reclina un poco para acabar dándome un abrazo, esta vez mucho mas cálido que al anterior.

-¿Que te pasa cariño? Estas muy pálida - escucho que dice Saul, mientras le echa una mirada asesina a Leo - Deberías ir a casa a descansar, a sido un largo día. ¿Llamo un taxi?.

Asiento con la cabeza.

Leo se levanta del asiento - Puedo acompañarte, por si vuelves a encontrarte mal - dice Leo mirando de reojo a Saul, que no parece muy conforme - Él solo puede quedarse aquí - dice con una voz de vacile, hacia Saul.

-Creo que no se encuentra tan mal, podrá ir sola - dice Saul, dándome un beso en los labios. Que da la sensación que solo lo hace para marcar territorio, peor que los niños. Pienso.

Camino hacia la calle, y cojo el taxi que anteriormente a llamado Saul. Después de un largo rato durmiendo, el dolor ha desaparecido. Siento que todo ha sido por el esfuerzo.

24 de agosto. Nueve y una semana de embarazo.

Después de 9 meses de embarazo.

Mi rutina no ha cambiado tanto, después del octavo mes. Me tocaba ir al medico casi todas las semanas. Como yo había predicho que seria un varón, será el pequeño Izan. Aquella mañana me llamo el doctor.

He sentido dolor como unas pequeñas contracciones que no le di importancia, pero ahora si que sentía miedo. El dolor cada vez va a mas. Saul se encontraba conmigo, así que él decidió acompañarme. Lo normal pienso.

Estoy en la habitación tumbada, cuando veo que ha llegado el día. Todo el mundo no para de entrar en mi habitación médicos que nunca he visto, pero también a mi primo Aaron y a Leo, pero de todas esas personas no esta quien yo pensaba que estaría cerca de mi en este momento. Mi madre.

Lo veo normal que no este nunca se lo conté. Pero a mis dieciocho años me daba un poco de miedo y fueron pasando los meses y hasta día de hoy no debe saber nada.

Recuerdo en las películas donde el doctor viene y te dice que cojas aire, y seguidamente que empujes. Todo aquello no recuerdo nada, estaba en la habitación y de repente lo veo todo borroso ¿Qué me ha pasado? ¿Sonde esta mi bebe?¿Donde esta Saul? Miles de preguntar rondaban mi mente.

Cerro los ojos, pero no podía dormir. Mire el reloj y apenas habían pasado unos minutos. De repente sin darme cuenta, veo allí a Saul, a mi hermano pequeño Iván,, a Leo el padre el bebe y a mi primo Aaron, todos están aquí.

Los cuatro se apartaron y entro un celador con un bebe en brazos, al segundo supe que mi querido hijo Izan, Aquel que tanto deseaba conocer. Que al recordar esa canción que conocí hace un par de meses, supe que a partir de aquí la vida será difícil, pero Izan la hará fácil. Me dio para que cogiera a mi pequeño en brazos, me doy cuenta de lo hermoso que es. Con unos ojos marrones que apenas se quedan abiertos unos segundos, me dio la sensación que en cualquier momento se iba a romper, parece tan frágil. Lo estoy mirando cuando con sus ojos cerrados sale una sonrisa de él. Al fin lo tenia en brazos, un día como hoy, un 26 de mayo de 2015.