El Diablo Tiene ojos azules- Una Malfoy Granger?

Me encantas

Spencer estaba en su habitación llena de papeles de colores, cintas y pergaminos.
Se escuchó abrir la puerta y vió s Josh parado.

-Pasa, ahora lo recojo - movió su varita y todo el desorden se organizó en una caja.

-¿Qué haces? - le dió un beso en la frente en forma de saludo.

-Solo, organizaba algo para Lily, ¿Qué te trae por aquí? - se acomodó en la cama.

-Vine a verte, te extrañaba - se sentó a lado.

-Oww, eres muy tierno - sonrió.
-No sé que me hiciste Spencer, me encantas - tomó su mano.

Spencer no dijo absolutamente nada, solo una lágrima bajó por au mejilla y sonrió.

-Me enamoré de tí Spencer - bajó la cabeza - y tengo miedo de eso.

-¿Por qué? - hizo que el chico levantara su cabeza.

-Porque ahora tienes el poder de destruirme o hacerme el chico más feliz del mundo. - admitió.

-Oye no digas eso, jamás te haría daño, te lo prometo

-No prometas algo que no vas a cumplir

-Yo no prometo cosas si se que no las voy a cumplir - acarició el rostro del chico.

-Gracias Spens - la abrazó

La chica le devolvió el abrazo y le dió un beso corto.

-Tengo clase de runas - dijo después de besarla.

-Bien, nos vemos luego - sonrió y soltó su mano.

Josh cerró la puerta y Spencer se tiró a la cama, muy feliz por la confesión del chico. Ella tambien estaba enamorada de él.

☆

-James ¿estás ahi? - Scarlett tocó la puerta de la habitación del chico.

-Si, pasa - James dejó un libro que leia en su mesa de noche y la vió entrar. -¿Ocurre algo?

-¿Oiste lo que dijo Jake verdad?

-Sobre que alguien te ataca si

-Tengo miedo James - se abrazó a si misma - No por mi, si no por mis amigos, si quiere hacerme daño, les hará daño a ellos primero.

-Escucha, Jake hallará una forma de que se rompa el hechizo - se acercó a ella.

-¿y si no la encuentra? - lo miró con evidente miedo.

-Scarlett, eres una chica increíble, hermosa, valiente y muy sexy aunque eso no viene al caso, el punto es que me encantas, Scarlett pero debes tener un poquito más de confianza en la gente - le tomó la mano.

A Scarlett le llegaron realmente las palabras de James, algo en su corazón se abrió hacia él y no iba a cerrarlo.

-No quiero que les pase algo por mi culpa, no quiero que nadie salga herido por mi culpa - gimoteó -Ni siquiera puedo contarle a mi mejor amiga. Y eso me molesta

-No pasará nada malo, confía - acarició el cabello de la chica y la abrazó.

-No me abandones James - susurró.

-Jamás rubia - prometió. -¿Volviste a tener esos sueños?

-No, desde esa vez no - se aferró más al chico.

-Me alegra saber eso - besó su cabeza y la soltó. -Bien, anotaremos los ataques que tengas y los relacionaremos.

-Bien, suena bien - se puso el cabello detrás de las orejas.

-Entonces - sacó una pequeña libreta - fue ayer en la madrugada - Escribió.

-Gracias, por esto - sonrió sincera.

-Para eso estamos - sonrió y la miró haciendo que la chica se incomode.

-Si, yo... Me-me voy - abrió la puerta y sonrió en modo de despedida.

-Claro, adiós - se aclaró la garganta y volvió al libro que leía.

Scarlett salió de la habitación y se dió la vuelta.

-¿Qué hacías en el cuarto de Potter? - Thomas habló y Scarlett saltó del susto.

-Mierda, vas a matarme de un paro -se llevó la mano al pecho.

-No respondiste mi pregunta.

-Hablé con él sobre algo que me pasa, no tendría que importarte. - caminó a la sala de la torre .

-Pues lo hace Scarlett, me importa - la siguió hasta la sala.

- ¿Por qué? - golpeó el sofá de frustración.

-Porque me gustas y no quiero que nadie más esté contigo - gritó, alarmó a todos los que estaban en la torre y salieron a ver.

-Deja de gritar, estás formando un escándalo - se acercó para callarlo.

-No, que todos escuchen lo que siento por tí Scarlett - alzó más la voz.

-Vamos afuera, hablaremos ahí - intentó empujarlo hacia la salida pero el la tomó de los brazos presionando la herida que tenia.

-Thomas mi brazo - intentó safarse.

-Déjala - Evan habló

-Evan, déjanos solos por favor -lo miró suplicando. - y los demás, ¿no tienen algo mejor que hacer?

Los dos chicos de Hufflepuff entraron a sus habitaciones cuando ella habló.

-Vamos - intentó llevarlo con ella.

-No, púdrete Scarlett, quédate con el idiota de Potter - la soltó y se fue de la torre.

Scarlett tomó uno de los cojines y gritó en él. Fue a su habitación, tomó su varita y salió de la torre hechando humo.
Se dirigió a la torre de astronomía y se sentó al borde.

Todos la buscaron por horas, ya se habían hecho las diez y aún no la encontraban.
James se había unido a la búsqueda hace veinte minutos cuando Lily fue a su habitación a informarle que Scarlett no estaba por ningún lado. Decidieron dividirse. James no sabía a donde ir y se le ocurrió buscar en el bosque prohibido.
Caminaba por los jardines y existía una luz que dabs al césped, avanzó una distancia prudente y pudo ver que alguien estaba atrás suyo por la sombra que proyectaba.

Se dió la vuelta pero no había nadie hasta que elevó la cabeza y la vió sentada, salió corriendo y subió las largas escaleras que llevaban a la parte superior de la torre.

-Scarlett, te estuvimos buscando por todo lado - se acercó a ella.

-Quería estar sola

-Vamos, te siguen buscando, no les causes más malestar - se apoyó en la baranda.

-Eso es lo que hago, causar malestar, causar problemas - lo miró.

-No es cierto, me expresé mal - se arrodilló junto a ella.

-No James, es cierto, soy una. Molestia y hasta puedo causar que uno de ellos muera ¡entiéndelo! - sollozó.

-Scarlett, no eres una molestia para mi por favor razona, eres una gran chica que daría todo por sus amigos, no dejes que te quiten eso, es lo que te define - la tomó del rostro y secó con su pulgar las lágrimas que salian de la chica.

Ella no dijo nada más, sólo dejo que James la llevara abajo y actuó como si nada hubiera pasado.

Inventó la excusa de que esa noche se presentaría