Amor Por Coincidencia

179- Descansa en paz

01/01/2020

-Gaby

Hola -dije acercándome despacio- se que han pasado meses y que es la primera vez que vengo a verte, pero creo que era el momento indicado para hacerlo -quede frente a donde se encontraba-
He de confesar que nunca nadie supo como me sentí cuando recibí la noticia, me negué a hablarlo con alguien, a pesar de todo fuiste quien me ayudó a salir adelante en aquellos momentos, quien me dio fuerzas para no rendirme y ser valiente...
Siempre te voy a estar agradecida. -alcé el ramo de flores que abrazaba entre mi pecho y lo observé- mereces muchos más de estos, que tu tumba siempre esté hermosa, llena de color, ante mi siempre te mostraste como alguien alegre aunque al principio no confiara en ti y creo que tu memoria debe ser recordada con honor.
Creo que es necesario que comience mi vida de una manera diferente, hoy es el primer día del año y siento que que mejor que iniciar bien desde el día uno, es momento de que las cosas se acomoden en su lugar e intentar ser feliz después de todo lo que ha pasado
¿Te acuerdas cuando me dijiste que tendría por mucho tiempo a Manuel a mi lado?
Pues hoy comenzamos una vida como esposos, hoy es nuestra boda y debo confesarte que tengo miedo, miedo de que la vida aún no quiera que él y yo estemos juntos pero sé que debo confiar.
Recuerdo que me dijiste que te recordaba a tu hermana, ahora mismo seguro estas con ella, abrazándola, perdonandose y diciéndose todo lo que se tenían que decir, aún así Alexis, después de que me dijeras eso y me ayudaras a escapar creo que también te tomé un cariño tan especial como si fueras mi hermano, de corazón, de alma y yo me voy a encargar de que aquí, donde descansas siempre este todo tan lindo -limpie mis lágrimas que sin saberlo estaba derramando-
Creo que es hora de irme, de por fin vivir la vida como nos toca, de dar todo este amor que siento en mi, para el que será mi esposo en unas horas y para nuestro hijo -me incline y puse las flores sobre la tumba-
Te quiero así hayamos convivido tan poco tiempo, descansa en paz -susurre, me puse de pie y salí del cementerio-

Listo -subí al carro- Vámonos papá, una boda nos espera -le sonreí aún con unas cuantas lágrimas bañando mi rostro, el hizo lo mismo y salimos de ahi-