El Rapto

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Sakura:

Ese día...

Naruto y yo tuvimos una cita en su departamento, me ayudó a salir de mi casa sin que nadie nos viera, últimamente así eran nuestras citas ya que mi entrenamiento me mantenía ocupada todo el día. Llegamos, preparamos ramen y después estuvimos viendo una película juntos o bueno... La mayor parte del tiempo nos besamos, las caricias fueron tan diferentes a las otras veces, sabía que esta sería la primera vez que estaría con Naruto, él día que perdería mi virginidad... Yo lo quiero tanto... Sé que no habría nadie mejor que él...

En medio de tantos besos y caricias que no podíamos dejar de darnos mutuamente a Naruto le surgió la urgencia de ir al baño... Me dijo que iría rápido, yo asentí y me quedé viendo la película, después de unos minutos volvió y se sentó a un lado mío, me sonrió y yo a él, lo noté un poco incómodo así que me acerqué para darle un beso en la mejilla, estuvimos viendo de nuevo la película, Naruto intentó de nuevo acercarse poco a poco a mí, tomó una palomita y me la dió en la boca, me dió una de sus hermosas sonrisas y yo me sonroje, amaba que hiciera eso. Escuché unos golpes en la ventana, pensé por un segundo que mis padres se habían dado cuenta de mi ausencia y que me habían venido a buscar, ojalá hubiera sido eso.

Al voltear a ver no podíamos creerlo, era Sasuke... Mi corazón dió un pequeño salto al verlo, ¿Y si nos vió mientras nos besábamos? Bueno no creo que le importe de todas formas.

Él dijo que había vuelto, tal vez se quedaría al fin para volver a ser el equipo 7, Naruto y yo nos vimos a los ojos por unos segundos, noté su inseguridad ante la situación de que Sasuke regresara, tal vez pensó que yo correría a sus brazos, pero en mi mente estaba muy claro que a quien quería ahora era a Naruto, Sasuke me parecía tan diferente ahora, sentí como si no lo conociera, se comportaba mas cálido con nosotros, tal vez nos extrañaba.

Me senté en la cama y Sasuke se sentó a mi lado, demasiado cerca para mi gusto, cosa muy rara de él ya que siempre me repelía, noté como Naruto se molestó de inmediato y de alguna forma sutil hizo que nos recorríeramos, sentándose justo a un lado de mí, tomando mi mano, tal vez Sasuke no lo notó o tal vez sí, ya que unos minutos después sentí como acariciaba mi pierna, cosa que me estremeció bastante, aún no me terminaba de recuperar de la acalorada situación de hace rato con mi novio y el hecho de que él rozara sus dedos en mi pierna de esa forma hizo que me inquietara. Esperaba que Naruto no notara eso, volteé a ver a Sasuke y él me dedicó una pequeña sonrisa, para después hacerme señas con los ojos invitándome a salir del departamento con él... No podía creerlo, tal vez era un sueño... O tal vez notó mi cercanía con Naruto y su rivalidad lo insitó a competir con él a costa mía... En fin.

La película terminó y después de una pequeña discusión entre estos dos terminé caminando con Sasuke hacia mi casa... Recuerdo las sensaciones de aquel encuentro, la lluvia... El estar tan cerca de él... El hecho de que Naruto ya me había dejado esperando el momento para estar con él... Creo que eso me hizo que no me contuviera... Sus palabras, sus caricias, sus besos, su cercanía, el ambiente, lo sentía realmente perfecto...

Sasuke me dijo unas palabras que me estremecieron... que me hicieron desear realmente ser suya... Demasiado tarde sentí el chakra de mas presencias al rededor de nosotros, - ¡Ni en tus sueños será tuya maldito!- fué lo último que escuché, sentí como alguien me tomaba del cabello y me jalaba hacia atrás, Sasuke fue golpeado con tal fuerza que perdió el conocimiento mientras yo gritaba su nombre.

Esa voz... Esa voz... Estaba segura que la había escuchado antes... Sentí miedo, aún así estaba dispuesta a defenderme, lanzé golpes contra el infeliz que sostenía mi cabello, pero ese maldito los esquivaba fácilmente. Llegamos a un punto lejos de la aldea, muy adentrados en el bosque, el tipo que me tenía sujetada del cabello me lanzó al suelo, volteé a verlo, era una mezcla entre hombre y algo así como un tiburón... Tenía branquias en el rostro... Me causó aberración solo verlo.
- te dije que no la maltrataras...- ahí estaba esa voz de nuevo, me giré para encontrarme con su mirada, era exactamente igual a Sasuke... Con la variante de tener el cabello largo, tenía activado el Sharingan y no me quitaba la vista de encima, realmente no pude hacer nada ante su presencia, me puse de pie sin dejar de verlo, mi corazón se acelero, sentí terror... Ese era el hombre que masacró a su clan entero...

- traté de no hacerlo, pero es bastante ruda ésta mocosa.-

- hmp...

Se acercó a mí, me acarició la mejilla, yo estaba paralizada, no sabía como reaccionar, no entendía porque se acercaba de esa forma hacia mí, su mirada era fría, pareciera que nunca parpadeara...

- vendrán por nosotros en cualquier momento...- dijo serio sin dejar de verme.

Estuve a punto de preguntarle para que me habían raptado, pero apenas abrí la boca, él me tomó del brazo jalándome hacia él para después alzarme y llevarme consigo, cerré mis ojos al momento, caímos sobre algo en movimiento, yo solo escondí mi rostro en su pecho.

Era raro, a pesar del miedo que sentía hacia él, irónicamente cubrí mi rostro en su pecho intentando sentirme protegida.
Noté que en ningún momento me maltrató, en ningún momento me hizo sentir mal, no me ofendió, solo se limitaba a verme y no dejó de sostenerme en sus brazos... Sentí que ya conocía el aroma de su cuerpo, como si la comodidad de sus brazos ya la hubiese sentido antes.

- ¿ésta chica será el miembro nuevo por parte de ustedes?

- asi es, Deidara- habló el tipo mitad pez, ya reconocía su voz.

Itachi:

Pasaríamos toda la noche viajando hasta llegar a la guarida, aún estaba molesto por lo que acababa de ver, mi hermano y ese niño zorro estuvieron a punto de hacer suya a Sakura, no tuve de otra, tenía que actuar ahora, Sakura es mía.

La ví muy asustada, pensé que se acordaría de mí, pero tenerla de nuevo entre mis brazos y ver que ella no me repelía me daba una esperanza, tal vez si me reconoció... Tal vez si recordó mis abrazos  de aquella noche... Me senté para sentirme mas cómodo durante el viaje, ella no reaccionaba, sabía que no estaba dormida, sentí su aroma tan suave y dulce como la última vez, la lluvia aún no cesaba y el viento no ayudaba mucho, la solté un momento para quitarme la capa, ella inmediatamente puso una mano al rededor de mi cuello y la otra tras mi espalda sin voltear a verme, yo me quité la capa y la puse sobre ella para cubrirla del frío, sin querer noté que bajo su falda desarreglada se podía ver su entrepierna, no tenía ninguna prenda de bajo, tal vez  Sasuke se la había quitado momentos antes... Estoy seguro que llegue justo a tiempo por eso no me preocupo, acomodé mi capa para cubrir más esa zona de su cuerpo, no quería que nadie mas la viera, solo yo podía hacelo a partir de ahora, ella se exaltó con mi movimiento de mano sobre su trasero y fue cuando volteó a verme asustada, yo dirigí mi mirada hacia la suya unos segundos, no pude resistirlo, me acerqué poco a poco a su rostro, sentí aún más su embriagador aroma, era perfecto, cerré mis ojos al estar lo suficientemente cerca de su rostro y comencé a besar su frente, hasta sus mejillas, ella no reaccionaba a ningún beso ni para bien, ni para mal... Supuse que tal vez no era tan indiferente para ella, seguí besando su rostro para después dirigirme a su barbilla, estuve a punto de besar su boca cuado ella comenzó a temblar, sentí que su respiración estaba mas agitada, me veía con unos ojos de miedo, tal vez iba demasiado rápido. No quería asustarla, así que alejé mi rostro de el de ella y terminé de cubrirla con mi capa de la forma mas cariñosa que pude.

Ella no lo sabía, pero este era el comienzo de el resto de nuestras vidas...

Estocolmo (ItaSaku)Where stories live. Discover now