La troublemaker y Mr.Suit

Hermana de un angelito

1. El matricidio

Te ves hermosa.- Lana.

Gracias a todas por estar aquí... y Noah colocate el traje.- Sarah.

Te refieres al vomito colorido de aquella esquina.- Noah.

¿No podrías comportarte una vez bien en tu vida?- Sarah.

¿No podrías dejar de decirme que hacer? Ya me colocaré tu vomito colorido.- Noah.

Noah

¿Como entran las bubies en esta cosa? La tonta de Sarah no sabe que no soy talla -400.- Pienso.

No sé como respiraré con esto.- Yo.

Deja de quejarte y sal.- Sarah.

Salgo me miro al espejo parecía un embutido todo rosa pastel esto... Esto es horrible. Grito por dentro y trato de mantener la compostura.

Las otras damas de honor las maquillaban y yo intentaba colocarme los tacones cuando... ¡Mierda! ¡Mierda!

¿Que fue ese ruido?- Sarah.

El tacón casi lo dejo caer.- Yo contra la silla.

Sarah me va a matar, me va a matar... Calmate Noah sólo manten la compostura y colocate ese tacón busca tu chaqueta y colocatela, no debió ser tan malo.

En eso tocan la puerta y se escucha una voz masculina... Mm... ¿acaso Steven no puede esperar la luna de miel?

Su séquito de oxigenadas le impiden el paso a Steven menos mal quien aguanta a mi hermana con su ansiedad.

Honey sólo espera.- Sarah.

Creo que me va a dar diarrea Sarah a veces es tan cursi, pero es feliz y si ella es feliz entonces yo lo soy.

Steven se marcha y no puedo evitar esbozar una leve sonrisa, Sarah me mira y me dice:- ¿Que sucede?

Hace años que no te veía sonreír.- Yo.

A ver levantate queremos verte caminar con esos tacones.- Carly.

Y vino la marrana y daño la canasta, Dios me arrepiento de todos mis pecados le dejo mi herencia a mi gata Lou.. ¡TRAGAME TIERRA Y NO ME ESCUPAS!

Me levanté rogando no caerme de cara contra el piso, pero no me salvaría de la ira asesina de Sarah Stone.

Me levante apenas lo hago, ella me dicen:- Camina.

Hago eso, pero parecía que matara cucarachas este traje talla -400 me está dejando sin aire... Lo que me haces hacer Sarah.

Perfecto.- Kristina.

Iuu- Yo.

Apenas hago eso aquel botón termina de salir volando como un proyectil dándole al espejo, aquel vestido se me baja hasta el piso quedando en ropa interior.

Los ojos de Sarah se abren como platos, ella se levanta y me dice:- ¡TU MOCOSA INSENSIBLE!

Mami.- Pienso.

El espejo está roto son siete años de mala suerte.- Lana.

No, no, no ¿Donde está mi amuleto?- Sarah esculcando sus cosas.

Sarah...- Yo.

¿Que?- Sarah molesta.

Sarah lo siento.- Yo.

¿No hay más vestidos?- Sarah.