Teah

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Siempre fui estudiosa, me gusta aprender cosas nuevas, y soy buena recordando información. Sin embargo, odiaba ir a la escuela. ¿La razón? Patrick Holland. Mejor conocido como Paddy ElNiñoQueDisfrutaHacermeBullying Holland.

Nunca fuimos muy amigos, pero no recuerdo llevarnos tan mal cuando éramos más pequeños.
Todo empezó cuando cumplí seis, y comenzaron a llevarnos a la misma escuela.

No recuerdo el día en el que Paddy no pegara cosas en mi asiento. Todos los días era algo nuevo, realmente tenía una imaginación asombrosa al inventar tantas técnicas para hacerme la vida imposible.
No me humillaba frente a los demás, era la única cosa buena que tenía: compasión.

Pero vaya que le gustaba verme sufrir.

—¿Lista para ir a la escuela? —preguntó papá con una sonrisa en los labios, colocando un vaso con jugo de naranja frente a mí.

—¿Aún puedo fingir que estoy enferma? —pregunté con una mueca en los labios.

—Creo que tu madre dejo de creerte esa mentira desde los nueve —hizo una mueca, volteándose nuevamente.

—Hola familia —saludo mi hermana mayor; Brianna.

Era en definitiva, mi persona favorita. Brianna era divertida, y muy buena hermana.

—¿Les comenté que se van a ir con los Holland hoy? —preguntó mi mamá, bajando las escaleras.

—¡No! —gritamos Bri y yo, al unísono.

No tenía problema con los Holland mayores. ¿Pero compartir el mismo aire que Paddy? ¡Era una pesadilla!

—¿Por qué tan negativas con el apellido Holland? —se acercó mamá a dar un beso en nuestras frentes.

—¿Has visto cómo me trata Paddy, mamá? —pregunté sorprendida de su falta de observación. Mamá soltó una carcajada y negó.

—Son travesuras de niños, Teah.

La mire con los ojos entrecerrados, y me dispuse a terminar mi cereal.

Brianna y yo nos encontrábamos sentadas a un lado de Tom en el auto. Bueno, al menos nos sentamos junto al que nos caía bien, Harry también era buena persona, pero mi favorito era Tom.

—¿Están emocionadas por comenzar la escuela? —nos preguntó el señor Dom, quién manejaba con dirección a la escuela.

—Si, un poco —contesto Brianna por ambas.

Sam soltó una breve carcajada, y lo miramos con duda. ¿De qué se reía?

—Nos tocara en el mismo salón, Teah —me miró Paddy con una sonrisa. Oh demonios, sabía que esa sonrisa era falsa.

—Que bien —sonreí forzadamente, y miré incómoda hacía la ventana.

—Harrison estará en mi salón. Por fin tendré con quién hablar —comentó Tom.
Su mejor amigo era parte de la familia Holland, por ende, era como amigo de nosotras. Más de Bri que mío.

—Harrison me cae bien. ¿Estarán en clase de actuación? —pregunto mi hermana, y se enfrascaron en una conversación de adultos.

Después de unos minutos conduciendo, el señor Holland nos dejó en nuestra escuela. Cómo Paddy y yo fuimos los últimos en bajar, nos dijo lo siguiente:

—¡Qué tengan un excelente día, niños!

Camine delante de Paddy por unos segundos, hasta que me alcanzo y me hizo parar en seco.

—Este año tengo nuevas ideas para seguir molestándote. No te vas a salvar de esta, Martin —me guiño el ojo, y camino delante de mí.

¿Cómo era que una persona tan pequeña tuviera tanta maldad en su ser?
Aterrada por su comentario, coloque ambas manos sobre las correas de mi mochila, y me encamine a lo que sería el mismisimo infierno.

Wrong SpellWhere stories live. Discover now