Capítulo 6

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Testamento y Sorpresas.

Dos días han pasado desde el trágico suceso de la muerte de Thomas Beckett. Zayn se ha levantado muy temprano y ha ido a la empresa para, según Henry, conocer algunos asuntos de vital importancia que debería saber antes de que tome el mando oficialmente de Beckett Corp. Creo que Henry está aceptando que tarde o temprano Zayn tomará las riendas de la empresa familiar.

Entre tanto, me dirijo al cuarto del joven Noland para obtener información acerca de Janine. Si hay alguien en toda la tierra que pudiera revelarme quien en realidad es Janine Beckett, ese sería Noland, el menos interesado a lo que pudiera acontecerle a la familia Beckett.

—Janine siempre ha sido una mujer muy fría —comenta Noland—, sabia y calculadora. Siempre se sale con la suya y muy raramente parece recibir daño de cualquier ataque que se le haga de frente. Su nivel de manipulación es muy sutil, casi imperceptible. Ella ha demostrado ser la verdadera cara de la indiferencia y la maldad.

Noland se oye muy seguro al hablar de este modo de su madre, y le creo. Es decir, ¿cómo no creerle a un joven ciego que vive todo el día encerrado en su casa y que su única compañía es su mayordomo, al cual le paga?

—Oye... —digo, cambiando un poco de tema— Te felicito, por primera vez noto que saliste de tu habitación en presencia de todos.

—Tenía que hacerlo. No podía faltar al funeral de mi abuelo. Después de todo soy un Beckett, ¿no? O eso es lo que siempre me han enseñado desde pequeño.

Miro una foto de Janine junto a sus tres hijos que reposa sobre la mesa de noche de Noland y eso me hace pensar que todavía no conozco tanto de Janine como me gustaría conocer.

—¿Noland? —pregunto algo tímida, quizás con temor a decirle algo a Noland sobre su madre que pudiera ofenderlo.

—¿Sí? —me responde éste sin la más mínima pizca de curiosidad.

Formulo varias veces la pregunta en mi cabeza para lograr decir algo que no se note sospechoso o quizás que no parezca que soy una entrometida.

—¿Qué sabes del pasado de Janine? —le interrogo.

—Mmm... ¿El pasado de Janine? —repite—. ¡Hum! No me había preguntado eso jamás. Supongo que es un misterio.

Eso, misterio. Una mujer que pertenece a una familia mundialmente adinerada y no se le conoce pasado o historia. Sus hijos solo podrían describir su vida como un misterio. Afortunadamente, resolver misterios me sienta muy bien.

Le agradezco muchas veces a Noland por contestar mis preguntas, salgo de su cuarto con dirección al mío y es cuando el estruendoso sonido de una discusión hace que cambie mi ruta de mi habitación a la de Josh.

Por la ranura de la puerta observo a Valeria, y posteriormente a Josh quien se nota airado contra esta. Llanto, ruidos y gritos sobresalen de las paredes, pero al parecer soy la única que se ha dado cuenta de tal discusión.

—¡¿CÓMO PUDE SER TAN TONTO, VALERIA?! —expresa Josh con voz excesivamente alta.

—Perdóname, Josh... —agrega Valeria en llanto—. Mi intensión nunca fue herirte...

—¡Pero lo hiciste, Valeria! ¡ERES DESPRECIABLE!

Valeria solloza, llora y llora con mucho dolor notable. Su nariz podría asimilarse a un tomate por lo roja que está, al igual que sus mejillas; el cabello que cae por su rostro esta un poco húmedo, consecuencia de tantas lágrimas que ha derramado. Esto se ve muy personal, tal vez debería dejarlos solos...

—Josh, yo...

—¡Olvídalo, Valeria! ¡Jamás volveré a creerte! Lo único que lamento es no haberme dado cuenta antes...

Incomprendido  © [EDITANDO]#2Where stories live. Discover now