5

1.5K 112 5
                                    

Cuando estábamos llegando comenzó a llover más fuerte.

-Un segundo.

Me acerqué a unos bicicletas que estaban apoyadas casi en medio de la carretera y cogí dos.

-Necesitamos un medio de transporte mejor que nuestras piernas.

-¿Las has robado?

-Se llama tomar prestado Ce.

Nos montamos en las bicis y pedaleamos hasta la piscina donde todo el mundo salía corriendo.
Fuimos hacia la "recepción" y habló Max.

-Perdona.

-Nadir se baña hasta 30 minutos después del último rayo. No me llevéis la contraria. Para electrocutaros, subid a un árbol.

-Nos da igual. No hemos venido a nadar. Ni a electrocutarnos.

-Hemos encontrado esto.

El socorrista levantado un poco la cara y pide observarle bien y ver que era Curtis Ben una de mis personas más odiadas en este planeta tierra.

-¿Es de alguien de aquí?

-Sí, es de Heather. Se lo daré.

-Podemos dársela nosotras.

-Claro. Pero no está. Hoy no ha venido.

-Eres tan simpático que me está dando una subida de azúcar. –Le sonreí sarcásticamente.

-¿Qué pasa? ¿Queréis una recompensa?

-No, solo hacemos lo correcto.

Ce se alejó sin avisar y tanto Max como yo le seguimos hacia un tablón con fotos de los socorristas.

-Heather.

-¿Podrás localizarla?

Ce arrancó la foto.

-¿Los distraigo?

-Sería de gran ayuda eso.

-Tener cuidado estaré aquí.

Las chicas se fueron hacia no se donde y yo volví a la recepción.

-¿No estáis aburridos?

-¿Que quieres?

-Joder sois muy bordes.

Me apoye en el mostrador haciendo notar mis pechos más y Curtís no pudo evitar su mirada.

-Estaba aburrida y pensé que quizás tú querrías jugar un rato.

Trago saliva duramente.

-Samantha, si quieres ya ha terminado tu turno  no diré que te has ido antes.

-¿Enserio te gusta esta tía?

Me miro mal y salió por las puertas principales.

-He odio que estuviste fuera de Hawkins un tiempo.

-Necesitaba salir de este pueblo, me estaba ahogando.

-Perdimos a nuestra belleza de Hawkins.

-¿Billy tampoco ha venido a trabajar?

-Quizás seas una cornuda.

-Billy y yo lo dejamos hace tiempo.

-Pues no parecía que él lo hubiera superado. Cualquier persona que hablara de ti se llevaba un buen puñetazo de su parte, no dejaba que tu nombre fuese mencionado impuramente.

- Pues felicidades por el.

Max y Ce salieron corriendo de donde estaban.

-¿Ellas seguían aquí?

Ephemeral // Billy HargroveWhere stories live. Discover now