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Xander



Acaricio la cintura del Omega que yacía entre mis brazos con sus ojos cerrados, hice aún lado un poco su cabello y sonrió al momento que rocé mi nariz sobre su mejilla enrojecida.

Abrió sus ojos y solo sonrió poniendo su mejilla en mi pecho, sonriendo tímido mientras dejaba caricias lentas.

Volvi a inclinarme besando aquellos espojosos labios, disfrutando de estos mientras acariciaba su muslo desnudo sintiendo su piel suave bajo mi tacto.

— ¿Tomaste tus supresores? - Asiente lentamente, abrazando con tanta delicadeza mi abdomen, su tibia piel era algo reconfortante olfateo su aroma dulzón.

— Sip,ya lo hice,no quiero cachorros aún — me sonríe y suspira en mi pecho.

Besé su cuello, soltando un suspiro lento al sentir el pequeño movimiento de caderas.

Jamás había estado con alguien en mi celo, no creería que sería así.

— Tenemos que comer algo — dije y el se queja — solo me has comido a mi, no me quejo pero mi estómago gruñe.

Se sienta sonrojandose.

— Eres un idiota.

Sonreí y tomo su cintura y lo subo encima de mi cuerpo, miré un poco esas marquitas que habían quedado en su suave piel. Mi lobo gruñe de forma posesiva.

— No sabes que vergüenza tengo,mis padres nos olfatearon, que más podemos hacer.

Rie nervioso y cubre su rostro.

— Qué buena forma de conocerlos — dice con ironía y pone los ojos en blanco y sonreí acariciando su mejilla.

Acaricié aquel lunar debajo de sus labios y lo miré bien.

— D-deja de verme — murmura rojo, con sus ojos brillando y sonreí pícaro.

— No puedo evitarlo — lo acerco más a mi — eres muy hermoso.— Abre mas sus ojos completamente sonrojado y su cabeza se esconde en mi pecho y río abrazandolo.

Amaba que se sonrojara, mis dedos pasean sobre su piel desnuda y besé su cabello,no he sentido el sol casi una semana,por estar con el,no me molestaba,me gustaba estar con el.

— Tengo hambre — murmura con su mejilla presionada en mi pecho.

Yo también tenía hambre.

—Vamos.-  asiente arrugado la nariz.

—Adon..

—Iremos por algo de comer.

Enreda en su cuerpo la sabana pero yo la tiro y dejando su cuerpo desnudo y sonreí ladino un poco, pude ver su rostro completamente sonrojado soltando un chillido.

Sus muslos, cadera, cintura, mierda, casi todo el tenía mis dedos marcados, pude ver aún mi mano marcada en su trasero.

— Te conozco, se cuantos lunares tienes en tu cuerpo incluso,no tienes que avergonzarte.

Hace un puchero y corre al baño, cerré mis ojos y sonreí recostandome.





— Mis padres vendrán — menciono y el me mira asustado, incluso pude sentir su miedo a través del lazo.

Su mejillas se colorearon de un rojo cereza y mastica lentamente la comida, moviendo sus piernas rápidamente.

Marcado[1]Where stories live. Discover now