Todas mis vidas, capitulo 6

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Descubrir que no es lo mismo ir de vacaciones a un lugar que vivir en él, mi abuela y mi tía que me parecían cariñosas, se volvieron en dos personas duras e intransigentes que yo no conocía, mis amigos de vacaciones me veían mal, como si estuviera fuera de lugar, además por el país parecía que se extendió una especie de rechazo a todos los que nos vimos obligados a emigrar de la capital a provincia y se acuñó la frase “haz patria, mata un chilango”( chilango = a los que provenimos de la capital). En fin todas las emociones mezcladas, sufrimiento, miedo, incertidumbre, sentirte incapaz de todo, me sentía superada a mis 10 años, sólo pensaba en por qué me pasaba esto a mi ¿Qué pasó con mi mundo tranquilo? ¿Qué eran todos esos sueños raros? Por qué sólo pensaba en lo mucho que deseaba morir y relajarme de todo eso.
Estoy dormida cuando llega un niño rubio, es idéntico a mi pero en versión masculina y rubio, me toma de la mano y me dice vamos, corre, viene a por ti, no me da tiempo más que dar un salto de la cama y comenzar a correr, quiero ver qué me persigue pero él no me lo permite, me dice que no voltee que corra hacia la luz, saltamos por un muro, nos metemos por una ventana, corremos por unas escaleras, solo oigo el estruendo de la destrucción que viene a por mí, una terrible oscuridad que todo lo destruye, seguimos corriendo, no puedo más, estamos encerrados en un baño, veo como la puerta se rompe, está ahí y yo no puedo huir más, me ve a los ojos el niño y me dice mira, veo como una pequeña claridad en el horizonte, justo esta por amanecer, me aferró a su mano, salimos por la diminuta ventana del baño y corremos ya por el campo un precioso campo de trigo que se ve bañado por los rayos del sol y esa cosa que me persigue desaparece, veo al niño a los ojos y le abrazo, juntos vemos el amanecer, me despierto de un suspiró, estoy bañada en sudor como si en realidad hubiera estado corriendo por mucho tiempo.
Veo la oscuridad de la noche, lo sé, de nuevo ese sueño aterrador pero que me despierta con un rayito de esperanza, debo dormir que mañana será un nuevo día; me quedo pensando y al intentar relajarme para dormir me despierto, es de día, un olor a café y pan tostado, alguien abre las cortinas y entra el sol, me hablan en francés ¿Cómo es que lo entiendo? Me dicen que no sea más perezosa, que ya es hora de levantarme y atender mis deberes, es un sitio hermoso, decorado con primor, ella es preciosa, con sus ojos me sonríe, se acerca y me besa en los labios, mi corazón se acelera, quiero otro beso tan dulce y cálido como ese, pero… entra mi hermana gritando, te haz quedado dormida Mar, corre o te regañaran, por fin vuelvo en mi. Camino del colegio no puedo dejar de pensar en una chica que beso a otra y esa otra era yo… y me encantó, vaya noche movidita, ojalá pudiera repetir el del beso… quiero descubrir más sobre esas sensaciones y sentimientos.

Todas mis vidasWhere stories live. Discover now