슈짐 TOO YOUNG TO BE MY DADDY ♡ Yoonmin [ ̶a̶̶d̶̶a̶̶p̶̶t̶̶a̶̶c̶̶i̶̶ó̶̶n̶ ]

𝒸𝒶𝓅𝒾𝓉𝓊𝓁ℴ ℴ𝒸𝒽ℴ♡

—Quiero trazar constelaciones alrededor de tus pequeñas estrellas.— dice YoonGi sellando sus labios fríos contra el cuello del menor, haciendo una marca color frambuesa alrededor de un lunar. Jimin abre su boca sorprendido y acerca al mayor del cabello, aún más.

—Yoonie, aún estoy muy sensible.— el mayor se aclara la garganta y lo mira con una ceja levantada.— daddy.— aclara el menor, con las mejillas rosadas.
   
—¿Mmh? ¿Sí? Yo creí que eras mi buen bebé y que podías soportar todo lo que daddy te da — el mayor dice sonriendo. Obviamente pararía al segundo que Jimin se lo pida, o en cuanto vea que no está cómodo y a gusto.
   
—¡Claro que puedo! — agarra el antebrazo del mayor, asustado de que cambie de opinión y se vaya.
   
YoonGi sonríe brillante y lo envuelve con sus brazos. Une sus labios, acostándolo de vuelta en la cama y haciendo que enrede sus largas piernas en su cadera. Acaricia todo lo que tiene a su alcance de la suave, blanca y sonrojada piel de su bebé mientras lo besa como si no hubiera un mañana. Se separa para colocarse otro condón. Jimin arruga la nariz, preferiría sentirlo sin la pequeña barrera de látex, pero entiende que la seguridad de ambos es primero.

YoonGi lo gira y lo pone de costado, abrazándolo por detrás, mientras acaricia sus muslos, dejándolo como la pequeña cuchara. Jimin gira la cabeza hacia atrás, para mirarlo con el ceño fruncido.
   
—¿Vamos a dormir? — pregunta confundido. El mayor ríe roncamente y en respuesta levanta su pierna izquierda en el aire, dejándolo expuesto. Jimin siente la punta de la erección de YoonGi en su entrada y se estremece murmurando un — oh... — sin aire.
   
No le da tiempo de entender mucho lo que está pasando porque el mayor se entierra en él, extremadamente lento. Siente como si sus pulmones estuvieran quemando sin aire, pero al mismo tiempo está tomando grandes bocanadas de aire, como si nadara en una piscina y pudiera respirar bajo el agua.
   
Jimin gime, sintiendo la necesidad de apretar algo entre sus dedos. Agarra el borde de la cama hasta dejar sus nudillos blancos mientras YoonGi entra y sale sin parar. El mayor tiene un brazo alrededor del estómago del niño y el otro sosteniéndolo del muslo en el aire, dejando leves marcas rojas de su mano. Lo embiste sin parar, dando cada vez más profundo, justo en el punto más sensible del menor.
   
—Te encanta ser jodido por mí ¿verdad? Que te haga sentir tan bien — ronronea. Cada palabra que sale de su boca es excesivamente lenta, volviendo loco a Jimin.
   
—Eres el m-mejor — intenta decir, llevando su mano al cabello del hombre, acercándolo para que bese su cuello por detrás.
   
El toque de YoonGi lo quema y hace que algo dentro de él se sienta vivo, que crezcan pequeñas flores en su corazón. El mayor sale de él y lo deja boca arriba. El ángel lo mira con pena, avergonzado — eres precioso — murmura, sonriendo con los labios apretados. Quita los cabellitos que caen en cascada sobre el rostro del pequeño y deja un beso en su frente.

— Veintiuno... — susurra el menor, sonrojándose por romper su propia regla. Se acomoda mejor en la cama para YoonGi. Este lo mira a los ojos por unos segundos.
   
—¿Sabes, Jimin? Para el amor no hay edad, ni sexo, el corazón se enamora de quien quiere y está completamente perfecto. No tienes que obligarte a ser alguien que no eres, te puede gustar cualquier persona — tose — si es posible yo, ya que estoy intentando enamorarte en estos momentos — le guiña.
   
Algo parece hacer click en la cabeza del menor y se acerca a dejar un beso en los labios del mayor.
   
Vuelve a enterrarse en Jimin hasta dejarlo completamente lleno y comienza a moverse lento y profundo, haciendo que el pequeño se deshaga en gemidos en sus brazos. Rasguñando la espalda dorada del hombre y envolviéndolo con sus piernas.
   
—Daddy, dios mío — dice entre jadeos.
   
Esta vez no dura mucho, solo un par de minutos y ya tiene al menor corriéndose otra vez en su estómago. YoonGi sale de él y se quita el condón, masturbándose sobre la pancita del menor. Este lo mira sonriendo y mordiendo su labio inferior —vamos daddy... — al segundo se corre gimiendo el nombre de Jimin.
   
—Me mojaste, daddy, ahora estoy todo pegajoso — ríe suave — y me duele un poquito — agrega haciendo un puchero y llevando sus dedos para tocar su entrada roja, intentando calmar un poco el dolor.
   
—Perdón, amor — dice el mayor, mirándolo travieso y un poco preocupado, por si le hizo mucho daño.

—Si cuando tengamos sexo va a ser así de bueno creo que te necesito en mi vida — bromea Jimin, sintiendo sus ojos cerrarse lentamente.
   
—Déjame decirte que puedo hacerlo aún mejor — sube y baja las cejas, con el ego sobre las nubes por haber conseguido estar con el chico más precioso del mundo.
   
—No creo que eso sea posible — dice avergonzado, intentando subir las sábanas para cubrirse, se siente demasiado expuesto.
   
—Ah, ah, ah — YoonGi lo reta suave, lo levanta, llevándolo al baño y lo deja sobre la tapa del inodoro con cuidado.
   
—Yoonie, estoy cansado — lo mira con fastidio al notar que este está llenando la tina de baño.
   
—No hay problema, cariño, yo te limpio.
   
Jimin asiente y se mete en el agua con burbujas una vez que está llena. Cierra los ojos y deja que YoonGi haga el trabajo.
   
El mayor lo mira sin parar, ambos brillan como el sol cuando sus miradas chocan. Hace su mayor esfuerzo para dejar a su bebé perfectamente, está muy cansado y para ser honesto sólo quiere ir a dormir, ya que al día siguiente tiene trabajo. No hace esto para tocar más a Jimin —bueno, sí, pero no es el punto– ni por ser un pervertido o algo, lo hace porque siente la necesidad de protegerlo y hacer que esté cómodo, y con semen seco en su estómago y dolor no va a amanecer muy bien, así que decide mimarlo. Pensando que en la mañana le hará un rico desayuno de panqueques y fruta.

Al terminar lo envuelve en una gran toalla blanca y lo lleva a su habitación otra vez, obligándole a ponerse uno de sus buzos y un par de bóxers, ya que en la madrugada hace un poco más de frio, y lo arropa bien en la cama, dándole varios besos en el rostro. Vuelve a tomar una ducha rápida y se acuesta con el menor, abrazándolo por detrás.

¿Es posible enamorarse en una noche?

Jimin ahora cree que sí.

 
💌 fin. 💌

¿Que tal? ¿Que les pareció?
Espero les haya gustado... A mi me encanto DIOS MIAAA. Me encanta JAJAJA

Muchas gracias a @thespacetapes por darme el permiso de adaptar su gran obra :') y tiene más historias por si quieren pasar a leerlas<3 estoy segura que las van amar.

Bueno me despido y muchas gracias por el apoyo y amor que le dan a mis adaptaciones...:') las amo y descansen.❤