He's Beautiful || Tony × All

IronDevil

Pareja: Tony Stark × Matt Murdock.
UA: Tony es joven.

Incluso cuando Howard le había prohibido totalmente que saliera con Murdock, Tony siguió haciéndolo, se veían a escondidas en la calle, cuando Tony salía del colegio, se fugaba de su casa para ir a la del abogado. Talvez solo era la adrenalina de hacer algo que le había sido prohibido o la estupidez hormonal que tenía al ser un adolescente y la tercera opción era que se había enamorado perdidamente y había decidido arriesgar todo.

No solo entregó su corazón, también su cuerpo, le gustaba como lo tocaba, como lo hacía sentir cuando recorría con sus manos el cuerpo del castaño. La manera en que sus manos lo sujetaban por la mañana, como clavaba su verdosa mirada sobre él y le sonreía. El pequeño Stark olvidaba cualquier cosa cada vez que eso pasaba.

Se inclinó y dejó un beso en su mejilla. No le contaba muchas cosas a Tony, no le decía que, por las noches, cuando no estaba con él era porque salía a luchar contra criminales pero pronto las heridas se volvieron más graves y Matt ya no podía excusarse diciendo que se había golpeado. Tony no era tonto, comenzaba a sospechar.

Un día mientras esperaba que Matt volviera con la comida tailandesa, abrió el clóset donde encontró un baúl viejo y grande, la abrió y encontró el traje que Matt usaba. Sus ojos se llenaron de lágrimas, tomó el casco y lo observó.

  - ¿Tony?-. Matt entró al departamento, dejando la bolsa de comida sobre la mesita que estaba a un lado de la puerta.

El nombrado se acercó con el casco en mano. -¿Cuándo pensabas decirme? Matt, has estado mintiendo todo este tiempo-. Puso el casco en manos del abogado.

  -Tony yo...-. Palpó el material y suspiró. -Amor...-.

  -No, no quiero oír nada. Papá tenía razón, no se en que estaba pensando-.

Se dirigió a la habitación, se quitó la camisa de su pareja y se cambió lo más rápido que pudo.

  -Anthony, no te vayas, déjame explicarte-. Pidió parándose en el marco de la puerta, tapando el camino del menor.

  - ¿Qué vas a explicar? Que por las noches tú decides ponerte eso y salir a golpear gente-.

Matt suspiró. -Son criminales-.

  - Y tú un abogado, deberías saber que las cosas no se resuelven así-. Limpió sus lágrimas. -¿Y si algo te pasa? Idiota, no sabes como yo me sentiría...-. Comenzó a llorar nuevamente.

  -Lo siento-. Se acercó al menor y lo abrazó con cuidado. -Lo siento bebé...-. Beso su frente suavemente.

  -Es s-solo que te amo demasiado...-. Susurró entre lágrimas.

  -Te amo más-. Lo tomó del mentón y lo beso.

Tony rodeó su cuello, teniendo que pararse sobre las puntas de sus pies para alcanzarlo, Matt amaba lo pequeño que era. Lo alzó y lo llevó a la cama.

  -No vayas a la escuela, no lo necesitas-. Le susurro mientras volvía a quitarle la ropa.

  -Papá va a matarme...-.

  -Va a matarme a mí-. Sonrió girandolo una vez desnudo, bajo sus pantalones y jadeo ingresando en el menor. -Ah... pequeño...-.

Tony gimió sonrojado mientras se sujetaba a las sábanas con ambas manos. -Más...-. Susurró estremeciendose al recibir la primera embestida.

Los dientes del abogado marcaron la piel del joven genio, ya lo ayudaría a cubrirlas después. Sus manos se deslizaron por toda la suave piel del castaño, escuchando como su respiración se agitaba cada vez que volvía a entrar. Escuchó su corazón latir aceleradamente, no era solo por el esfuerzo que su cuerpo estaba haciendo, los latidos de Tony aumentaban cada vez que lo abrazaba, besaba o con solo verlo.

  -Te amo-. Tony susurró, creyendo que no sería escuchado.

Murdock se inclinó, llegando más profundo en él. -Mi amor, yo lo hago aún más-. Le susurro al oído, sonriendo antes de que el orgasmo los invadiera.