Mis tres papás , mi mamá y yo (#7 Saga bebé)

Los papás debemos estar unidos II

Malcom:

—¿Te sientes mejor?.—Le doy un vaso con agua a Kelly.

Estamos en los pasillos, donde no hay muchas personas y creo que ambos necesitábamos un poco de tranquilidad.

De pronto, ella en lugar de responder mi pregunta, hace la suya.

—¿Tú padre te hace daño?

Sorprendido me vuelvo hacia ella.

—No, claro que no.

Me observa incrédula.

Se acerca a mí.

—Malcom, dime la verdad.

Su rostro se encuentra cerca al mío y realmente veo preocupación en ellos.

—No.—Pronuncio.—No lo hace.

La observo tragar saliva y asiente.

—De acuerdo.

Retrocede y aparta la mirada, me rasco la nuca.

—Tal vez debemos entrar, empezaran a preguntar por mí..

—Creo que es mejor que me vaya.

Frunzo el ceño.—¿Qué?

Kelly vuelve a mirarme.

—Creo que debo irme y ...—Traga nuevamente.—No debemos seguir pasando más tiempo juntos.

Siento que me hace falta la respiración.

Se encoje de hombros.—Hiciste un gran avance hoy con Brooklynn, ya no me necesitas... en poco tiempo volverá a ser tuya.

¿Realmente está diciéndome todo esto?

—¿Era lo que queríamos?

—¿Queríamos?.—Cojo la palabra.

Ella no responde.

Su teléfono suena y bajo la mirada, es el, claro que es el.

—Tengo que irme.

—¿Vas a encontrarte con él?

Ella no responde mi pregunta.

—Adiós, Austin..

Cuando empieza a alejarse, no puedo evitar que las palabras salgan.

—¿Vas a abandonarme igual que todos?

Se detiene y se vuelve hacia mi.—¿Qué?

Me acerco a ella.—Igual que todos .. todos los que me abandonan al conocer a mi padre, mi familia.

Me observa sorprendida.

—Ahora tú..

—No te estoy abandonando..

—Dijiste que somos amigos.

—Sí, somos amigos.

—¿Entonces por qué ? No me importa lo que mi padre diga.. hace unos minutos yo..—Hago una pausa y cierro los ojos, los abro después de tomar unos segundos.—Nunca antes lo había enfrentado como lo hice y fue por ti.

—No lo hago por eso.

—¿Entonces.. Porqué?.—Le pregunto.—Dime porque me abandonas..

Su jodido teléfono vuelve a sonar, ella lo mira.

—No contestes.

Sus ojos vuelven a mí.

—Tienes a Brook, Malcom..—Me dice y veo algo en sus ojos.—No puedes tener las dos cosas y no sé si yo podre ser capaz de ver..