VIAJE A TU CORAZÓN

PARTE (2) SE ALEJÓ HACE AÑOS, PERO SUS RECUERDOS SIGUEN INTACTOS...

Pasado

31 de julio del 2009

Uno de los sonidos más tristes es cuando intentas decir algo importante y mientras lo dices tu voz se rompe en cada palabra.

Lo primero que note cuando la oscuridad se desvanecía, fue un mareo y durante el minuto siguiente tuve una sensación el estómago como si estuviera en una montaña rusa bajando a toda velocidad desde el punto más alto. Duro un par de segundos más hasta que pude enfocar la habitación y un quejido de dolor se escaparon de mis labios cuando intente levantarme y mi espalda dolió.

Intente respirar hasta que las luces negras y aquellos destellos de luz  en mis ojos desaparezcan  por completo, mi mirada viajo por toda la habitación y se quedaron en la figura que dormía en una de las camas. Quería levantarme pero mis piernas se sentía tan pesadas al igual que mi cuerpo que tuve que permanecer sentado en suelo otro minuto más.

¿Había funcionado? ¿Viaje en el tiempo? ¿Era siquiera eso posible?

El reloj todavía seguía en mis manos. Estaba intacto sin ningún rasguño.

Apoye mis manos en la cama y me impulse levantándome y haciendo el menor ruido posible para no despertar a mi compañero de habitación. —hyung, ¿Estás bien?— pregunto Yoochun, se sentó en la cama mientras se restregaba los ojos tratando de enfocarme en la oscuridad.

—Sí. —respondí con el corazón en la boca. Tengo sed, iré por un vaso a la cocina.

—Oh, sí. —murmuro volviéndose a costar. Abrí la puerta y salí, todo estaba exactamente igual a como lo recordaba. Las habitaciones, el baño y los cuadros en las paredes. Sentía una extraña nostalgia y mis lágrimas no tardaron en aparecer. Me encerré el baño y estalle en llanto.

Un golpe en la puerta hizo que me quedara en silencio. —Jaejoong. —la voz de Yunho detrás de la puerta hizo que permaneciera en silencio. Llevándome una mano a la boca para contener el llanto.

—Jaejoong. —volvió a decir mi nombre.

—Estoy bien. —conteste aclarándome la garganta.

Ambos nos quedamos en silencio, y luego las pisadas de Yunho se escucharon por el pasillo. Me sentía tan confundido, pero todo era tal real o era otro sueño. Como podía recuperar a Yunho y hacerle saber que lo sentía de verdad.

—Jaejoong —la voz del Ángel, retumbo en las paredes de la habitación y gire mi cabeza hacia  ella sorprendido.

— ¿Es un sueño? —fue lo primero que pregunte. No había otra manera que ella estuviera aquí.

— No. —sonrió. Esto es real, —ahí dijo señalando a mi teléfono en mi bolsillo.

Saque mi teléfono de mi bolsillo y mis ojos se abrieron con sorpresa al ver la fecha y hora, 31 de octubre del 2009, 3:30 am.

— ¿Cómo puedo verte?

—Es algo muy poco común que los humanos vean a los Ángeles, hay casos especiales, pero es difícil de explicar. —Estoy permitiendo que me veas. —su mirada se posó en el reloj y entonces continuo:

—Olvide decirte un par de cosas antes, hay un par de reglas que debes seguir. Mientras estés en este mundo paralelo trata de comportarte como un chico de 20 años—señalo el espejo de baño indicando mi reflejo.