•IMPERIUM• [higuel][AU!]

1.13

No, no te equivocaste, así va el (des)orden de publicación.

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En el calabozo del sur

Gusto de ver a la rubia encadenada, si, pero solo una parte de él disfrutó de ello, la otra, por supuesto se sentía culpable.

—No temas querida— Hablo despacio, pausado, saboreando las palabras que hacían eco en la pequeña habitación—Tu sangre nos dará libertad—

La rubia se tensó pero no retrocedió ni un centímetro, se dibujó en su cara una sonrisa irónica, alzó su mirada a la del rey emplumado.

—¿A esto tu le llamas libertad?—escupió señalando las cadenas.

—Es un bien mayor, para ti, para todos—Ernesto le apartó el cabello enmarañado de la cara—La magia es injusta, tu y yo lo sabemos— chasqueo los dedos y los miembros de la guardia del sur sujetaron a la chica de brazos piernas y cuello— Nos quita la vida, nos carboniza cuando aún estamos vivos, nos convierte en estatuas...— Ernesto tendió la daga con forma de cola de escorpión a un miembro de la guardia que inmediatamente le hizo un corte a la rubia— Nos convierte en monstruos—

<<Eso se acabó, porque con tu ayuda, con la ayuda de todos los que aún poseen algo de poder, la someteremos, será nuestra, será estable y moldeable justo como lo queria tambien el norte hace decadas atras>>

La chica dejo de moverse, total ya había conseguido lo que buscaba, en su lugar se volvió a la puerta donde se asomaba un chico que no sería más joven que ella.

La rubia no escucho lo demás que dijo el rey del oeste ni los insultos de los sureños después de herirla, ella solo esperaba a que chico de los ojos rasgados que se había asomado a su celda se acercara nuevamente.

Y cuando por fin lo hizo...

—Tadashi, ¿cual es tu nombre?— Le había preguntado el Joven que vestía uno de los uniformes de la guardia sureña.

—...—

Cuando al fin el muchacho llegó y le dio de lo que la mantenía estable en aquel infierno, agua del este, vio una oportunidad y la tomó.

—Honey— Le sonrió lo más amable posible.

Escapó.

Kyle se acercó a Tadashi que seguía en el suelo fingiendo estar inconsciente

—¿Tu crees que te agradecerá?— le tendió la mano a su mejor amigo

—No importa— Tadashi se levantó del suelo tomando la mano de Kyle — mientras se mantenga a salvo—

—Te acabas de meter en un problema muy grande.

—Tiene un gancho firme— Ignoro por completo a Kyle sobandose la mandibula.