Arde: Flamas

¿Qué nos queda?

La brisa marina nos acaricia a todos.

El mar inmenso e increíblemente desconocido abarca nuestra vista.

Es un día precioso, el sol nos abraza con sus rayos, y las nubes de tormenta han dejado una tregua.

El agua bajo nuestros pies es transparente y nos deja ver múltiples especies sorprendidas ante la visita.

Mi pelo negro y rojo se me cruza en mitad de la cara y con una mano lo retiro.

En la otra mano llevo una urna con las cenizas de Milas, yo mismo me encargué de reducirla, no fue nada cómodo, pero me apoyé en la idea de que es lo que ella querría.

Me giro hacia todos... tienen un aspecto horrible.

Están exhaustos, después de mi combate contra ellos, después de desenmascarar a Trock, de volverse Las ascuas... han sido demasiadas cosas incluso para mí... no me quiero imaginar para ellos.

Todos llevan la pena a su manera, Elena deja ver pequeñas lágrimas que lentamente van resbalando por sus sonrojadas mejillas.

Mirtes tiene las alas extendidas para bloquear el viento, aunque no me mira de frente también veo lágrimas resbalando... quizás haya cambiado... pero sigue siendo Mirtes.

Xir y Xer están a la contra.

Mientras uno parece hundido completamente el otro parece intentar seguir adelante con todo.

Nier crea pequeños círculos en el agua con el dedo índice, está sobre una pequeña plataforma de metal que Elena dio vida.

Flex se acerca y dice:

-Sé lo mucho que queríais a Milas, y las miles de cosas que queréis decir ahora y las cuales no salen... así que intentaré decir algo yo:

Milas era querida por todos, era como la hermanita del grupo, sonriendo siempre, ayudándonos siempre que podía...

Quizás nunca le devolvimos todo lo que hizo... lo suyo nunca lo quería compartir con los demás... para ella eso sería darnos cargas...

Una vez...- se recompone para no intentar llorar. –Una vez se me acercó y me dijo que este mundo era cruel... que la había traído sola a este mundo tan duro... pero que encontrarnos... fue le mejor que le pudo pasar jamás.

Me dijo que todas las noches pensaba en nosotros, en nuestros problemas... daba las gracias por estar todos juntos. Deseaba estar siempre todos juntos.

Estaba preparando una sorpresa para todos.

Estaba salvando planetas lejanos y reuniéndolos en una galaxia.

Cada planeta nos representaba a cada uno de nosotros... ... y después decía que no tenía poder, que tonta.

Y... y ahora no está, nos la han quitado pero... ahora nos toca vivir por ella, vivir la vida que ella no puede, la vida que siempre deseó.

Cumplir su último sueño... que todos estemos juntos.

Se me acerca y asintiendo con la cabeza le entrego la urna.

Tras esto esparce las cenizas, las cuales vuelan y se hunden en los límites de nuestro mundo.

Nos quedamos largo tiempo mirando el horizonte, ahora todos lloramos recordando momentos vividos con ella.

Poco a poco la gente se retira a mi casa, la cual hemos decidido volver el piso franco y fortaleza de Las ascuas.

Pensar que ya no la veré mas, que han acabado con ella con una muerte horrible. Ella... la que menos se lo merecía.