Si al final tengo tu amor; [ Harco ]

• 22; Buscando un refugio.

Harry fue el primero en salir cuanto abrió la puerta de armario esperando no haber llegado a ningún lugar malo pero para su buena suerte, el armario seguía de exhibición en Burgin & Burkes situado en el callejón Knockturn.

Salió primero con la varita en alto esperando que nadie estuviera cerca ya fuese del lado malo, así que detrás suyo salió Draco cerrando el armario detrás suyo como si alguien los estuviese siguiendo y los fuese a atacar. Ambos miraron a su alrededor notando que la tienda se veía medio abandonada, con muchas telarañas y demasiado polvo encima de todo.

Se acercaron hasta una de las ventanas notando que afuera estaba muy sólido, no había nadie qué estuviera deambulando por ahí.

Harry miró la chimenea del lugar y le dió una rápida mirada a Draco quién asintió para ir a ver si había alguien en la tienda mientras el ocupaba los polvos flú.

El chico usó los polvos arrodillándose enfrente de la chimenea pues no sé expondría en llegar a cualquier lado si no sabía que había del otro lado. Además, suponía qué la red flú estaba ya protegida en Grimmauld Place donde quería comunicarse en ese momento. Cuando vio que las la llamas se habían vuelto verdes, dio una última mirada hacia Draco quién pasaba detrás del mostrador.

—¡¿Sirius?! —escuchó hablar atropelladamente a Harry.

Dejó que este hablará o siguiera tratando de comunicarse con alguien ahí afuera para adentrarse a la parte trasera de la tienda para ver si el señor Borgin andaba por ahí escondido a lo que fuese.

Encontró cajas tiradas a su paso, estaba muy oscuro que tuvo que iluminarse con la varita mirando que había mucho polvo de lo que recordaba de ese mugriento lugar. Abrió unas cuantas puertas viendo que estaban vacías y con más cosas adentro, todas tiradas como si hubiera pasado un huracán en aquel lugar, pero en una de esas puertas, hubo un olor horroroso que lo obligó a llevarse la manga de la túnica hacia la nariz para taparsela.

Se acercó hasta un montón de quejas para quitarlas de por medio, lo que fuese, de ese lugar provenía ese apestoso lugar. Ni tampoco sabía porque las hacia a un lado.

Cuando estaba por retirar quizás la tercera caja de cartón, la dejó caer de nueva cuenta al encontrarse con la cara de Burgin quién miraba fijamente hacia una dirección y tenía la boca abierta. Bajó la mirada distinguiendo todo su cuerpo bajo las cajas señal de que lo habían matado en aquel lugar. Las cajas habían caído encima de él al caer o por el impacto del hechizo asesino.

Salió corriendo hacia donde estaba Harry cuando supo que en la tienda solo estaban ellos dos por el momento.

—El ministerio está vez volvió a ver y mira que está dura la cosa —lo encontró ahora de rodillas sobre la chimenea pero con la cabeza de afuera, en la leña se veía el rostro de Black—, han habido asesinatos y Arthur logró escapar del ministerio antes de que lo atraparán. Tal parece que poco les importa ahora que seas sangre pura, si has traicionado en la segunda Guerra, está vez no te lo perdonan.

—¿Y los demás?

—Estamos bien, todos han venido a Grimmauld Place. Por suerte McGonagall dejó que Hermione, Ron y Ginny llegasen mediante red flú...ellos trajeron a unos amigos de Malfoy.

El rubio suspiró aliviado atrayendo la mirada de Harry quién volteó a verlo pero de inmediato se regresó hacia su padrino quién se veía muy preocupado.

—Todo lo cambiamos a tiempo, las protecciones, el guardián es Kingsley está vez. ¿Donde estás?

—Escapamos a tiempo, Sirius. Tenemos que llegar a Grimmauld Place cuanto antes.