𝐁𝐚𝐫𝐛𝐢𝐞; Lizkook

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Aquella mano tan cálida, soltó la suya haciendo que una especie de ola de frío cubriera el cuerpo de la rubia. Se sentía abrumada, los ojos le picaban de contener las lágrimas y su cuerpo recibía varias ondas de escalofríos, era como si una parte de ella se había ido con JungKook.

—Lalisa— la voz de la castaña se hizo presente, agachándose a su lado mirándola preocupada.— ¿que ocurrió?

La rubia la miro por unos segundo, ¿le diría que jugó con su hermano sabiendo que aún estaba con Sehun? Lo último que Lalisa quería es que su mejor amiga se alejara de ella.

—Ya no importa ¿si?— dentro unos segundos, dos chicas más aparecieron en la escena a lo que la rubia optó por salir de allí, no quería dar explicaciones y mucho menos hablar con alguien en aquellos momentos, la mayor de las cuatro siguió a la rubia mientras Rosé aún no se explicaba que había sucedido. Habían muchas preguntas circulando en su mente, y la necesidad de saber que tanto su mejor amiga como su hermano, que todo estaba bien.

Jennie optó por brindarle un gran abrazo a Rosé, quien sólo ha instantes correspondió.

—Se que todo estará bien, mañana ya todo será normal.— le dijo la más alta mientras acaricia su cabello, y la verdad esperaba que fuera así.

(...)

"Quizás el tiempo haga que este sentimiento cambie y vuelva a ser quien era"

Aquella frase, la cual había pensado hace unas semanas atrás, antes de admitir que se había enamorado de Lalisa Manoban volvió a él como un "boomerang". Ese recuerdo hizo que el corazón de JungKook se estrujara nuevamente y las lagrimas amenazaran a correr por sus mejillas.

Se fue de la escuela, no quería volver, no quería enfrentarse a aquellas dos personas que habían hecho que su corazón se quebrará en dos, Oh Sehun y Lalisa Manoban pero Sehun no lo había hecho tanto daño, solo lo hizo volver a la realidad, recordando porque desde un inicio comenzó a odiarla.

La odiaba por algo que no tenía sentido, una tonta excusa para ocultar lo que verdaderamente sentía por aquella rubia. Amor, era aquella palabra que definía lo que sentía el castaño por Lalisa. Pero primeramente ¿porque lo ocultó? Era algo más que solo miedo, era miedo hacer rechazado por la que llamaban "la chica de sus sueños". Todos soñaban con sostener aquella chica y reclamarla como suya pero Jeon aprendió a no pensar a la ligera, la llamó suya cuando ni siquiera estaban juntos. Un gran error la verdad.

Haberse involucrado desde un inicio, poner en juego sus sentimientos, fue aquello que más le dolió. No pensaba que el amor doliera tanto, pero nada es perfecto ¿cierto? No vivimos en un cuento de hadas, donde todo siempre tendrá un final feliz, JungKook sabia que para él lograr ese final feliz, debía arriesgar mucho pero se lamentó en haberlo hecho.

—Tal vez olvide lo que alguna vez sentí por ella. Volveré hacer quien era, dejando esto como una mala pesadilla o más bien lección.— las palabras de JungKook marcaron un nuevo inicio, tanto en su entorno como en su corazón. Haría que su corazón la olvidara, y se aferrará a un nuevo comienzo donde la rubia ya no esté presente.

Huiría, dejaría todo atrás, e incluso a su familia. Debía alejarse de todo aquello que le recordara a la rubia, eso era irse a otro lugar, donde nadie lo encontrara, y ese lugar era Francia.

"Puedes correr pero no escapar, el pasado volverá a atormentar tú presente. Y aquellos sentimientos resurgirán de la muerte."