Herencia Lovelace (R#12)

28. Tener novio

Nina

¡Tengo novio!

Algo en mi subconsciente me dice que debí haberlo pensado mejor o con más tiempo, pero estoy tan emocionada que lo ignoro. Quizás porque nunca imaginé que algo así me pasaría, me cuesta tanto hacer amigos que tener una pareja parecía algo muy lejano. Con sinceridad nunca le tomé importancia, pero ahora no puedo con el entusiasmo.

Camino por los pasillos de la universidad y veo a Lucía, así que me le acerco.

—¡Hola! —Le sonrío. Parece decaída —¿Dormiste bien? —pregunto.

Fuerza una sonrisa.

—Sí, solo estoy un poco de malhumor, como casi siempre.

—Oye Lucía ¿Cómo es tener novio? —le pregunto emocionada y se sobresalta.

—No soy la mejor persona para preguntarle eso.

—Oh ¿Por qué? —Ladeo la cabeza.

—Es complicado —Bufa.

—¿Pero no se supone que tiene que ser bonito?

—Sí, cierto, se supone —Bufa otra vez —¿Por qué lo preguntas?

—¡Tengo novio! —Aplaudo.

Alza una ceja.

—¿Estás segura?

Frunzo el ceño.

—Sí, no soy tonta.

—No quise decir eso, pero lo más seguro que el chico te haya hecho una broma, dime dónde está y lo golpeo por ti.

Sonrío.

—No te preocupes, yo le pregunté si era un chiste y me dijo que no.

—Suponiendo que no es una burla y el chico es serio sobre esto... —Hace una pausa —¿Sabés lo que significa tener novio?

Me quedo tildada un momento intentando entender su pregunta y luego respondo lo que él me dijo.

—Me aclaro que no haría nada raro y que quería que nos conociéramos más.

Ella sonríe.

—Parece que va en serio, va con cautela, por ahora está aprobado —Se ríe —. Pero no se lo digas a Elías que seguro se desmaya.

—¡Bueno! —digo con entusiasmo.

—Y cuéntame todo, porque no quiero que se propase contigo, si hace algo que te incomode, me llamas y lo golpeo.

Levanto la mano.

—¡Sí, capitana! —grito más animada entonces ella se ríe.

Lucía siempre me cuida, es muy linda.