━Bodyguard♡︎SeokHui

《8》

Seokmin movía sus labios sobre los contrarios lentamente. Un beso que le daba con la excusa de callarlo pero a la vez poniendo todos sus sentimientos.

No estaba seguro si perderia su trabajo pero de lo que estaba seguro es que no se arrepentiría jamás de haber besado a Jun. Sus labios eran suaves y dulces justo como se los había imaginado anteriormente.

Se separaron por la falta de aire, mirándose fijamente con la respiración agitada por aquel beso intenso.

Jun estaba dispuesto a unir sus labios con los ajenos nuevamente pero este lo detuvo.

—Dejame explicarte que fue lo que pasó— habló más calmado.

—Y, ¿después podemos seguir besandonos?— subió sus brazos alrededor del cuello del pelinegro.

Tal vez no debió haber besado a Jun.

—Solo te pido que no me interrumpas— se tomó eso como un si, guardando silencio.

—Tenía toda mi atención en ti pero un chico llegó tapandome la vista que cuando me fijé ya no estabas. Fui en tu búsqueda pero nuevamente ese chico me interrumpió diciéndome que estabas en el segundo piso. Le hice caso, me dirigí a la segunda planta y después de revisar en todas las habitaciones no estabas en ninguna por lo que supuse que aquel chico tramaba algo. Antes de bajar se me lanzó encima tratando de besarme, no me dejé y batalle mucho para que me deje ir, se rindió y se fue por las escaleras. Cuando bajé, te encontré y acabamos así.

—No se quien invitó a ese hijo de perra.

—¿Lo conoces?— preguntó deslizando sus manos de la estrecha cintura a las caderas del chino.

—El fue el que me mostró el video de Mingyu y yo pero después de que me fui de Corea, Jeonghan me contó que Minghao se hizo novio de Mingyu y al parecer ahora me quiere quitar a mi guardaespaldas.

—Me encargaré que no vuelva a aparecer en tu vista el resto de la noche.

—No hace falta, vámonos.

—¿Te irás de tu fiesta? ¿así sin más?

—Necesitas descansar y no tengo muchas ganas de quedarme.

—¿Seguro que quieres irte?

Jun asintió quitando sus brazos del cuello ajeno—. Yo manejo, dame las llaves.

—No lo haré— soltó a Jun.

—Bueno, si te duermes mientras manejas y muero quedará en tu conciencia para siempre— entrelazo su mano con la del pelinegro y ambos caminaron hacia el Mercedes Benz-AMG coche en el que habían venido.

—¿Porque me besaste?— preguntó una vez estaban ambos dentro del coche.

—Bueno tu me habías interrumpido ya varias veces y decidí interrumpirte igual pero de una manera diferente.

—Puedes interrumpirme las veces que quieras.

—Mi trabajo me prohibe tener algún tipo de contacto físico contigo, así que estoy en problemas— encendió el auto poniendolo en marcha.

—¿Tu jefe o alguien lo sabe?— preguntó preocupado viendo hacia el pelinegro.

—¿Sobre el beso? No, no lo saben pero es mi deber informar lo que sucedió en todo el día.

—Y, ¿si mencionas lo del beso? ¿Pasaría algo malo?— sus dudas aumentaban con cada pregunta al igual que su preocupación.

—¿Porqué haces tantas preguntas? Deberías descansar.