Nkosi (#3 Mc Angele's Kings)

Epílogo

CAPITULO EDITADO

Nkosi

Meses más tarde...

En estos últimos meses, tratamos de superar poco a poco nuestro temor a perder a nuestros hijos, decidimos que iban dormir por un tiempo con nosotros por más seguridad.

Por otro lado, hace un mes aproximadamente, compramos para nuestra casa para alejarnos un poco más del Club, según Sasha, será mejor por ahora mantener y ser fuertes en lo que podamos a nuestros hijos. Yo suelo ir de vez en cuando, pero no hago ninguna misión para no separarme de mi familia.

Hanbal quiere que regresemos al club por nuestra seguridad, pero me he negado totalmente ya que estamos bien en familia porque ellos son mi prioridad ahora mismo, decidí alejarme de todo por el bien de mi familia.

En cuanto a mis hijos, están yendo con la psicóloga por los traumas que tienen hasta ahora, los llevo y les traigo todos los malditos días.

Ahora mismo estoy frente al Club decidiendo si entrar o no comienzo a quitar mi chaleco para devolver al Prez. Entro al club y todos los hermanos me miran pálidos sin entender la situación sigo caminando hasta la oficina de Hanbal, toco dos veces la puerta.

Adelante- grita comienzo a abrir la puerta y miro que están los jefes de los clubes en el despacho del Prez.

— ¿Qué pasa? — pregunto confundido.

— Tenemos una propuesta para ti y se que te gustara igual que a Sasha — dice Hanbal con una sonrisa en su rostro.

Tres años después...

Hace tres años que mi vida cambió completamente. Aceptar la propuesta de los presidentes creo que fue la mejor decisión que hemos tomado con mi mujer porque primero está la seguridad de mi familia y de las personas que amo, me encanta estar en el club.

Por otro lado, hay una frase que dice "mientras que llega el amor, disfrutamos de casa día, de cada rodada, de cada curva", siento que este es mi momento de disfrutar lo que tengo frente mío, hoy es el día en que no me arrepiento de tener una hermosa familia.

Hoy es domingo donde toda la familia está presente, me detengo a observar cada detalle, cada movimiento a mi mujer e hijos mientras que hago el asado con mis hermanos en el Club. Me acuerdo de la propuesta que me han hecho ese día los presidentes y es como si fuera ayer.

Recuerdo...

— Tenemos una propuesta para ti — dice el prez mirándome y baja su cabeza hacia mi chaleco que estaba por entregar y frunce el ceño.

— No hace falta que nos abandones, Nkosi, Sasha nos contó de tu decisión. Te has olvidado de la frase de los Ángeles Kings ¿no es así? — pregunta y niego con la cabeza varias veces.

— Entonces que repite conmigo — ordena con firmeza.

— Cualquier cosa que acelere tu corazón vale la pena — decimos todos juntos.

— Te daré una misión con tu familia — dice el prez y le miro confundido.

— Quiero que vayan a una ciudad, quiero hacer allí un club y tú serás el presidente de ese club, te mereces y todos los presidentes están de acuerdo con mi decisión, allí recibirás a los primeros hermanos, tendrás total autoridad y también te protegerán a ti y tu familia. Esa es nuestra propuesta — dice tranquilo sigo shockeado por la confesión del prez.

— Tengo que hablar con Sasha primero — es lo único que digo.

— Hazlo, quiero responder lo antes posible — comenta y asiento con la cabeza, salgo rápido del Club. Me dirigí rápido a la casa cuando le cuento todo lo sucedido a Sasha comienza a darme los consejos y el apoyo necesario.

fin del recuerdo

Hace tres años nuestra vida cambio por completo, hace tres años nuestros hijos y mi esposa son felices y no tenemos ningún problema del que preocuparnos. Mi familia es importante para mí.

Años más tarde...

Como dice el dicho de rápido y furioso "la sangre te hace pariente pero la lealtad te hace familia". Nunca pensé tener una verdadera familia dentro y fuera del Club. Sasha, mi mujer, me abrió los ojos igual que el corazón, nunca pensé en enamorarme de esta perfecta mujer tampoco pensé en tener hijos que dan fuerza y ​​fortaleza día a día para hacer mi rutina.

Los hermanos del Club me han enseñado a lo largo de mi vida que ellos no me dejarán sólo en las rodadas. Ellos están siempre conmigo cuando los necesiten.

Mis hijos son mi fortaleza, son los que me ayudan a vivir el día a día y tener esperanza de esta con ellos después del trabajo. Mi familia son el club, mi mujer y mis hijos, voy a protegerles en todo momento, lucharé por ellos para que estén a salvo.