i wanna be a cheerleader¡!♡ jikook t.s

꒰⑅ᵕ༚ᵕ꒱˖♡

Si había algo que Jungkook realmente quería hacer era ser animadora.

Le encantaba todo de esa actividad, desde las acrobacias hasta el entusiasmo que tenían, pero sin duda lo que más amaba era el uniforme. Simplemente era perfecto, una polera rosa claro con blanco junto con una falda tableada de la misma gama de colores y unas adorable cintas amarillas con los pompones del mismo color. Quería tanto usarlas que sin duda haría la audición y se ganaría un puesto ese equipo.

Claro que lo lograría.

Afortunadamente, el ayudante de la entrenadora del equipo de porristas era su novio.

—¿Hm? — preguntó Jimin para asegurarse que estaba escuchando bien a su novio — ¿audicionaras para el equipo?

—Sip —respondió el castañito con una sonrisa antes de darle un mordisco al sandwich que le había regalado su pareja — Estoy seguro que quedaré.

—Pero... —Jimin suspiró antes de hablar, no quería romper las ilusiones de su bebé — Sólo pueden adicionar chicas, amor, Hwang lo puso en el aviso, Kook.

—Ahí es donde entras tú —le sonríe terminando de comer, limpia su boca con una servilleta — ¿Podrías poner mi nombre en la lista? Por favor~—trató de convencerlo con un tierno puchero —

Jimin negó varias veces poniendo todas sus fuerzas en no caer ante la lindura de su novio.

—No, amor, debo ser transparente, la entrenadora confía mucho en mí, además, en unos meses se harán audiciones para chicos, puedes hacerlas sin ningún problema —propuso el peli naranja con una sonrisa, la cual desapareció casi de inmediato al ver a su novio con un claro semblante triste —¿Kookie?

—Es que yo quiero usar falda —murmura con un puchero jugando con las correas de su mochila — y a los niños no los dejan, y yo de verdad quiero usarlas, Minnie, quiero ser porrista y usar el uniforme de una.

Jimin suspiró, claramente sabia que a Jeon le gustaba usar ropas femeninas dentro de su intimidad, siempre le decía que se sentía bonito pero no se atrevía a usarlas fuera ya que todos lo tacharian de raro. El que quisiera usar una falda en la escuela diario, era un gran avance.

—¿De verdad lo quieres, amor? —preguntó el mayor acariciando su mejilla con cuidado, sonríe leve al verlo asentir muchas veces —Más te vale que entres, Jeon, te pondré en la lista.

—¡Eres el mejor! —gritó el pequeño totalmente feliz abrazando al contrario repartiendo besos por todo su rostro —¡Quedaré, te lo prometo! Daré lo mejor de mi¡Seré la mejor porrista de todas!