Capítulo 17: "Una Peligrosa Necesidad"

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Caulifla se encontraba en un bar como de costumbre, ya que solía concurrir ahí cuando se le apetecía beber un trago. Mientras que Goku estaba solo en su casa más que aburrido preguntándose a qué hora volvería ella. Cansado de esperar decide apagar la TV y salir afuera a entrenar hasta que su ausente pareja regrese. Espera que para su infortunio se prolongaría un poco más porque la saiyan del U6 se decidió ir de visita a la corporación Capsula.

...

Las cosas no iban muy bien con ella, sentía que no tenía propósito alguno permanecer en ese lugar si no se encontraba él, la persona que la encontró, la acogió y enseño lo suficiente de ese mundo. Pero no era solo su compañía lo que le hacía falta, era algo más, era lo que le permitía sobrevivir día a día. Y así es como su sustento de vida cobraba fuerza negativa en ella, una abstinencia totalmente diferente le empezaba a corroer en ese momento.

« ¿Qué es esto...? me siento hambrienta. Pero a la vez no tengo apetito... ». Pensaba con su mirada impermeable, abrazándose a sí misma, acostada en la cama.

« Si sigo aquí... si no lo tengo cerca... no creo tener mucho tiempo... ».

Sin poder tolerarlo más, se pone de pie, y al hacerlo no consigue el equilibrio y tropieza. A duras penas sale de la corporación capsula con sus pies descalzos. Las nubes se iban formando en su camino, y los truenos se hicieron escuchar.

Se había alejado lo suficiente hasta adentrarse en la capital de la ciudad, pero un poco agotada decide recomponerse un momento apoyándose en la pared de aquel callejón desolado de gente, las gotas comenzaron a  caerle encima majándola en el acto, y la lluvia no se hizo esperar.

«Necesito un poco... solo un poco de ti Goku...»

...

Era tarde en la montaña Paoz, y estaba lloviendo como nunca en la casa de cierto Saiyajin. De repente, del cielo cayó un rayo cerca de la casa de éste; un ruido estrambótico fue suficiente para que se sobresaltara tan alarmado, que tuvo que salir a comprobar afuera, y gracias a la iluminación de otro rayo que había caído, logró vislumbrar como un árbol se había incendiado (el más cercano a su hogar), y por lo visto parecía pender de un hilo cuando el viento azotó a todos, pero sobre todo al árbol que se inclinaba hacía la pequeña casa. Claro que no lo iba a permitir, defendería la residencia "Son", así que con sus rápidos reflejos pulverizó el tronco a cenizas.

...

El chaparrón se hacía más fuerte y duradero, acompañado de granizo y rayos que convertían la noche en lo más parecido al día por un segundo.

Pasados unos minutos, intuye que la lluvia ya estaba cesando poco a poco, reiteradas veces se asomaba a la ventana para ver si su chica aparecía, y cuando no la alcanzaba a ver, su ceja se arqueaba, comenzando a desesperarse. Sin duda no sabía qué hacer en ese momento; y para el colmo se había cortado la luz, era claro que era de esos que no les gustaba la lluvia, simplemente no iba con su personalidad colorida. Lo único que alumbrada esa oscura casa eran los relámpagos; y se asoma una vez más, esperando verla por lo menos a lo lejos. Así que lo espera, espera impaciente la luz que es únicamente producido por los relámpagos.

Y cuando todo se ilumina, se lleva la sorpresa y quizás también el susto de su vida, al ver a alguien en su ventana, mirándolo fijamente. Casi se cae de espalda, pero cuando se acerca más, logra vislumbrar a esa persona, pero se le hacía surrealista que ella este ahí. Así que se frota los ojos con la yema de sus dedos, también se pellizca; y lo que confirmo que enserio estaba allí, fue otro relámpago que curiosamente fue el último en caer. Y sin más dilaciones acude rápido a abrirle la ventana.

Unidos Por Un Sentimiento Mutuo | Goku & Caulifla (TERMINADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora