CAPITULO 18

19 1 0
                                    

A pesar de correr como si de un marathon se tratase no conseguí llegar a tiempo, aquel previo incidente me hizo retrasar dos horas, debía pasar desapercibido y evitar un regaño de la maestra.

Dí una caminata  en puntitas y lentamente me introduje en el salón, con el cuerpo agachado simulando una lombriz ingresé cuidadosamente a mi asiento.


— Señor Kim, ¡Quiero la justificación de su retraso está tarde en mi oficina!

Nos vemos chicos, recuerden que la siguiente clase tenemos examen.

— ¡Rayos! — ella era demasiado astuta, una justificación no válida podría hacer a cualquiera reprobar su clase.

Solté un último suspiro y tomé el cuaderno, debía imitar a perfección la letra de mamá y la firma de papá.

— Tú puedes señorito Kim, recuerda aquella vez en la que supliste a papá. ¿No debe ser más difícil  que firmar un cheque, verdad?

Tardé 2 minutos en escribir la carta, y en firmarla aún menos, decidido corrí a la oficina de Mirs. Lee, pero mi distracción me condujo a chocar con una muchacha que cruzaba sin previo aviso en mi frente.

— ¡Lo siento!— respondí sin mirarla

— ¡Taehyung! ¿Cómo estás?

— ¿Eunmi? A pasado tiempo ¿Jungkook lo sabe?

— Si, de hecho estuvo aquí hace un momento. Aunque  realmente desearía hablar contigo Taehyung, necesito que te sinseres conmigo.

Cuando me fui nuestra relación no acabó en buenos términos y solo quiero que me digas la verdad.

— ¿De qué hablas? Todo el tiempo fui sincero contigo.

— Bien sabes que no es así, finjiste amarme cuando la realidad era una completamente diferente, alguien más estaba en tu corazón

— ¿De qué hablas?

— Yo — suspiró con la mirada en el piso  — los ví, ví a tí a Jungkook besándose la noche de Halloween.

Su confesión me dejó atónito, todo este tiempo tenía claro a quién le pertenecían mi suspiros. No pude continuar, Jungkook se hizo presente y nos miró sin decir una sola palabra.

—:—


Minutos más tarde salí de la enfermería en los brazos de Jinwoo, el era mi pequeña molestia, así lo llamaba.

— No soy un maldito bebé, bájame puedo cuidarme solo

El se negó a la vez que apegaba mi cabeza a su pecho —No lo haré

Su paso era realmente lento, nunca llegaría a clase, aunque tal vez era lo de menos. El momento ameritaba un gesto cariñoso de mi parte así que no puse objeción.

De la nada un grito hizo girar mi cabeza
— ¡Jinwoo, eres tú! ¿Por qué llevas a este muchacho en tu espalda?

— ¿Mino? Ha pasado mucho tiempo

—Tengo pasantía aquí, trabajo social que imparte está institución. Que suerte tengo, desde hace mucho te he buscado ¿Aún recuerdas cómo nos la pasábamos en el kinder? Wah—suspiró— que tiempos aquellos.

Espera, se olvidaron por completo de mi presencia, vaya incómoda y conveniente situación— Tchs tchs tchs!!— comenté en lo bajo


— Oh Sehunie, lo siento, te presento a Mino, mi viejo amigo

— Un gusto Mino, ahora continúen con su conversación yo iré a clase por mi cuenta. Y no intentes nada, te veré después de clases.

Ambos quedaron serios pero algo sonrientes, por alguna razón les divertía verme intentando llegar a clase.

—:—

—Jinwoo ¿Aún recuerdas la relación que teníamos antes de separarnos? No quedó claro en qué términos concluyó nuestra "amistad"

— Si lo recuerdo Mino, pero ha pasado tiempo, creo que eso solo era un juego de niños, deberíamos olvidarlo.

— De hecho yo sí lo tomé muy seriamente, a pesar de que nadie lo sabía y era nuestro pequeño secreto, no dudaba ni un poco de lo que sentía por tí —rió— incluso en nuestro primer aniversario te cociné galletas quemando mis dedos

— Lo sé pero ahora son solo recuerdos, yo decidí continuar con mi vida Mino.

— Te gusta mucho el muchacho de cabellera negra ¿Verdad?

— Aún no estoy seguro de ello, ambos sentimos algo por el otro, pero no puedo hacer nada. No podemos estar juntos.

— ¿Por qué no estar juntos si el sentimiento es mutuo?

— En el momento indicado lo sabrás.

—:—


Lentamente la gran puerta se abrió y dos siluetas que nos pertenecían entraron de la mano, desde luego sería la mejor noche en nuestra vida.

Plack..... sonó en lo oscuro, una dura y fina manos golpeó la mejilla de Yoongi. Apresuradamente encendí las luces y me encontré con lo peor que podía suceder.

Era papá, tomó a Yoongi de la camisa y le gritó con furia—¡¡ Eres un maldito malagradecido, no sabes cuanto me has decepcionado , cómo es que se te ocurrió besar a tu hermano, en público!!
Creí que eran rumores, pero en cuanto esto empeoró tomé un vuelo esperando una buena explicación acerca de que nada de esto era verdad. Pero llegó aquí y un vídeo llega a mi celular. Video en el que tú y Tu hermano se están besando, por un demonio ¡en que estabas pensando Yoongi! me das asco.
Eres un maldito asqueroso cómo puedes acosar a tu hermano menor. Eres un.....

—Alto papá!!!. No lo golpees más.

—Tu no te metas Jimin, ve a tu habitación.

No lo haré hasta que lo sueltes. El no tiene la culpa de lo que sucedió. Además no somos hermanos.  Lo nuestro si puede ser.

Que ridiculeces dices, a pesar de no ser hermanos se están besando, son hombres, que no saben cuánto eso puede arruinar mi reputación y la suya. Quiero que escuchen claramente lo que les diré, Si continúan con sus cochinadas espero que mañana ya no estén aquí, y quiero que se olviden de que soy su padre. No aceptaré que ustedes estén juntos.

Con los ojos llorosos y rastros de sangre Yoongi tomó de la mano a Jimin y salió junto a el. Lo arrastró hasta llegar al instituto.

—Yoongi lo siento

—No Jimin, tu no tienes la culpa, yo soy el que debe aceptar toda la responsabilidad.

No Yoongi,  ambos causamos esto y no quiero verte sufrir así, a ti te ha afectado más por el hecho de que es tu padre.

—No lo es, si lo fuera hubiera estado cuando más lo necesitábamos, después de que murió mamá lo odié mucho, no se preocupó ni de tan solo decirle adiós. Cariño te prometo que saldremos de esto, te lo prometo

—Te amo Yoongi, creo que mientras tanto podemos dormir en el colegio. Durante la noche está abierto el patio trasero.

—Te amo mucho Jiminnie y no quiero que te suceda algo malo, yo siempre cuidaré de tí.

Solo Tú | Concluida [En Edición]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora