El juguetero

Luna sangrienta

Antes de comenzar me gustaría pedir perdón por el exceso de cambios de narrador, y lo poco que hablan algunos. Simplemente necesitaba que en este capítulo apareciesen el mayor número de personajes posibles. Ahora empecemos.

NARRA GABRI

Hoy hay luna roja... Luna de sangre... Luna sangrienta, tantos nombres y leyendas para definir un fenómeno de la naturaleza con explicación... Pero bueno, no negaré que es un espectáculo digno de ver, que obvio, iré a verlo solo. ¿Por qué solo? David y yo cortamos hace unos meses; nadie lo sabe. Por ello, ahora vivo solo en Cinabrio mientras él se quedo en Arkia. Me está costando mucho esto de volver a empezar... Volví a ser el mismo, tímido, alejado de todos y mirando desde la sombra.

De vez en cuando hablo con Aiden por cartas, me cuenta cosas de la prisión y sus nuevos amigos. Al fin y al cabo no somos tan diferentes como pensaba, pero bueno... En la última carta me dijo que saliese a conocer mundo... Así que... le haré caso.

Estaba delante de la puerta... Agarraba el pomo y la abría... Poco a poco.... Salí a fuera

-tomo aire mirando a todos- Prefiero otros lugares 

Todas sus miradas... Encima mía... Volveré a las sombras.
Tras unas horas caminando sin ser visto, llego a los que creo que son los bajos fondos... Quizás aquí haya menos gente que me vea. 
Llevo unos minutos caminando hasta que veo a un zorro azul, algo raro, no parece la clase de gente que hay aquí. Vamos... Solo debo acercarme y hablar...

-Hola -digo con poca confianza aún desde las sombras-

-¡Aahhh! -grita, supongo por que le dí un susto- ¡¿Quien eres?! 

-Soy un zorro como tú -le digo directo-

-Si, eso lo se. Te veo perfectamente, eres blanco y... estas sin camiseta... 

-salgo a la luz- No me gusta tapar mis marcas ¿Qué haces aquí? -digo con mi voz neutral-

-Pues... Estoy buscando a mi hermano, Cian. ¿Lo viste?

-No. ¿Cómo es?

-Es un zorro como yo, más alto -eleva su pata por encima de si- Musculoso -se pone en una pose de culturista- Y... Su pelaje es rojo como el fuego -dice señalando mis marcas rojas-

-Entiendo. Vete a casa

-Ey, no eres nadie para mandarme 

-Vete a casa -le miro directo a los ojos- Ya lo busco yo

-Eh... Vale... -se da media vuelta y se va- 

No se para que me meto en estas cosas. Me pasé largo rato buscándole hasta que dí con él.

-Ey. Zorro rojo

-¿Mmmm? -se da la vuelta y me mira, esta fumando- ¿Quién eres y qué quieres? -dice de forma seria, hasta diría brusca- 

-Soy Gabri. Me encontré con tu hermano. Te está buscando.

-Vale ¿Y eso que tiene que ver contigo? 

-Tu hermano es muy vulnerable aquí, le dije que se fuese a casa y que te buscaba yo. Al principio se negaba, pero le acabé convenciendo -le digo en mi tono natural-

-Vale -mientras habla me acerco y le huelo el cuello- ¡¿Pero qué?! -rápido me pega un golpe en el morro, lo que me hace caer- ¿¡Por qué has echo eso?! 

-Se lo hago a todos -digo sobando me el hocico mientras levanto la cabeza y le miro a los ojos-

-Eres muy raro chico -dice serio y brusco mirando me a los ojos-