𝟛. 𝕄𝕖𝕥𝕒𝕝 𝕖𝕟 𝕝𝕠𝕤 𝕝𝕒𝕓𝕚𝕠𝕤

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"Los monstruos no merecen salvación

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"Los monstruos no merecen salvación. Los monstruos nunca recibirán el perdón.
Los que llevan la sangre en su nombre solo encontrarán el final, cuando el castigo divino atraviese sus latidos."


Una mano.

—¡Corre!

Una mano manchada de sangre.

—¡Rápido, corre!

La voz de la pequeña sonaba diferente. Asustada. Temblorosa.
Prácticamente suplicante mientras intentaba hacer que su pequeño amigo se apresurase todo lo que su cuerpecito pudiera dar. 

—¡Corre Gwyn, corre!

Y en ese momento, su agudo sentido de audición la alertó de un silbido acercándose a toda velocidad a sus espaldas, haciendo que se lanzara contra el suelo a duras penas, justo en el momento en el que un agudo proyectil tan parecido a un cristal de hielo rozaba su cabeza suavemente, antes de estrellarse contra el tronco de un árbol frente a ella, disparando astillas y fragmentos de madera en todas direcciones. La niña se cubrió instintivamente, apretando los párpados todo lo que pudo, víctima de una mezcla de incredulidad y miedo.

"¿Pero qué...?"

Los gritos enardecidos la hicieron reaccionar.

"¡Corre! ¡No te detengas, corre!"

Como pudo, se incorporó sosteniendo el paquetito que cargaba en sus manos, y siguió corriendo, sintiendo el peso normalmente ligero de su mochila incrementar, tornarse casi insoportable. Letal, asfixiante, tan pesado al punto de hacerla sentir lenta y desesperarla todavía más, si es que eso era posible.
Sin poder evitarlo, un gemido lleno de miedo abandonó sus labios mientras todo daba vueltas fugaces a su alrededor.

Una mano manchada de sangre, un rasguño que dejaba la oscuridad pintando el blanco, y miles de esquirlas que volaban en su dirección, filudas y asesinas como los gritos de la turba que la perseguía llena de ira, obligándole a correr más rápido, a veces incluso arrastrarse, sin importarle las piedras, las pequeñas astillas, o las espinas traicioneras, ocultas en la hierba, aguardando a clavarse a través de su ropa o sobre las palmas de sus manos adoloridas que, a pesar de todo, se rehusaban a soltar aquel preciado tesoro que en esos momentos, parecía a punto de cobrarle el precio de su vida a cambio de la osadía con la que llevó a cabo aquel hurto.

Aquello no tenía que terminar así...

Pero su destino parecía decir que, sin importar cuánto se esforzase, tendría que suceder.

Siguiendo la primera parte de su plan, durante los primeros días la niña se dedicó de lleno a buscar provisiones que los mantuvieran nutridos durante el largo viaje que se les avecinaba mientras aún duraban las horas ciegas a lo largo de los días. Su plan original incluía intentar cazar animales pequeños, pescar cerca de los ríos, o buscar alguna raíz que no hubiera sido consumida por los animales de la zona, si no es que secada ya por el invierno que se hacía cada vez más notorio.
Pero, para su desgracia, el tiempo corría más rápido de lo que su cuerpo agotado podría dar en todas sus condiciones, y más temprano que tarde se dio cuenta que sus esfuerzos, de nuevo, no eran suficientes.

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⏰ Última actualización: Dec 26, 2023 ⏰

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𝕽𝖊𝖓𝖆𝖎𝖘𝖘𝖆𝖓𝖈𝖊: 𝐑𝐈𝐒𝐈𝐍𝐆 𝐃𝐀𝐑𝐊𝐍𝐄𝐒𝐒 (ᴀᴄᴛᴜᴀʟɪᴢᴀᴄɪᴏɴᴇs ʟᴇɴᴛᴀs)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora