Capítulo 28: ¡Diez pasos!

2.9K 504 186
                                    

¡Se ha dormido! Mientras yo estoy aquí trabajando y tratando de caminar, Naruto se ha quedado completamente dormido en la silla de la sala de rehabilitación. ¡Debe estar realmente agotado de madrugar para ir a la panadería!

Me detengo, todavía sujeto a las barras a mis lados. Ha pasado un mes y mis piernas siguen torpes. No soy capaz de caminar sin agarrarme a algo. ¡Es patético! Así es como me siento, un inútil que necesita que le ayuden para todo, que tiene que ir en silla de ruedas por la casa y el hospital porque no es capaz siquiera que sus piernas aguanten el peso. ¡Aprender a caminar de nuevo es atroz!

- Maldita sea – me quejo en un susurro apenas audible para mí.

- ¿Estás bien, Sasuke? – pregunta la enfermera al ver cómo agacho la cabeza y miro mis zapatillas.

Mis piernas tiemblan y sólo mis manos se agarran con fuerza a las barras. Intento dar otro paso. Es inseguro, porque siento que a cada movimiento, voy a caerme. ¿Tengo miedo a caerme? No estoy a más de un palmo del suelo. Es un miedo estúpido. ¿Por qué tenemos miedo a caernos? ¿O es la vergüenza de que nos vean otros caer? No estoy seguro, pero me frustra. Naruto está justo ahí... a apenas diez pasos y no puedo ir hasta él, las barras acaban en tres pasos y ya no tengo forma de sujetarme a nada, pero... quiero ir con él.

- ¿Seguimos, Sasuke? – pregunta la enfermera al ver cómo me he detenido.

- Sí – susurro, alzando ligeramente la mirada para ver la figura de Naruto sentada frente a mí. ¡Son diez pasos! No pueden ser más que eso.

Me armo de valor y pese al dolor y el esfuerzo que requiere mover la pierna, lo hago. Muevo la derecha y la afianzo en el suelo para poder mover la izquierda. Me cuesta unos segundos asegurarme que no me caeré, pero en cuanto me siento un poco más seguro, muevo finalmente la izquierda. ¡Dos pasos!

- Un paso más, Sasuke, y lo dejamos por hoy – me comenta la enfermera.

Con esfuerzo, doy el tercer paso, firmemente agarrado a las barras. La enfermera parece contenta, porque he sido capaz de caminar bastante en esa última media hora, pero yo no me conformo con esto. Veo que recoge algunas cosas que hemos utilizado para la rehabilitación y aprovecho que está distraída con ello para soltar mi mano de la barra.

Siento que pierdo estabilidad. Mi cuerpo se tambalea un poco pero en unos pocos segundos, siento que puedo estabilizarme. Mis piernas aún tiemblan, sin embargo, con la derecha firmemente apoyada en el suelo, elevo la izquierda para dar un paso. ¡Cuatro pasos! Y me aseguro que el pie toque completamente el suelo y asegurarlo antes de mover la siguiente pierna.

- ¿Sasuke? – escucho a mi espalda la voz sorprendida y algo atemorizada de la enfermera al verme sin sujetarme a las barras, tratando de caminar solo por primera vez en esos meses – Sasuke, déjalo ya, no estás listo para caminar sin sujeción – me dice, viniendo hacia mí con intención de ayudarme a sostenerme.

- No me sujetes – le pido – por favor... sólo unos pasos más, puedo hacerlo.

Parece creer en mí porque sonríe y se aleja unos centímetros pese a que sigue pendiente de mi esfuerzo por si necesito ayuda. ¡Otro paso! Es lo único que puedo pensar. ¡Seis pasos más! ¡Seis y alcanzo a Naruto! Respiro hondo y miro mi pierna izquierda. Mi cuerpo se ha desequilibrado un poco, pero cuando siento que vuelvo a estar más o menos seguro, muevo la derecha nuevamente. ¡Cinco y estoy allí!

Sonrío, porque puede que sea una estupidez para alguien normal, pero... dar un paso en este estado, para mí es toda una proeza. Siento las piernas tan débiles, que pienso en que voy a caer en cualquier momento. Sin embargo, haber dado dos pasos sin sujeción, también hace que mi confianza aumente. ¡Puedo hacerlo! Lo sé.

Coma profundo (Naruto)Where stories live. Discover now