Si fuera Idol || 3 ||

73 || REASON

Especial

La dulce melodía del piano junto a un violín se hicieron presente cuando entraste junto a tu enamorado a aquel local que por cierto, el más alto insistió en ir.

– Min Young... – pronunció con su acento de Gwangju al cabo de un rato que ya se habían instalado en una mesa alejada de las personas.–

– Nunca me dices Min Young ¿paso algo?– preguntaste en respuesta a lo que solo obtuviste una negación por su parte.–

– Nada solo... Me gusta tener este tipo de citas contigo – volvió a hablar pero antes que le respondas llego un camarero con las órdenes que ya habían decidido cuando entraron.–

La cena fue amena, entre risas y sonrisas ambos disfrutaron toda la noche, cuando decidieron volver a descansar en tu departamento, ambos habían ido a la cocina una vez que llegaron ya que aún tenían sed.

– Te amo – habló el más alto abrazando por atrás tu cintura, apoyo su quijada en tu cabeza.-

– Yo también te amo – respondiste con una sonrisa y el más alto beso tu mejilla.–

– Amor... Ha Min Young, eres la mujer que me ha traído la felicidad y te haz vuelto en mi ancla... Eres mi persona favorita y no se que haría si te vuelvo a perder – habló abrazando con más fuerza tu cintura – Te conocí a una edad temprana y fuimos mucho tiempo amigos ... Y luego novios... Y ahora deseo con toda mi alma que te conviertas en un título mayor que de enamorada, quisiera que fueras esa persona que al levantarme pueda observar y decir que me saque la lotería, esa persona que me dirá que cocine bien aunque sea mentira, esa persona que tendré en casa cuando llegue de gira, quiero que seas esa persona que luego de un día en la empresa te alegre verme ... Quiero que seamos siendo el mismo equipo que somos, sin lujos y con muchas escapadas de los medios... Eres mi otra mitad Ha Min Young y lo sé desde el momento en que te conocí pero ahora quiero que seas Chae Min Young... Quiero que seas mi esposa, ¿Aceptas?.

Un anillo apareció ante tus ojos llenos de lágrimas, no esperabas que te pidiera matrimonio ese día, si tenías sospechas después de enterarte que Mina le dio el número de tus anillos y bromeara de que ya no eres una bebé sino una mujer con futuros hijos.

– Minnie... – habló nervioso el castaño ante el silencio que se había provocado.–

Volteaste y con una sonrisa amplia lo abrazaste gritando que si querías ser tu esposa.

– Te amo Chae Hyungwon – sonreíste antes de besar sus labios de una forma lenta y dulce, sin apuros.–