Esperando (Steven x Spinel)

33-Spinel busca Steven

Greg se apresuro a dejar a Steven y Spinel en el granero, apresurándose para irse sin mucha despedida, eso parecía lo mejor para Perla y para él, aunque por su parte Amatista hacía burla de ambos. El grupo no tardo en ponerse manos a la obra, o mejor dicho Peridot y Perla, mientras que Amatista, Steven y Spinel estaban en otra esquina "trabajando", o mejor dicho evitando molestar a las otras dos gemas en su trabajo.

Al final el híbrido se durmió casi a media noche junto con la gema rosada, Amatista intento ayudar una vez más pero Perla y Peridot la rechazaron, por lo que la gema morada decidió que también iba a echarse una siesta hasta el amanecer. Mientras que la gema sirvienta y la ingeniera habían logrado conseguir ciertos avances, se habían decido por hacer algo similar a un cañón que apuntaría hacía El Cluster, logrando ciertos avances en la forma y como se activaría.

Las horas que esto costo dieron su fruto entre las tres y las cuatro de la mañana, donde incluso Peridot había sudado un poco por tanto trabajo en tan poco tiempo, pero por otro lado Perla lograba mantenerse bastante fresca, ofreciendo un poco de agua a la gema verde. El dúo no hablaba mucho, no era como si lo necesitarán o que fuera pertinente, hablar mucho podría despertar al híbrido o alguna de las gemas que dormían.

Sin embargo lo que más sorprendió a Perla y Peridot, fue que repentinamente utilizando sus alas, Lapis entro bajando del silo y entonces metiéndose por la ventana, llamando la atención del dúo -Hey chicas, hay algo allí afuera- Exclama la gema azul algo preocupada, para sorpresa de la gema sirvienta y la ingeniera. Perla no tarda en tomar el dominio de la situación.

-Peridot, Lapis, quédense aquí y asegúrense de que nada a parte de mi entre- Sentencia la gema más alta con seriedad, saliendo rápidamente por las puerta del granero, que cierra casi sin ver, por otro lado las gemas verde y azul se apresuran a realizar lo que Perla ordeno, cerrando ventanas y poniendo cajas en cualquier posible grieta. Aunque sin saberlo habían despertado a alguien.

-¿Que viste Lapis?- Le pregunto con curiosidad Peridot a su compañera, susurrando con cierto miedo y preocupación, sentimientos que por su parte la gema azul compartía.

-Había hielo y árboles cayéndose- Explica Lapis apresurada, sabiendo que aquello debía ser con casi total seguridad, acto de alguna gema, esperando que se tratará de una gema corrupta, por su parte la antigua gema del espejo no estaba tan equivocada. Debido a su charla, no se dieron cuenta de que Steven se había despertado y con curiosidad se abrió paso hacía donde estaban las dos gemas, dando un sobre salto a estas.

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Parecía que el mundo cada vez era más peligroso, eso molestaba bastante a Perla, que vivía cuando aun los humanos no habían descubierto la pólvora y el mayor peligro de destrucción mundial eran efectivamente las mayores gemas corruptas, de las que las Crystal Gems ya habían atrapado la mayoría para cuando Steven ni siquiera había nacido.

La gema sirvienta logro guiarse siguiendo los pequeños sonidos y frías brizas que venían de otra dirección, acercándose cada vez más al punto de origen de los extraños eventos, Perla se sorprendió de lo que encontró en aquel pequeño recoveco del bosque, donde Zafiro traía como podía en una cadena de hielo a una gran gema corrupta.

-¡Perla!¡Hola Perla! ¿Como te va?- Saludo emocionada la gema azul, mientras que su compañera la miraba atónita, la gema corrupta intentaba liberarse del hielo, rompiendo árboles y rocas a su alrededor, esta gema tenía unos pequeños cuernos, carecía de ojos, tenía una gran y puntiaguda mandíbula, con un cuerpo grande y robusto, tenía una gran variedad de colores en su gema y todo su cuerpo, era una Biggs Jasper.

-...Zafiro...¿Que estás haciendo?- Pregunto Perla preocupada pero lentamente acercándose hacía las dos gemas, la Biggs Jasper estaba cada vez más asustada pero el hielo generado por Zafiro le detenía cada vez más, parecido a una boa constrictora.