Renacer de las cenizas (SERQUEL)

3-Electricidad

SERGIO

365 días eran lo que me separaba del recuerdo del atraco, 365 desde el fatídico día donde empezó aquello que tanto esperé, para donde mirase me daba cuenta que habíamos podido escapar, que habíamos burlado al sistema y habíamos pasado a la historia, pero también sé, que para donde mirase me faltaba algo, eso que hizo que día tras día me convenza más que el amor es debilidad.

Todo sería más fácil si Raquel solo hubiese sido parte de un plan perfecto en el cual ella era una pieza clave para mover a la policial como peones, pero no, ella era mucho más que una pieza del plan, ella fue esa falla que hizo que todo aquello que siempre mantuve fiel a mis ideales se vaya a la mierda en un segundo cuando la miraba directamente a los ojos.
Los recuerdos no van hacer que ella vuelva, y lo entiendo completamente, por un lado es lo mejor que pudo pasar, si ella estuviera acá sería algo para lo que quizá no esté preparado, a si que mejor mantenerla lejos y solo quedarme con eso, con recuerdos.

La isla se convirtió en mi refugio de paz, tuve muchas noches en soledad en las cuales pensé en cada detalle del robo, en Berlín y en la banda que algunos días me hacía mucha falta. En este lugar empecé de nuevo, siendo simplemente Sergio, un lugareño que quiere solo disfrutar del paisaje sin mayores complicaciones. Más que claro está, que nunca dejé de tener todos los frentes cubiertos, y de pensar cada detalle.

Mis días eran bastante repetitivos y monótonos pero a esa rutina le encontré un cariño, pasaba la gran parte del día leyendo y observando el mar, alguna que otra vez terminaba emborrachado en la playas o en la barra de algún bar. Alguna mujer terminaba en mi cama los días que la soledad me pesaba demasiado, nada serio pero había días en los que necesitaba relacionarme con algún más.
El amor es un puto espejismo por el cual no voy a volver a pasar, con Raquel lejos,mi corazón está tranquilo y eso seguirá así por mucho tiempo. La fachada de tipo distante me viene muy bien es así como me voy a seguir manejando.

Y simplemente pasó, la ví, hermosa y espectacular como siempre, parada al lado de un banco con un cigarro en la boca y el teléfono en la otra mano, la vi y al principio pensé que lo imaginé todo que era mi mente que buscaba desesperadamente volverla a ver, pero no ella estaba ahí parada frente a mi, hablando con una sonrisa y los ojitos chinos del cansancio, con ese pircing que me volvía loco, y mi miró directamente a los ojos, se quedó estática sin poder moverse ni decir nada, cortó con torpeza la llamada y camino hacia mí.

Me miró a los ojos y de sus labios escuché salir mi nombre "Sergio" con algo de torpeza y de temor, no podía creer que estuviese parada frente a mi.

-Inspectora... pensé que jamás iba a volver a verte Raquel.- quise sonar natural, como si no me estuviera muriendo por dentro- No puedo creer que estes acá- pero no podía ocultar que me sorprendía y me daba una felicidad inmensa tenerla cerca mío nuevamente.

La gente pasaba por al rededor nuestro pero ninguno de los dos se movía, no podíamos movernos si después de un año sin vernos seguimos sintiendo eso en la mitad del pecho que nos dejaba sin aire.

-Sentís?- fue lo primero que pude articular porque sus ojos me estaban mirando y no podía despegarme de ellos

-Que cosa?- me preguntó Raquel con una mueca de asombro y extrañeza-

-Lo qué pasa cuando nos miramos? Es como si el mundo se detuviera, no lo sentís?

Se quedó muda, al igual que yo, me arrepentí al instante de decir algo tan cursi, fue lo que sentí en el momento pero definitivamente no quería que viera a un Sergio desesperado por ella, no era lo que quería mostrarle, al menos no hoy, no así. No deje que dijera nada y me apresura a dejar el comentario sin importancia

-igual, es algo normal no? Después de más de un año sin vernos, creo que le pasa a todo el mundo que deja de verse con algún por un tiempo, Inspectora que hace por acá?- ella me miraba sin saber qué decir, creo que el cambio de actitud la sorprendió un poco.

Sentí que dudó en que responder y al final me miro bajó la cabeza y salió casi como un murmullo.

-Encontré los postales y creo que un acto de suma irracionalidad venir hasta acá.

-Si definitivamente fue irracional si solo viniste por eso, creo que pasaron muchos cosas entre nosotros y de igual manera nos debemos una charla no le parece Inspectora?- estaba dubitativa y mirándome fijo a los ojos creo que buscando un rastro de ese Sergio que ella esperaba.

-si, realmente a eso vine, a cerrar este círculo que no me deja en paz, así vos vas a poder volver a tu vida perfecta de mierda y yo voy a poder dejar de sentir que me metí con el mayor hijo de toda España, eso le parece bien Profesor?.