Tanjirou es un Omega que lo único que tiene en mente es cuidar a su pequeña hermana, sin embargo, sin previó aviso su cuerpo entró en celo en el peor momento.
Inosuke es un alfa, líder de un pequeño poblado y aunque sea un completo incoherente e im...
Tanjirou contuvo la respiración y por pequeños segundos sintió como su mundo se derrumbaba, pero al mismo tiempo otro nacía. Al ver como la tapa es levantada por reflejo se escondió aunque sus ojos no se apartan del ser extraño, miro la cabeza de jabalí asomarse y gritar palabras humanas.
Hace momentos él desbordaba miedo pero en estos instantes alivio y seguridad no evitó sentir —Ahg...- gimió al ser tocado, el hombre lo agarro de ambos hombros sacándolo de ese bote sucio, por alguna razón esta feliz y su Omega interno sólo gritaba por atención, el chico enfrente de él es un alfa, las feromonas de ese hombre eran tan intensas y atrayentes que no evitó querer ser penetrado y llenado por el extraño...
Pensó en gritar por ayuda pero el apoyo quiere recibirlo del ajeno que lo sostiene en brazos, por algunos segundos miro la luna y como está, poco a poco se ve borrosa... Al menos para él, después finalmente cayó en un profundo sueño.
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—Capítulo tres-
—¿Qué es esto?- Inosuke pensó al ver como ek contrario parece esconderse como un gato temeroso —No eres comida- de nuevo pensó desilusionado e intrigado —¿Por qué hueles demasiado bien?- agarro al chico de los hombros y un ruido extraño salió de los labios ajenos.
—¿Qué fue eso?- su mente dijo pero al escuchar dicho sonido su parte baja sintió un hormigueo... Por alguna razón quizo de nuevo escuchar aquello —Se sintió extraño... Pero demasiado bien- estuvo por algunos segundos contemplando al contrario, su rostro sonrojado combinado con su pelirrojo cabello, si, es algo digno de admirar.
—Oye- susurró y trato de no sonar brusco como suele hacer, no quiere que ese lindo niño se asuste, intento poner atención al contrario, aunque simplemente recibió silencio —Oye ¿Por qué cierras los ojos?- pregunto al ver como el frágil cuerpo se desploma frente sus ojos, queriendo obtener una respuesta movió al contrario con algo de cuidado, sin embargo, fue inútil, sin otra cosa en mente prefirió observarle por algunos minutos más —¡Ja! Eres un Omega... Son muy débiles- comento queriendo que el otro despertara pues con un insulto todos se enfurecen... Bueno, es su extraña lógica —Y demasiado frágiles- razonó, el cuerpo del pelirrojo parece una vasija de porcelana que en cualquier instante, sobre sus brazos podría romperse.
El alfa regreso corriendo con sus compañeros, el omega no dio algún indicio de despertar y eso llegó a preocuparle, no quiere que el bajito éste herido... mataría al que lo haya dañado.
—¡Inosuke!- un grito se escuchó a lo lejos —¿Por qué desapareciste? ¡Nos preocupaste!-
—Oye... ¡¿Lo secuestraste?!- el rubio miro al chico que es sostenido por su líder, respiro y con curiosidad siguió olfateando al Omega.
Inosuke gruño con enfado —¡Te mató!- gritó con enojo logrando que el rubio diera un brinco, el chico de inmediato se alejo antes de que el jabalí le propinara un golpe.
