EN CONTRA DEL DESTINO

CAPÍTULO CINCO

Cerca de la cafetería, un Alpha y un omega se encontraba hablando.

—Quiero que dejes de estarme vigilando— se cruzo de brazos.

—No puedo, corres el riesgo de ser atacado por Tom— Matt no quería mentirle, debía decirle todo como era.

En eso, Tord sintió su teléfono vibrar y cuando lo saco reviso el mensaje que le había llegado, era Edd pidiendo que fuera a buscarlo detrás de los baños si es que tardaba demasiado.

—Si, sé que lo haces por eso- suspiro— Pero no me tienes que proteger, se cuidarme muy bien-.

—Lo sé, pero algo en mi no me deja— el rubio tomo de los hombros al Omega —Siento que tengo que protegerte— sus palabras provocaron un sonrojo en el noruego.

Paso un rato y nadie decía nada, el Alpha aun tomaba al Omega de los hombros como esperando una respuesta; sin embargo, Tord sintió que algo malo le pasaba a Edd por lo que salió corriendo en dirección a los baños. Matt cuando lo vio correr se preocupó, así que no tuvo de otra que seguirlo. Cuando llegaron al lugar lo primero que miraron fue como Tom atacaba a su amigo de polera verde. 

—¡Basta, sueltalo!—.

.....

Ya lejos de los Alphas, los dos chicos se dirigían a la enfermería por unos supresores para Edd. La escuela estaba casi vacía pero la enfermera era de las últimas en irse por si algún alumno entraba en celo durante las horas de limpieza.

—Calma, ya casi llegamos— Tord que sostenía a su amigo para ayudarlo a caminar le dijo tratando de calmarlo.

Edd estaba liberando unas fuertes feromonas haciendo que su cuerpo se calentara más, dificultándole caminar. Llegaron a la enfermería y la encargada se asusto al ver al chico así, pensando en lo peor; lo bueno es que no le había pasado nada. Luego de que el chico se tomara los supresores, la enfermera fue a la dirección para llamar a sus padres para que fueran a recogerlo, dejando solos a los Omegas.

—Lamento todo Edd, es mi culpa que te pasara eso— Tord se encontraba sentado en una silla junto a la cama donde reposaba si amigo.

—No te disculpes, yo ya me sentía mal desde la mañana y no hize nada— su voz sonaba cansada.

—Si, pero aun así lo siento.... Quizá si hubiéramos ido juntos no habría pasado nada— agachó la cabeza, realmente se sentía culpable-

—Ya dije que no tienes nada de que preocuparte— río un poco, a pesar se todo su amigo comenzaba a sonar poco a poco como un Omega, eso avergonzó un poco a Tord.

—Sabes, creo que Matt...— no termino la frase, sus mejillas comenzaron a ponerse rojas.

—¿Matt qué?— Edd puso una sonrisa pícara, estaba cansado pero eso no quitaba que podía molestar un poco a su amigo.

—No importa, pero ya hable con él y parece que ya no hara nada— sacudió la cabeza.

—Eso es bueno, lo mejor seria que ahora tú hablaras con Tom— su rostro se puso triste, ser atacado por un amigo de la infancia no era algo muy bueno —Aunque sé que es peligroso, por eso lo mejor sería que fueras con Tamara primero o le dijeras a alguien que te acompañe—.