This LoVe

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Estaban a menos de medio metro, la energía que se sentía era impresionante.
Estuvieron en silencio unos segundos, ambas calmándose así.
Lauren suspiró mirando hacia arriba como si estuviera pensando decir algo, o como decirlo.

-Dime...- Dijo Camila con una voz suave y calmada.

Lauren la miró a los ojos y lo que ambas sientieron en ese momento fue abrumador, se estaban acercando casi sin darse cuenta, sintiendo una necesidad que provenía desde lo más profundo de su interior, empujándolas a por lo que tanto les traía de cabeza, a por los besos, los abrazos, las caricias eternas, los mil planes juntas...
Las ganas eran tantas por ambas partes que, las dos se dieron cuenta de lo que estaba pasando...
Camila notó como Lauren se tensó reprimiendo todo lo que le estaba viniendo a la cabeza, más bien reprimiendo toda la energía que azotaba su cuerpo fuertemente para lanzarse a por ella.
Camila respiró profundo para no actuar como siempre, para no llevar ella la situación, se frenó a si misma de coger la cara de Lauren y besarla como si no existiera un mañana del cual preocuparse, o como si no tuvieran todo un pasado juntas pisándole los talones.
Volvió a respirar, sacudiendo su cabeza para aclarar sus ideas, ya que el instinto le estaba comiendo la conciencia del momento.
Miró hacia arriba con los ojos de Lauren mirándola expectante, y repitió con toda la suavidad que su voz le permitió.

-Dime, Lauren...

El momento había cambiado por completo, toda la sensación del principio se había disipado entre suspiros, miradas, tenerse ahora a centímetros...
Lauren se pensó dos veces si hacer la pregunta, porque estaba notando que podría volver a vivir con Camila todo el amor que siempre se han tenido, su cabeza iba a mil con millones de pensamientos acompañándola, unos diciéndole que se callara y la besara, otros pidiéndole huir, otros querían explicaciones, otros buscaban pelea...
Ese momento de agobio mental y la atenta mirada de Camila, la hizo preguntar lo que ya sabía que la haría explotar.
A escasos centímetros una de la otra, Lauren se atrevió a hablar.

-Cuándo empezaste a mentirme?
-Perdona?- Preguntó Camila ya con una cara completamente distinta a la que había visto los últimos minutos.
-Te estoy preguntando que, en qué momento empezaste a mentirme con respecto a Shawn-Le preguntó más serena, se sorprendió a sí misma de poder hacerle esa pregunta de buenas maneras, porque era sacar el tema y la rabia le corroía por dentro.
-Me imagino que estás de coña y que por algún extraño motivo te parecía divertido meterte en mi vida otra vez y además pidiendo explicaciones.- Contestó Camila enfadada.
-Lo que me gustaría saber es si llevas años riéndote de mí o si has empezado ahora con tu gran lanzamiento. - Respondió Lauren indignada, tratando de tapar la tristeza que en realidad desataba esas preguntas.
-A ver, Lauren, esto es una cámara oculta?- Preguntó Camila medio riendo, buscando la cámara o a alguien.- Acaso es una broma tuya con Dinah, que muy graciosas estáis cuando os juntáis.- Decía buscando razones de la presencia de la morena en su casa, con reproches, pidiendo explicaciones, tenía que ser una broma.
-Esto no es ninguna broma, te estoy preguntando si estabas conmigo y con él a la vez!?- Le gritó con lágrimas en los ojos.
Camila se sorprendió por la manera en que le había gritado, encima acusándola de infiel en su propia casa, cuatro años más tarde!
-Me estás tocando la moral, Lauren-le respondió muy enfadada, estaba empezando a notar que iba a perder el norte.- Vienes a mi puta casa a pedir explicaciones de cosas que ya hablamos hace años? Pero es que acaso no tienes vergüenza? De qué coño vas?
Lauren no se quedó atrás, la discusión se estaba empezando a salir de madre.
-Mira, por lo que yo sé tuvimos muchos problemas con este tema años antes, pero sabes lo más jodido?-Preguntó Lauren mirando con los ojos llorosos a Camila, la cual se mostraba dura, distante y muy enfadada.- Lo jodido es que me has puesto en ridículo con tu puto disco!
-Ah sí, señorita, y me puede explicar cómo he hecho eso?- Preguntó Camila vacilona, como si Lauren estuviera flipada.
-Has dejado claro que siempre has estado con él, que siempre le quisiste a él y para colmo, que todo lo que hayas vivido antes de él, no era nada!
Camila respiró antes de hablar, parecía a punto de estallar.
-Lauren, me da puta pereza contestarte, la verdad. Hemos vivido mucho, estoy cansada de tus idas y venidas de olla, de presentarte cuando te da la gana en mi vida, acostarte conmigo y largarte, y hoy qué? Encima vienes pidiendo explicaciones, reprochando cosas, buscando pelea... La verdad es que hiciste muy bien diciéndome que no te apetecía verme hace seis meses, conseguiste lo que llevamos años intentando.
Ahora lo tienes, ahora lo tenemos, así que haz el favor de darte media vuelta y largarte, porque lo que opines de mi disco, o las gilipolleces que estés pensando, me importan una mierda.

La cara de Lauren después de esas palabras era un poema, hasta sus lágrimas se secaron, se vació completamente en unos segundos... Y si Camila no hubiera vuelto a hablar, se hubiera largado de allí sin más, total, estaba claro que sólo se hacían mal.

-Así que, te repito, no sé qué venías buscando, pero no te necesito para nada, y para tu información, sí estoy muy satisfecha.-Terminó su discurso poniendo una buena guinda, a sabiendas de que iba a hacer polvo a Lauren, eso sucedería, pero no en ese momento, cuando Lauren escuchó esas palabras se giró completamente y ya que esto iba de ataques, dejaría las lágrimas para su casa, no le iba a dar el gusto a Camila.
-Sí? La verdad es que no lo parece, porque estás buscando hacerme daño con esas palabras, intentando demostrar algo, no sé, háztelo mirar, igualmente, sigues siendo la misma niñata de siempre, así que tras tu sugerencia de largarme, sí, lo voy a hacer, esperando no volver a verte en la puta vida.

Lauren salió de allí corriendo, evitando que hubiera más comunicación entre ellas y ahora si dejando que sus lágrimas cayeran.
Cogió el coche que tenía aparcado justo enfrente y salió derrapando, Camila observó la escena desde una de sus ventanas, notando como sus lágrimas empezaban a caer.