Marinette desapareció

Llanto

Adrien calló arrodillado y lágrimas salieron de sus ojos instantaneamente al cortar la llamada con Sabine.

-Plagg, Marinette no llegó a su casa desde ayer- dijo y su llanto creció más.

Plagg intentó tomar enserio al pobre chico y su llanto, pero se le hizo una burbuja con sus mocos en la nariz.

Quiso ponerse serio pero el universo no lo deja.

La gatita corrió donde Adrien. Se acurrucó alado del chico que estaba debastado por la noticia.

-Qué esperas chico, vamos a buscarla, talvez este siendo Lady Bug- dijo el kwami que realmente estaba preocupado (se reventó la burbuja).

La última vez que Adrien lloró tanto fué con la pelicula de Crepusculo.

Y fué por culpa de Marinette, que lloró primero.

Marinette...

Y el llanto del chico creció denuevo al recordar un momento bonito con ella.

El chico no perdió más tiempo y se transformó. Quería más momentos felices con ella.

Estaba apunto de saltar por la ventana pero el felino se interpuso en su camino.

-Ahora no Ponchito, tengo que ir a buscar a mi princesa- la gatita se aferró a la pierna de su dueño quien solamente quería ir a buscar a la dueña de esos ojos azules que lo habian cautivado.

Aunque el gato tenía las garras clavadas sobre el ahora transformado Chat Noir, el logró librarse de ella y saltó por la ventana dispuesto a recorrer todo Paris si era nesesario.

Ella solo lo miró irse con pena.

Al menos intentó decirselo.

Un olor llegó a las fosas nasales de la ahora bautizada Ponchito.

Siguió el olor y se encontró con la reserva de Camemberts de Plagg.

¿Qué tienen los gatos con el queso? Al parecer no solo es problema de Plagg.

Si tan solo alguien le hubiera avisado a Ponchito que estaba por tomar la peor desición de su vida.
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Chat Noir llegó triste al no haber visto ni una sola pista de donde estaba Marinette.

Entró a la habitación y encontró a Ponchito acostada boca arriba y con el hocico abierto durmiendo plácidamente.

Sonrió enternecido al ver la escena.

Le recordó a Marinette cuando se acabó el bote de helado gigante que le regaló una vez que se sentía culpable. Justo la encontró en la misma posición en la que Ponchito estaba.

Esa sonrisa se desvaneció poco a poco al ver las migajas de queso alrededor de la boca de la gatita.

Tomó a la gatita en brazos y se destransformó con miedo.

Fué un gusto haber conocido a Ponchito. La gatita con nombre de niño.

Y salió el temido Plagg con los ojos rojos de furia al ver que el gato había comido tres de sus ciento cincuenta quesos que tenía en la nevera.

Plagg volteó en camara lenta y miró a Adrien espeluznantemente.

Haría una excepción con Adrien por estar triste, pero esa gatita no se salvaría.

Continuara...