~asesinos seriales~

MI TÍO BENJAMIN.

MI TÍO BENJAMIN.

Ahí estaba yo dándole de martillazos, una y otra vez sin parar, lo odiaba mucho.

Mi nombre es Vanesa y mi edad 17 años, les contare mi historia, mi terror empezó cuando mi tío Benjamín llego a nuestras vidas.

Desde que mi padre falleció mi madre y yo tuvimos que arreglarnolas solas, mi pobre madre hacia trabajos extras para poder sacarme adelante.

En ese entonces tenía 12 años, mi mamá siempre me decía que mi único trabajo era esforzarme en mis estudios y no descuidarlos, yo me esforcé mucho quería terminar mis estudios y poder ayudarla.

Un día mi tío Benjamín llego de EE.UU a mi madre le gusto mucho que su hermano estuviera de regreso así podría apoyar con algunos gastos de la casa.

Mi tío se alojo y de inmediato entro a una empresa a trabajar, nosotras estábamos felices por él.

Los días pasaban y todo había mejorado, mamá ya no hacia dobles turnos porque ahora contaba con el apoyo de mi tío.

Así pasaron los meses, yo había cumplido 13 años y mi tío con mi mami habían preparado una pequeña fiesta, para celebrar mi cumpleaños y las buenas notas que había sacado en el colegio.

Era muy feliz sentía que tenía una familia de nuevo, hasta que llego esa aterradora noche donde yo descansaba en mi cuarto.

Esa noche fue lo mas horrible que me podía pasar, mi tío había entrado a mi cuarto y se había recostado a mi lado manoseandome las piernas, yo no podía gritar por el susto, solo me hice la dormida.

Luego de que mi tío me manoseara se levanto de mi cama y se fue.

A la mañana siguiente mi madre me llama para desayunar, yo baje y ahí veo a mi tío, estaba bien nerviosa, mi tío me da el saludo de buenos días con una sonrisa, yo bajo la mirada y también lo saludo.

Al acabar de desayunar me levanto y me retiro, después de clases iría a ver a mi madre y contarle lo que había pasado esa noche.

Ya era la hora de salida, mi movilidad llega por mi y me lleva a casa, pero había una ambulancia en frente de mi casa, yo salí corriendo para ver que había pasado.

O NO ! .... Estaban sacando a mi madre, al parecer había tenido un accidente.

Me puse a llorar, no entendía lo que había pasado en eso sale mi tío y me abraza, me dice que mi madre se había caído de las escaleras y que al parecer el golpe que tuvo en la cabeza era grave.

Yo me safe de los brazos de mi tío y pedí que me llevaran en la ambulancia con mi madre.

Ese día fue el peor día de mi vida, esa tarde mi madre había fallecido y lo peor era que mi tío se iba hacer cargo de mi.

Yo tenía mucho miedo no quería que él se encargará de mi , pero por ser el único familiar cercano le dieron mi custodia, después del entierro me encerré en mi cuarto a llorar, habré llorado toda la tarde hasta haberme quedado dormida.

A la mañana siguiente mi tío me llama para tomar el desayuno, yo baje y lo mire con mucho odio.

Él me empieza hablar que de ahora en adelante todo cambiaria, me agarra la mano y yo al toque pedí que me soltara.

Me levante de la mesa y me fui para mi cuarto, ahí empecé a ver las fotos de mi padre y de mi madre, los llore hasta que ya no tenia lagrimas.

Cuando ya estaba anocheciendo me dispuse a cerrar la puerta de mi cuarto, pero en eso mi tío entra y cierra la puerta yo le grité que saliera de mi cuarto pero él solo se quitó la correa y me tapo la boca.

Era tan indefensa, él tenía mas fuerza que yo, no pude defenderme, él había abusado de mi esa noche.

Después él sale de mi cuarto, yo no podía moverme por él dolor, solo llegue a alcanzar una fotografía de mis padres y la abracé.

Han pasado tres años viviendo con ese monstruo, él abuso de mi todo estos años y llego a embarazarme pero me llevó a un lugar horrible donde me extrajeron a mi bebe, cuando izo eso sentí mucho pero mucho odio hacia él.

Esto tenía que parar, un día que él entro a mi cuarto a abusar de mi otra vez, yo me negué, le empecé a gritar le dije que lo denunciaria, pero mi tío me agarra del cuello fuertemente y me dice que si hacia eso me haría cosas mas horribles y que luego me mataría, ya que para él no era la primera víctima que mataba, él me confiesa que había sido el causante de la muerte de mi madre.

Al escuchar eso me pongo a llorar, luego mi tío me lanza al suelo y me deja ahí, yo tratando de recuperar el aliento le dije que me vengaría, pero eso a él solo le causo risa y se fue.

Pasaron los meses y me estuve portando bien con mi tío benjamín, lo atendía y ya no forcejeaba cuando abusaba de mi, él estaba mas complacido que me decía que así debería comportarme.

Una noche espere a mí tío con una vestimenta escotada, lo espere en su habitación.

Él llego y me empezó a besar, yo dije que hoy seria un día especial, así que lo eche en la cama y lo amarre bien en la cama, luego le sonrei y le dije que ahora me iba a cobrar todo el tormento que me había causado durante todos estos años que estuve a su lado.

Le tape la boca y me dispuse a traer una mascota, había conseguido una rata, le di un beso a la ratita y la puse en el estómago de mi tio, luego la tape con una lata, prendí un encendedor y calenté la lata, esto izo que la rata se desesperara y al no tener por donde salir empezó a chillonear y su única salida era rasgar el estoma de mi tío.

Mi tío empezó a dar sonidos de dolor, las lagrimas le caían por el rostro, empecé a reírme pero no quería que esto acabara así.

Levante la lata y la pobre rata se había escapado por el susto que tuvo, este ya estaba apunto de hacerle un hoyo en el estomago .

Después agarré unas tijeras grandes y corte los miembros de mi tío, pero eso no era suficiente para mi, así que empecé a cortar también sus dedos, él aun con vida se retorcia de dolor pero ya estaba apunto de morir.

Así que le di el toqué final, agarré el martillo que tenía y PUM le di el primer golpe en la cara, una y otra vez hasta que destroze su cráneo, pero ni aun así pare, ya que vinieron todos los recuerdos de terror que viví y la confesión que él izo, de que había matado a mi madre.

Con lagrimas en mis ojos le seguí dándole de martillazos, aún que él ya estaba muerto pero yo no pare, hasta que su cabeza era ya un puré de cerebro esparcidos por la cama.

Ahí recién pare, pero sentí que no había sido suficiente quería que reviviera para seguir torturandolo, solo me quedo levantarme he ir a prepararme un café.

Ya todo había acabado.

Créditos: Alejandra A.