Rebelde Way: Bariloche (MI VERSIÓN)

Capitulo 4

Narra Marizza

Yo me había ido a acostar y estaba durmiendo, pero todos continuaban en la fiesta, al parecer nadie se había percatado de mi ausencia y la de Pablo. 

En la fiesta:

Mia: Te amo mucho Manuel

Bailaban juntos y besándose de vez en cuando. 

Manuel: Yo más Mia. Vamos a otro lado?

Mia: Dale

Le agarró la mano y juntos salieron del boliche, pasando al lado de sus amigos que se encontraban en la barra. Marcos estaba apoyado en la misma y al frente Luján, que lo veía totalmente enamorada. Rieron ante la actitud de Manuel y Mia y el chico tomó un poco de cerveza.

Marcos: Acá nadie pierde el tiempo

Luján: ¿Vos queres hacer lo mismo?

Él abrió los ojos sorprendido, se atraganto con la bebida y escupió un poco en el vaso. Con la ayuda de ella, se recompuso y le dio un beso suave, sonriendo.

Marcos: Dale

Ellos también se fueron y solo quedaron Tomás, Pilar, Guido y Laura. Éstos estaban sentados en una mesa, más tranquilos.

Tomás: Chicos, nosotros también nos vamos, ¿No Pili?

Pilar: Si, si 

La morocha se acercó a su amiga que estaba un poco incómoda y le susurró algo al oído, alegre.

 Pilar: Lau, dale para adelante 

Se rió y desaparecieron entre la gente. El ambiente era muy tenso entre Laura y Guido. No se miraban ni se hablaban. Quería correr, salir de ahí, acostarse en su cama y dormirse, no había sido una muy buena noche para ella. Estar a solas con Guido le hacía recordar los tiempos juntos y la ponían triste y melancólica.

Guido: Laura, te quería decir algo

Desde 4 año, le había parecido hermosa. Rubia, sus ojos marrones oscuros y su personalidad era lo que más lo enamoraba. Capaz no tenía el físico más deseable, pero nunca le importó. Desde que habían cortado, meses atrás, no había estado con nadie más, aunque nadie lo sabía, ni sus amigos. No podía olvidarse de ella y eso le impedía acostarse con más chicas, por primera vez en su vida.

Laura: Si te queres ir con alguna o algunas minitas tuyas, no hay problema, anda

Le dolió decirle eso, pero era lo que pensaba y no se lo podía guardar más. Guido miró para abajo, no la podía culpar de pensar eso y realmente se lo merecía.

Guido: No, no es eso. Te quería contar que escuché lo que decían hoy con Mia en la caminata, y por más que no estemos juntos, no sé, me dolió lo que le dijiste a Mía

Laura: Perdón si te herí, pero bueno, es lo que pienso. Perdóname, pero no puedo seguir con esto, chau

Lau se fue y Guido se quedó mal. Mia y Manuel estaban caminando por la orilla del río, con zapatos en manos y mirando las estrellas. El silencio que se apoderó de ellos, era tranquilizador y relajante.

Mia: Esto es hermoso, Manu

Manuel: Si, el paisaje es súper lindo. Nunca te voy a terminar de agradecer a vos y a tu papá por pagarme esto. Te amo y gracias

Mia: De nada. Yo te amo y mi papá te quiere un montón y además no nos cuesta, así que a disfrutar, que esto recién empieza 

Se besaron y continuaron juntos, viendo a su alrededor y contemplándose mutuamente.

*

Luján y Marcos se estaban besando y entraron a la cabaña de ella y se sorprendieron al ver a Marizza dormida.

Luján: Mejor vayamos a otro lado. Marizza se podría despertar por más que estemos en otra habitación

Marcos: Vamos a la mía

Los chicos fueron a la cabaña del lado y vieron a Pablo todo desarmado en la cama.

Marcos: Pero están todos durmiendo, che

Luján: Bueno pero, está borracho, está dormido re profundo, además está en otra habitación

Marcos: Si además Pablo siempre tuvo el sueño pesado. Bueno, vamos

Se fueron al cuarto y se sentaron en la cama. Ella estaba nerviosa, nunca lo había hecho pero estaba segura que quería que Marcos fuese el primero, aunque era un poco incómodo.

Luján: ¿Guido no va a venir?

Marcos: No, seguro se fue con alguna chica

Luján: Ah, está bien.

Quedaron un ratito en silencio y después se vieron.

Luján: Te amo, Marcos. De verdad. Sé que estuviste triste el último tiempo por tu mamá, fue muy duro, pero yo estoy acá con vos para todo lo que necesites. No me quiero imaginar el dolor que sentís, pero sé que sos fuerte, más de lo que pensas, y vas a seguir adelante, te lo aseguro

La mamá de Marcos había fallecido 1 mes atrás, por un ataque al corazón. Todos lo apoyaron a él y a su padre, ya era la segunda perdida en su familia, contando a su hermano, años atrás. Él se puso demasiado triste, pensando en todos los momentos que se habían perdido y no iban a poder recuperar. Pero ahí estuvo Luján, a su lado, sin dejarlo solo un momento, soportando los maltratos y mal humores de él, pero nunca le importó, ella era fiel a su amor.

Marcos: Yo te amo, Luji, gracias por todo

Luján: Sos hermoso

Le dio un beso y él se lo devolvió. Marcos empezó a subir el tono y se tiró suavemente encima de Luján. Empezó a besarle el cuello, luego la oreja provocando que Luján cerrara los ojos. Luján le sacó la remera y después él a ella.

Marcos: Te amo, sos el amor de mi vida 

Luján: Vos también sos el amor de mi vida, Marquitos

Se volvieron a besar y Marcos le dio besitos por el cuello, varios suspiros resonaron en la habitación. Marcos vio a Luján, pidiendo permiso, ella asintió segura y con una sonrisa. Todos los nervios que ambos sentían, desaparecieron al instante. Se sentían seguros y amados, el uno por el otro.