Capítulo XX

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La detonación hizo eco dentro del lugar, los reflejos del pelirrojo fueron más rápidos logrando dar un golpe en el brazo del ruso desviando el camino de la bala al mismo tiempo que este soltaba la pistola

- ¿acaso creíste que iba a ser tan sencillo deshacerte de nosotros? - una sonrisa divertida se dibujo sobre sus niveas mejillas escuchando desde el auricular la voz de su subordinado

- Chuuya san tenemos a Hikaru iniciaremos la retirada-

- llevala lejos de aquí Atsushi - le respondió al albino acercándose para recoger el arma de fuego del suelo - que la revise Yosano san

- no saldrán con vida, ni siquiera llegaran a la salida - le dio la espalda para caminar alrededor de aquel cuarto, sabía que no le dispararía, no podrían matarlo tan fácilmente de lo contrario el juego dejaría de ser interesante

- dudas de mis hombres, típico de una rata- el castaño con dificultad se puso de pie llevando su mano a la herida del cuello, apenas había sangre pese que la bala estuvo a pocos centímetros de la carótida - siempre tan preciso Chuuya, no por nada eras el mejor de la mafia - saco un par de bolsas con sangre casi vacías de debajo de su saco tirandolas a un lado

- así que llevabas chaleco antibalas- el azabache observo con asombro al mafioso, por un momento al ver el espeso líquido carmesí creyó que lo había asesinado sin embargo todo había sido una farsa - supongo que me confíe

- así es y esto se acaba ahora - con cuchillo en mano se acercó a toda prisa al extranjero ayudándose de su habilidad, estaba dispuesto para darle fin a su vida junto el conflicto de organizaciones, tenía que vengarse de lo que le hizo a su hija, quería torturarlo lentamente pero sabía que si le tocaba tan solo un cabello él sería quien moriría

- Chuuya no dejes que te toque- elevó la voz el castaño escuchando los pasos acercarse a lo lejos, los refuerzos enemigos estaban cerca, se oculto tras uno de los cimientos para que al momento en que ingresaran comenzar a disparar

Nakahara se movía ágilmente entre los muros, limitaba su poder para evitar un derrumbe, antes de hacer algo arriesgado necesitaba la confirmación de que todos se habían retirado

Solo tenía una oportunidad y un espacio abierto para clavar el cuchillo en su pecho atravesando su corazón, se impulso de uno de los postes de madera antes de lanzar el arma cortante hasta que se vio detenido por una roca que lo arrojo al otro extremo del pasillo cosa que provocó un estruendo bajo sus pies

-¡Chuuya! - el moreno se acero a toda prisa a su compañero preocupándose por la gravedad de sus heridas - debes salir de aquí, ve con Hikaru

- no, terminaremos esto juntos- se puso de pie tomando su mano ignorando el dolor en su abdomen, tenía un corte profundo ocasionado al caer - Hikaru ya está afuera, me lo acaban de confirmar

- ¿que es lo que piensas? ¿usar corrupción? - aquella idea solo podía encender las alarmas en su cabeza, el detective no lo resistiría por las lesiones en su cuerpo pero tampoco era como si pudiera detenerlo

- sabes Dazai, hay una ventaja de ser parte de la agencia- le entregó su sombrero así como sus guantes - tengo más control de corrupción- marcas rojizas se mostraron sobre su blanca piel sin necesidad de repetir el poema que activa su poder,  sus ojos celestes jamás se perdieron en la locura que implicaba el harahabaki pero eso no significaba que su cuerpo no se destrozada lentamente por la gravedad

A una velocidad sin igual volvio a hacer frente a los miembros de las ratas, uno a uno cayó con el pasar de los minutos hasta dejar solamente a ambos rusos, el golem de roca lo atacaba con furia encontrándose con los neutrones antes de desintegrarse, era evidente quien tenía la ventaja

- Chuuya detente - el castaño intento acercarse, la sangre bajaba del rostro del menor, si no se detenía moriría

- solo un poco más - el último ataque destruyó a la criatura y con eso se desplomó, no resistió más

- ¡Chuuya! - la mina comenzaba a derrumbarse, el castaño se apresuró a sostenerlo entre sus brazos, las marcas se borraron cuando su habilidad lo anuló ahora sólo debía sacarlo de ahí- resiste Chuchu

- igual de débil como siempre, nada cambia - terminaron como al principio, el azabache con el arma - se acabó, todo lo que hicieron fue en vano, morirán aquí - iba a disparar pero un filo perforó su abdomen y Nakahara presionaba contra él

- tu morirás con nosotros - lo soltó dejándolo retroceder, su peso cayó entre los brazos del más alto cerrando sus ojos - no saldremos a tiempo... pero Hikaru estará a salvo

- resiste Chuuya, saldremos de aquí te lo prometo- unió sus labios en un beso lento y dulce demostrado los sentimientos que ambos compartían, su amor era puro y sincero aun después de todo, piedras y polvo los envolvio, lo abrazo con fuerza cubriendolo con su cuerpo para protegerlo, quedarían sepultados pero los sacarían de ahí, del otro lado del muro estaba el bosque, su salida, su nueva vida

Al final la montaña se derrumbó 

Mafiosos y detectives se movilizaron, los planos que les dejo Dazai les ayudarían a encontrarlos y no fue hasta que los primeros rayos del sol los cubrieron cuando los encontraron, abrazados, inconcientes.

Fall In Love Again ~ SoukokuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora