ERIC: Cazador de Divergentes

Cap. 9 Enemigos hasta la muerte.

*Cuatro*

Llevo horas buscando a Tris por el complejo de Osadía, no he logrado encontrar la. No es momento de hacer tonterías, es muy peligroso, estamos en el punto de mira y ella es la primera en la lista de Eric. Decidí venir a la sala de control, aquí es más probable que la localice, aquí dispongo de cámaras de todo el complejo de Osadía y alrededores.

No pensé que Tris fuese a reaccionar tan mal, la pesadilla de Lauren se convirtió en su propio miedo, no podía dejarla atrapada por más tiempo en la simulación del pasaje del miedo, escuchando sus gritos desesperados, cuando sé que ella fue atacada recientemente.

Sentí la necesidad de entrar en su mente y de rescatarla con mis propias manos otra vez,  aunque supiese que su miedo solo estaba en su cabeza.

 Mis duros comentarios, solo intentaban proteger la ante sus compañeros y ella no supo entender lo. Me siento culpable, estoy deseando hablar con ella y explicarse lo. Ella se marchó muy enfadada y dolida, lo pude comprobar con el golpe que recibió mi cara.

De pronto veo  a Eric pasar por el Pozo, lo sigo a través de las cámaras, quiero saber a dónde se dirige. Se detiene a la entrada del complejo, finalmente llega un vehículo plateado similar al que usa Janine. ¿Eric está esperando la llegada de alguien de Erudición?

 Eric se acerca a abrir la puerta del vehículo y no puedo creer lo que veo.- Es Tris. ¡Mierda! – No puedo evitar que las palabras salgan por mi boca.

Eric la coge del brazo y la lleva hasta la puerta de entrada, mientras veo alejarse el vehículo del complejo. Una alarma se enciende en mi cerebro, cuando él se inclina sobre ella y parece interrogar la, Tris está acorralada y está a solas con ese buitre Erudito. Tengo que bajar a ayudar la, la cosa debe ser seria. Cierro mi sesión y salgo a toda prisa.

Mis piernas se mueven lo más rápido que soy capaz, otros osados se me quedan mirando, corro por los pasadizos sin importar me con quien tropiezo. Tengo que llegar hasta ellos de inmediato, es lo único que puedo pensar, si le hace daño a Tris, juro que lo mataré allí mismo.

Por fin abro la puerta y la escena me sobrecoge. Eric tiene su cuerpo sobre Tris como un halcón apunto de engullir su presa, su cara casi choca con la de ella. Debo controlar mi ira, primero tengo que liberar a Tris, después ya me encargaré de Eric.

Acabo de fastidiar le lo que fuese que pretendiera, porque su expresión es de furia contenida.

-         ¿ Qué estás haciendo? - Intento preguntar le con serenidad.

-          Sal de aquí. – Me espeta Eric sin poder disimular su mal humor. Por lo menos se aparta de Tris, rompiendo el contacto con ella. Tengo toda su atención.

-          No.- le respondo tajantemente. – No es más que una chica estúpida, no hace falta arrastrarla hasta aquí e interrogarla.- No se me ocurre que más decir, pero no me muevo un centímetro del sitio.

-          Una chica estúpida… si solo fuera una chica estúpida no iría la primera, ¿no? – me asegura Eric.

Vamos Tobias piensa en algo me digo a mí mismo. Me pellizco el puente de la nariz intentando que las ideas vengan a mi mente.

Tris parece leer me el pensamiento, porque empieza a intentar decir como si estuviera muy conmocionada – Es que… estaba avergonzada y no sabía qué hacer.- Estoy maravillado por su gran actuación. Sin duda nunca hubiera entrado en Veracidad. Tris continúa hablando – Intenté… y… - ella niega con la cabeza.

-          ¿Intentaste qué? Pregunta Eric desesperado.

 Así que decido intervenir yo rápidamente con media verdad. – Besarme.

De pronto la idea ya está nítida en mi cabeza y continúo con la explicación.

- Y yo la rechacé, así que salió corriendo como una cría de cinco años. De lo único que podemos culparla es de ser estúpida.

Eric mira a Tris y luego me mira a mí y se ríe con ferocidad.

-         ¿No es un poco mayor para ti, Tris? – pregunta  con una sonrisa maliciosa y se la mira de arriba abajo resbalando su mirada. Estoy tentado de soltarle un puñetazo en los dientes, no es el primer diente que le arranco por este método. Pero apretó el puño con fuerza conteniéndome.

Tris no lo mira, sigue con su actuación restregándose las mejillas y pide permiso para marcharse.

 Eric la deja marchar se informándole antes de que no está permitido abandonar el complejo de nuevo sin supervisión. Hemos salvado la situación por el momento, me siento más aliviado, parece que coló la mentira.

Entonces Eric se gira hacia mí, parece divertir le la situación, con sonrisa malvada me dice- Será mejor que te asegures de que ningún trasladado vuelva a salir del complejo. Y de que ninguno más intente besarte.

-Vale. – Le respondo sin poder contener mi irritación. Tris se marcha finalmente y quedamos a solas Eric y yo.

 Su sonrisa desaparece para dejar paso al cruel Eric que tan bien conozco. Sin embargo mi  mirada automáticamente se endurece y Eric también parece reconocer la expresión que reflejo. Lo estoy retando.

 - Cuatro no te enfrentes a mí. No saldrás bien parado. – Me lo dice en tono amenazador, pero su mente Erudita le está avisando que sopese los pros y los contras. Conoce bien mi lado más salvaje, el que tiende a explotar sin previo aviso. Ese lado oscuro que disfruta infligiendo dolor.

 - Aquí el único que puede salir mal parado eres tú. No puedes esconderte siempre bajo tus galones. – Doy un paso hacia él, ahora es Eric el que está acorralado contra mí y la pared.

 Ni si quiera pestañeamos, nos miramos fijamente observando nuestras reacciones. Parece querer matar me con la mirada, pero no mueve un músculo.

-Cuatro tengo claro que seremos enemigos hasta la muerte.- me dice en un tono bajo y modulado.

-Siempre te queda la opción de mandar asesinar me como a Amar. – le replico a la espera de una contestación.

 No dice nada, está en silencio absoluto. Su sexto sentido le dice que no me provoque. Me aparto para dejar le paso, es un cobarde y sé bien que intentará acabar conmigo en cuanto tenga oportunidad, como hizo con mi instructor de iniciación.

 Veremos quién acaba con quién antes.