Capítulo 9

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Un mes después...

Liam aclaró las cosas con Luke tan solo al día siguiente de que Zayn lo obligara a irse de las graderías. Hemmings se sorprendió un poco (bastante) al enterarse de que Zayn y Liam eran hermanastros, pero a la vez le alegró, porque así, aunque no se hubiese acercado a Liam con esa intensión, cada vez que saliera con el rizado tendría que ir a casa de Zayn. Seguramente no le costaría mucho trabajo llevarse bien con sus padres, y eso le pegaría a Malik, pues según tenía entendido Luke, Zayn era muy apegado a su mamá. Si no podía ser mejor que Zayn en el fútbol, al menos lo sería en la vida diaria.

Sin embargo, y por el momento, Liam y Luke se veían a escondidas en la universidad, pues aunque Zayn ya no tuviese las fotos para chantajear al rizado, este quería ahorrarse las discusiones con su hermanastro. Sabía que los hermanos peleaban, pero tampoco quería hacerlo en todo momento. Suficiente tenía con las peleas en casa por quien tenía el mando del televisor, cuánto durar en la ducha, si podía cerrar la puerta de la habitación o no, quién hacía los mandados y quehaceres que sus papás –ahora que consiguieron nuevos empleos con mejores ingresos y horarios– les encargaban.

Porque sí, ahora, desde hace tres semanas Zayn y Liam estaban solos en casa hasta las ocho de la noche de lunes a viernes. Geoff se iba a trabajar a las 12:00 p.m. y Trisha a la 1:00 p.m. Decidieron que era buena idea el hecho de que ambos siguieran trabajando, pues sus hijos ya eran grandes y sabían cuidarse solos. Además de que un poco de dinero extra siempre venía bien.

[...]

10:45 a.m.

Como siempre, después de desayunar, Liam y Harry se encontraban charlando recargados en unos casilleros al azar esperando a que el pretendiente del primero llegara.

—Creo que se vería mejor con la camisa negra, ¿no? —dijo Harry.

Liam asintió.
—Sí, estoy completamente de acuerdo.

Y también como siempre, Luke llegó hasta donde ellos.
—Hola, lindo —saludó, antes de darle un beso en la mejilla.

Harry no se sintió ofendido por no recibir un saludo, le encantaba como se perdían Luke y Liam apenas se veían. Por lo que solo sonrió y se alejó sonriente. Tampoco le molestaba estar solo el resto del recreo, tan solo eran unos minutos y los aprovechaba explorando y/o charlando con personas random.

El rubor subió a las mejillas de Liam y sonrió tímido al rubio, ahora, frente a él.
—Hola, Lu —devolvió el saludo.

—¿Me estabas esperando? —preguntó, sonriendo.

—Quizás —respondió coqueto, alejando un rizo rebelde de su frente, más no sirvió de mucho, en un segundo do volvió a caer.

—Pues yo creeré que sí —dijo, acercando su mano derecha para acomodar el rizo y para posteriormente acariciarle sutilmente la mejilla.

—Gracias —dijo refiriéndose a su mechón suelto—. Y ¿qué quieres que hagamos ahora? —cuestionó tímido, quitándole pelusa imaginaría a Luke de la camisa.

—Mmm... Tengo varias cosas en mente —dijo con un tono seductor—. Pero primero, déjame invitarte una soda.

—Uy, sí, por favor —aplaudió feliz y entrelazó su mano con la del mayor.

Comenzaron a caminar por el pasillo en dirección a la cafetería, cuando de pronto, se encontraron con quien menos querían: Zayn.

—Hey, hola, Malik —saludó Luke—. Liam y yo estamos yendo por una soda —comentó sonriente—. Y no te preocupes, que yo cuidaré muy bien de tu hermanito.

Bad Stepbrother || ZiamWhere stories live. Discover now