Capítulo 3: Clay

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Es un chico joven, fuerte y de mediana estatura. Es rubio, tiene la piel morena, los ojos azules (como el mar) y unos labios finos (que cualquier mujer querría besar). Es ganadero y quiere vender su granja, ya que se quiere ir a la New York para tener una mejor vida.

Cada vez que va a la ciudad es para ver a Jacqueline, porque está enamorado de ella. Por lo que siempre intenta estar guapo para la ocasión.

El último día de vida de Jacqueline, hizo lo de siempre. Ese día fue muy especial para él, ya que un hombre con dinero para comprarle la granja. Por lo que estuvo cuidando de su ganado lo mejor que podía (limpiándolas, dando paseos a lo largo de la pradera,...). Cuando llegó el que quería comprarle la granja, empezó a tener sudores fríos.

El hombre (con sombrero de copa y traje) le pidió que se diera prisa en enseñarle la granja, porque no tenía mucho tiempo por lo que Clay se puso a ello. Primero le enseñó el granero, pero nada más verlo el hombre dijo:

- Hay muy poca luz para los animales, esto conllevará reforma. Así que el precio que pide se deberá de bajar.

Clay se enfadó (ya que lo construyó con su difunto padre, mientras su madre les servía la limonada para que no se deshidratarán) y le dijo:

- Señor, será mejor que se marche.

A lo que le replicó:

- Vale, no se ofenda usted. Te la compro sin ver nada más por dos tercios de lo que me pides.

Clay no se lo pensó y dijo con entusiasmo:

-Claro, me parece un buen precio.

Nada más cerrar el trato se puso lo más guapo que sabía (una camisa de cuadros y los pantalones de los domingo) y se fue hacia el prostíbulo para celebrarlo con Jacqueline. Subió a su habitación y ella le esperaba de rodillas en el suelo (solo con la sábana puesta y unas trenzas). En ese momento, Clay la puso sobre la cama (a cuatro patas) le cogió las trenzas y se la empezó a meter duro (por el culo). Él le decía:

- ¡Grita mi nombre!

Ella mientras gemía decía su nombre fuerte:

- ¡Clay! ¡Clay! ¡Dame más duro!

Una vez acabó Clay, se fue rápido a su casa. Porque la madre le había dicho que llegara cuando se pusiera el sol. Una vez llegó a la granja, se dió cuenta que se le había olvidado la cartera en la habitación de Jacqueline...  

EL ASESINATO DE JACQUELINE D. [EN PROCESO]Where stories live. Discover now