Capítulo 14

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Asher Collins

Domingo 6 de enero de 2019.

Intenté llamar a Phoebe una vez más luego de haberle dicho a Emily que había desaparecido. La alcancé hasta su casa, que igual no quedaba lejos del mercado, y después seguí hasta la mía. Estoy en la calle desde el momento en el que Sarah me llamó para consultarme si Phoebe estaba conmigo. Claramente, cuando me contó la razón por la cual me había preguntado eso, volví a Guys sin pensarlo. Me estaba yendo solo, ya que Connor se había ido bastante tiempo antes para terminar la noche en otro bar. Jordan y Winter iban a quedarse hasta que terminara la noche, junto a Lucy. Ella misma insistió en que me fuera para poder descansar. Sin embargo, no quería dejar a las amigas de mi hermana solas. Ahí fue cuando Sarah me dijo que su padre vendría por ambas en pocos minutos. Ni siquiera sé por qué no esperé hasta que él llegara con las dos a mi lado.

Cuando recibí la llamada de Sarah, una corriente recorrió mi cuerpo. "Otra vez está sucediendo" pensé. No puede ser posible. Intenté llegar lo más rápido posible a la discoteca, pero ya estaba a varias calles de allí.

Buscamos a Phoebe durante treinta minutos aproximadamente por dentro de Guys, pero no la encontramos. Terminamos yendo a buscarla a los alrededores, pero tampoco había rastro de ella. Sarah la llamó antes de contactarse conmigo, pero nunca dio señales de vida. También esperamos a que la discoteca se vacíe por completo para buscarla en cada rincón. No estaba en los baños, no estaba en la pista, ni tampoco en los cuartos extra de limpieza o almacenamiento.

Recién luego de dos horas buscándola le pedí a Rick, el padre de Sarah, que se la llevara a casa. Si algo malo le ha pasado, no es mi intención que a Sarah le suceda lo mismo por intentar hallar a su amiga.

Connor no me respondía el teléfono tampoco, aunque no me sorprendió, cuando va a otros bares sin nosotros ni siquiera le presta atención al teléfono. No digo que esté mal, pero en situaciones así tendría que estar atento.

Apenas llegué a mi casa, llamé a la señora Henderson nuevamente. Phoebe podría llegar a su casa en cualquier momento si no le ha pasado nada malo. Me senté en el sillón del living para esperar a que contestara.

— ¡Asher! ¿La has encontrado? —contestó de inmediato con ilusión en su voz. Lo que más ama en este mundo es a su hija y que esto le haya pasado a ella parece injusto. Siempre que yo iba a buscar a Phoebe y a Nell a alguna fiesta o simplemente al parque para que no les sucediera nada, me lo agradecería. En parte creo que me agradecía la forma en la que trataba a su hija, sabiendo que no mucha gente lo hacía. No por culpa de ella, por supuesto. Pheebs es tímida, no le gusta hablar con personas con las que no tiene confianza y eso hace que la gente se aleje de algún modo.

—Solo llamaba para preguntar si había aparecido por allí. No tengo nada aún, perdón —me disculpé y me callé para que ella pueda hablarme.

—No aguanto más, necesito hacer la denuncia por la desaparición pero no me lo permiten hasta que hayan pasado tantas horas. Primero tu hermana y ese chico, y ahora Phoebe. ¿No pudiste averiguar nada del paradero de ellos? ¿O la policía?

—La policía no sé qué mierda está haciendo, pero ni siquiera nos dieron alguna noticia o nos citaron a declarar. Por mi parte, mucho no pude descubrir. Los tweets y las cámaras de seguridad que Phoebe ya te contó, nada más —me paré y me fui hacia la cocina para servirme algo de tomar. Mientras me dirigía hacia allí la señora Henderson se quedó callada—. ¿Hola?

—Estoy aquí, perdón. Solo me quedé pensando en lo que me dijiste, pero no recuerdo que Phoebe me haya dicho algo de eso. ¿Qué cámaras de seguridad? —no llegué a la cocina ya que me paré en seco al escuchar lo que me dijo.

AMBER | Paulina ArévaloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora