Leones y Serpientes /Draco Malfoy//Ron Weasley/

Capítulo 6

Después de la dura prueba, en la que Ron salió vencedor, los leones descansaban en la sala común de su casa.

-Eh de admitir que pensaba que iba a fallar el último. Espero que Comrac no se lo tome a mal- comentaba Ron orgulloso de sí mismo como si hubiera hecho el mejor partido de su vida.

-Cuidado que baje ego que sube Ron- se burló Lillian leyendo uno de esos cómics muggles que tanto habían apasionado al señor Weasley cuando se los enseñó.

-Está por ti Hermione, Comrac- siguió diciendo Ron.

-Es malvado- dijo Hermione mirando mal a Ron por la actitud que estaba teniendo.

-Más que malvado es pedante, ni que fuera el hombre más guapo sobre la tierra- la apoyó Lillian.

Ron giró la cabeza y vio como Lavender le saludaba efusivamente.

-¿Conoces este conjuro? Sectumsempra- preguntó Harry, que estaba leyendo su libro viejo de pociones, a Hermione.

-No me suena de nada. Si tuvieras un mínimo de decencia devolverías ese libro- contestó Hermione.

-Ni de coña, es el mejor de la clase. Incluso mejor que tú o los hermanos Nott. Slughorn lo tiene por un genio- negó Ron.

-Y además para una vez que vemos a Harry leer con tanto fervor un libro de clase.

Hermione miró mal a los amigos por no apoyarla.

- ¿Qué?- preguntaron a la vez.

- Me gustaría saber de quién era ese libro- dijo Hermione mientras se acercaba a Harry para quitarle el objeto.

Harry empezó a poner excusas para no darle el libro mientras se alejaba de ella. Pero no se dio cuenta de que por detrás suyo estaba Ginny, quien se lo quitó.

-Este libro es propiedad del príncipe mestizó- leyó- ¿Quién es el príncipe mestizo?.

Harry no dijo nada y Ginny le devolvió el libro.

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El invierno ya había llegado y los terrenos de Hogwarts estaban cubiertos de nieve. El cuarteto de plata había decidido ir a las Tres escobas a tomar algo. Lo más difícil había sido convencer a Draco de que viniera con ellos, pero no pudo negarse ante la insistencia de su mejor amiga Sara.

-Dicen que el nuevo guardián de Gryfindor es Weasley- decía Blaise mientras servía las jarras a sus amigos, menos Theo que prefería un chocolate- fijo que este año les ganamos.

-No te creas Blaise, lo fui a ver al entrenamiento, y no es tan malo como lo pintan- al terminar de decir eso se arrepintió.

- ¿Y tú que hacías ahí?- preguntó extrañado Blaise de que su amiga hubiera ido a ver a los Gryffindor.

Theo sonrió detrás de la taza al ver como su gemela se sonrojaba.

-De todos modos- cambió de tema Sara- tienen a Weasley chica y a Adams, que son muy buenas.

Draco empezó a escuchar, ya que antes estaba en sus mundos, al escuchar hablar de Lillian.

-Ay Adams- bebió el moreno- nuestros hijos serían los mejores cazadores del mundo, con sus genes y los míos.

De repente sintió una fuerte patada en la espinilla.

- ¡Ay!- se lamentó Blaise tocándose la parte que dolía.

-Perdón, amigo- se disculpó Draco mientras bebía la cerveza-se me había dormido la pierna.

-Tu deberías de ir a los entrenamientos, eres el buscador- le recriminó Blaise al rubio.