Te Encontraré [Terminada]

Capitulo 23

Narrador

Un balde con agua le lanzaron a Juliana para que despertará, la morena abrió los ojos y algo desorientada se dio cuenta que estaba en una silla amarrada de manos y pies, vi a mi alrededor, aun estaba en el campamento.

-Al fin despiertas, Juliana —dijo Zayna, tenía el balde en la mano.

—¿Que está pasando, Zayna? —pregunto.

—Nada, solo traje a unos amigos, que necesitan algo de comida —contestó, vio carroñeros salir de la casa, algunos se estaban comiendo lo poco que quedaba de la comida.

—Son carroñeros, ¿por qué los dejaste entrar? —pregunto molesta la morena, intentaba desamarrarse, pero no podía.

—No son tan malos como parecen —contesto.

—¿Desde cuando estas con ellos? —pregunto juliana

—Un mes después de que nos encontraste a Zan y a mi —contestó —Fui a explorar para buscar comida y los encontré, quisieron atacarme, pero Marco lo impídio.

—¿Quién es Marco? —preguntó la morena.

—Yo soy Marco —dijo una voz masculina tras Zayna, esta se movió y la morena vio a un hombre alto, vestía unos pantalones rasgado, una camisa y encima una chaqueta de piel gruesa, corpulento, piel blanca, tenía algunas heridas en el rostro y además algo sucio, tenía un poco de barba, cabello largo castaño, lo tenía hacía un lado dejando ver su oreja izquierda donde tenía un aro, sus ojos eran de color claro, se coloco al lado de Zayna, la tomó con fuerza de la cintura acercandola más a su cuerpo y la beso, lo hacían salvajemente, luego se alejaron —Tú campamento es increíble, Juliana —dijo —Por eso nos llevaremos...todo —sonrió maliciosamente.

—Es nuestra comida, no suya —les dijo la morena enojada, Marco se acercó y le dio dos golpes en la mejilla haciéndola sangrar.

—Ya no es tuya —le dijo Marco —Ahora todo lo que está aquí nos pertenece —acercó su rostro al de Juliana y está le escupió, Marco se limpio y le dio un fuerte golpe en el rostro, haciendo que la morena escupiera sangre —Desatenla —le ordenó a dos carroñeros.

—¿Que le harás? —preguntó Zayna.

—Algo para que me aprenda a respetar —contestó —La dejaré como ejemplo para sus amigos también, y demostrarles quién manda aquí.

—Me parece genial —dijo Zayna, Marco le sonrió.

—Y tú hermano —Zayna miró a Juliana —¿También es parte de esto?

—No, ese idiota no tiene idea —le contestó —Además él es mi medio hermano, por parte de padre —dijo —Mi madre me abandono y me quedé con papá y su otra esposa la cual tenía a Zan, nos criamos juntos, yo nunca lo quise, él fue el culpable de que mi madre me dejara, cuando supo que mi padre tenía otra mujer y un hijo, es un idiota igual que él.

—Eres una pésima hermana —dijo Juliana, Zayna solo sonrió, dos carroñeros habían desatado a la morena, la sostuvieron de los brazos y Marcos se acercó, le comenzó a dar golpes en el estómago y en la cara, la morena ya no tenía fuerza, sus brazos colgaban y sus piernas flaqueaban.

—¿Que esta sucediendo aquí? —preguntó, todos se dieron vuelta, era Zan, con la canasta llena de pescado, lo dejó en el suelo —¡Juliana! —exclamó a verla en mal estado, se acercó, pero lo detuvieron dos carroñeros más —Zayna, ¿que sucede? —le preguntó a su hermana, la chica se acercó donde él y acarició su rostro.

—Lo siento hermanito —le dijo, el chico no entendía, Zayna sacó de su bolsillo un cuchillo de puño y en cuestión de segundos se lo enterró rápidamente en la yugular, la sangre salía sin control de su cuello.