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En diciembre otra vez vino Irene a mí.

—Hoy temprano hablé con Ana

—¿Qué dijo?

—Que encontrará la manera de que Lourdes no se niegue

—¿Quién no se niegue a qué?

Esa era Lourdes.

—Que Ana no se niegue a salir con Claudia

Lou me miró.

—¿Invitarás a mi hermana a salir?

—No

—¿Sí o no?

—Es cobarde, no se atreve

—¡Quién habla!

Miré a Irene un poco molesta.

—Invitala

Dijo Lou.

—¿Qué sugieres?

—Enviale una nota. Aunque ya no se ven esas cosas

—Mejor aún, seré única

Escribí una nota que decía:

¿Quieres salir conmigo?

—Eres mala en esto

Opinó Lourdes y se fue.
Realmente era muy simple, no sabía qué escribir. Le dí la nota a Irene, porque ella se la haría llegar a Ana. Un rato después me envió un mensaje.

Tienes suerte de que te quiera. La nota no llevaba tu número, tuve que agregarselo con lápiz

Era la emoción, quise creer. Como treinta minutos después tenía un mensaje de un número desconocido.

Acepto. El sábado a las diez de la mañana en el centro comercial

Sonreí. Inmediatamente le llamé a Irene.

—¿Dónde estás?

En mi casa

—Ana aceptó

—¿En serio? Pero si era una nota simple donde no decías nada sobre ti, podrías ser cualquier maníaco

—Pues no sé cómo sucedió...

Lou me invitó a salir

—¡Genial! Me alegro por ti

Gracias

De pronto sentí una mano apretando mi hombro.

—Cuidadito con dañar a Ana

—¿Cómo crees que lo haría?

—Claudia, tú, yo e Irene sabemos que no eres una santa

—Eso es cosa del pasado. No hago nada malo desde hace como dos años, desde antes de conocer a Ana

—¿Te gusta mucho?

—Sí... ¿Ya me dirás quién te gusta a ti?

—Sólo porque saldré con ella y de todas formas te enterarás. Es Irene

—¿Irene? ¿Entonces porqué la rechazabas?

—Por miedo. Pero ya no importa

—Sí, lo que importa es que tendrán una...

Callé. Ella me miró suspicaz.

—¡Lo sabías!

—¿Quién crees que la aconseja?

—Espero sea sólo en esto, yo dudo de tu credibilidad

—Me ofendes

—No te puedes ofender, no tienes sentimientos ni emociones

Lourdes era genial, pero a veces los comentarios que hacía uno no sabía si tomarlos en serio o no. Pero así era ella y a Irene le gustaba así, la compadecía.

Voten y comenten, ya saben que me gusta leerlas (siempre leo sus comentarios)

Salazar ¿Slytherin?Where stories live. Discover now