¿Me Recuerdas? 》HyunMin

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No seas cobarde Hyunjin. ¡Solo hazlo! Después de todo, tu madre dijo que Minnie está loco por ti y ella nunca se equivoca ¿o si?

Repetía eso en mi cabeza una y otra vez, nada malo podría pasar, ¿verdad?

Suspire y seguí caminando con pasos acelerados por el centro de la ciudad para llegar lo más rápido posible a la casa del menor.

Mientras más cerca estaba más nervioso me sentía... y en un abrir y cerrar de ojos llegué a mi destino.

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Fui a la puerta principal y golpeé. Unos segundos más tarde esta se abre y se puede ver a Seungmin detrás de ella.

Se notaba que quería decir algo, pero se quedó petrificado al verme parado allí. Literalmente él parecía una estatua.

-Buenas noches, ¿se encuentra Kim Seungmin aquí?- dije bromeando.

-Tierra llamando a K...- el menor no me dejó terminar de hablar y me envolvió en un fuerte "abrazo de oso" como él lo llamaba.

-¡No te das idea de lo mucho que te extrañé Hwang Hyunjin!- gritó -Yo sabía que saldrías de ese asqueroso hospital algún día.

Mi corazón y mi cabeza eran un caos.

-Yo también te extrañé mucho Minnie ¡los días en esa habitación eran demasiado aburridas sin tus visitas! Pero logré salir- exclamé sonriente, lo hice por ti.

-Me alegra tanto que estés bien, amigo.

Amigo... eso dolió.

-¡Pasa! Está demasiado frío afuera como para que nos quedemos a hablar aquí en la puerta- dijo alegremente.

Seungmin tenía una casa realmente grande y lujosa. Al entrar, era como un espectáculo a la vista, de verdad era muy hermosa... al igual que él...

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Nos sentamos en el pequeño sofá que él poseía y justo cuando iba a prender la televisión vuelve a dejar el control remoto en una mesita mirándome fijamente.

Mi corazón latía súper fuerte, ¿pasaba algo? ¿hice algo mal? ¿que?

-¿Estás bien?- pregunté, bastante asustado.

-¿Huh? S-si, estoy bien- contestó.

Luego de eso, el silencio volvió a inundar la habitación... pero no era un silencio incómodo, a lo contrario, era lindo. Era el tipo de silencio que extrañaba... y lo extrañaba tanto...

-Oye tonto ¡no llores! Estoy aquí, estoy bien, recuperé mi memoria no hay nada por lo que debas llorar.

-Es que... estoy tan feliz por ti- explicó -Perdóname, soy un tonto.

-No me pidas perdón Seungmo- contesté y empezamos a reír.

Nos hacíamos tan bien mutuamente que juraba que podríamos reunirnos una tarde para estar solo en silencio, pero seríamos felices con la compañía del otro y eso era todo lo que importaba.

Sentía que en cualquier instante iba a explotar, debía soltar todo justo en este momento, antes de que sea tarde...

-Minnie.

-¿Que pasa, Jinnie?- contestó.

-Quiero decirte algo.

-Anda, dilo... te escucho- dijo, alentándome a seguir.

Estaba por hablar pero mi celular sonó. Seguro era mi madre, me dispuse a contestarle pero justo cortó, Seungmin dijo que ya eran las 10:10.

-Oh, disculpa, debía estar en mi hogar a las diez... ya voy un poco tarde y si no llego en unos minutos van a matarme. Te lo digo mañana, ¿si?

-O-okey no hay problema, te acompaño a la puerta- respondió.

Y así fue, caminamos juntos hacia la salida, me despido y me doy la vuelta, pero para mi gran sorpresa, escucho al menor susurrar un "Te amo".

Paro, pero sin volverme hacia atrás y con el corazón a punto de salirse de mi pecho murmuro un "Yo también te amo..." esperando a que me escuche como yo logré escucharlo a él, y emprendí mi viaje.

-Hani