Capitulo 1. El comienzo

699 57 69
                                    

Suspiro con fuerza después de sentir una segunda patada en mi estómago, el golpe a sido tan fuerte qué apenas y puedo respirar, toso con fuerza por el dolor, observo directamente a mi atacante, ojos marrones, pelo negro alborotado, parece el cabello de un duende o trol, francamente no se cuál sea la diferencia, pecas en ambas mejillas, tal parece qué su apariencia no cambio casi nada, salvo el hecho de qué ahora su cuerpo parece tener más músculos y quizá un poco más alto, sonrió con burla porqué parece qué se esforzó mucho para dejar atrás su apariencia patética, aunque para ser franco eso no es algo qué pueda desaparecer nunca, se nace siendo patético, creó qué las personas no cambian, sólo sacan su verdadero ser, supongo qué el mío siempre fue ser una mierda de ser humano, pero el, quién fue mi víctima alguna vez, se encuentra justamente siendo mi verdugo ahora mismo, no lo culpo, su vida fue un infierno por mi culpa, así qué creó qué tiene el derecho a vengarse.

- ¿Por qué sonríes Axel? - Menciona el chico antes de llevar una pistola a mi cabeza, ahora es el quién tiene una sonrisa burlona en el rostro, lo miro sin ningún apice de miedo en el rostro, mis ojos están secos, no hay lágrimas en ellos cómo supongo qué imagino qué lo estaría, no estoy temblando, simplemente soy yo aceptando mi destino, Axel Adams un grandísimo hijo de puta qué a pesar de todo está listo para ésto, en mi vida he pasado de todo, fuí un ser humano vil y despreciable, pero aún yo tuve la dicha de amar a personas qué en verdad valían la pena, así qué si voy a morir lo haré feliz sabiendo qué fui feliz en esta vida, porqué tuve amigos y una familia qué me hizo ser mejor persona, aunque el cambio no fue fácil, años de adoctrinamiento no se borran de la noche a la mañana, me esforcé por dejar al viejo Axel atrás, creó qué lo logré - ¿Acaso no ves la situación en la qué te encuentras?.

- Claro qué lo veo? Veo qué tengo a un chico patético y resentido apuntando mi frente con una pistola - Siento un golpe fuerte con el arma, está vez en mi cabeza lo cuál me hace irme de bruces al suelo, sacudo mi cabeza para disipar el aturdimiento qué me ha dejado el golpe, comienzo a reír fuerte, porqué incluso aunque muera hoy, jamás voy a inclinarme, ni rogarle por mi vida, no ante esté chico tan patético al qué siempre he odiado, cuándo dije qué casi había logrado cambiar es verdad, en la mayoría de los aspectos lo hice, pero nunca deje de odiarlo, supongo qué eso es algo qué estoy destinado hacer hasta el fin de mis tiempos, prácticamente mi final será hoy, pero al menos me alegra morir con la mayoría de mis convicciones he ideales intactos, Axel Adams jamás va a rogar por su vida, no a este chico al qué tanto odie en mi vida.

- ¿QUÉ TE PARECE TAN GRACIOSO? - Grita con enojo y desesperación, puedo ver la furia en sus ojos marrones, su rostro está rojo de la irá, a pesar de tantos años qué han pasado estar cerca de el me produce el mismo asco, eso es algo qué nunca cambió, desdé qué éramos niños hasta hoy, no me malinterpreten, si cambié, pero no del todo, me arrepiento de muchas cosas pero no de haber sido un tremendo hijo de puta con el, supongo qué al final si soy un demonio qué se nutria con el miedo qué ejercía en éste pobre chico, de mi odio nació este monstruo y ahora está aquí para devolverme todo el odio qué yo le di a el - ¿Por qué no estás rogando por tú miserable vida?.

- Eso no va a pasar jamás y si piensas qué me arrepiento de todas las cosas qué te hice, entonces debes estar soñando o estás muy mal de la cabeza, porqué incluso en este momento con una pistola apuntando mi frente quiero qué sepas qué no me arrepiento de absolutamente nada de lo qué te hice, qué si pudiese volver al pasado y cambiar algo, volvería sólo para hacerte aún más miserable la vida, porqué ni antes, ni ahora, ni nunca has significado nada en mi vida, sólo fuiste esa molesta piedra en medio de mi camino, todo fue por tu maldita culpa, nunca me dejaste en paz, siempre estabas siguiéndome, acosándome, me asfixiaba tú presencia, sin importar qué tan mal te tratara siempre estabas ahí detrás de mi todo el maldito tiempo, así qué ahora no te hagas la víctima, porqué te dije de todas las maneras posibles qué no pertenecías a mí mundo, pero dado a qué eres un idiota parece qué nunca entendías y siempre volvías por más, pero yo siempre fui honesto contigo ¿Dime una cosa? ¿Por qué nunca entendiste por las buenas?.

"Axel" (Gay) © EN PAUSA Tempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang