Falaz ~ Namjoon

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      Estaba sobre el sillón más grande en la cuarta sala, mirando los documentos más recientes de Thimblerent. No habían muchas cosas interesantes, sólo más inauguraciones de restaurantes, bibliotecas y escuelas, me sentía feliz al saber que Thimblerent crecía muy bien cada día.
   —¿Qué hay entonces?—Dijo Namjoon sentándose a mí lado, tan cerca de mí.
   —Solo inauguraciones—Respondí cerrando la carpeta. Dejé la carpeta sobre la mesita y suspiré fuerte relajandome en el sofá.
   Namjoon sonrió y se acomodó en dirección a mi.
   —Entonces cuéntame, dices que hay...¿Dos Taehyung?
   Trague saliva, me incomodaba un poco que Namjoon hablara así con tanta fluidez, sin tener idea, que parte de mi corazón, era de Taehyung.
   Asentí pensativa.
   Últimamente la idea de que Namjoon era un león de oro y Taehyung una pantera de plata me confundía un poco.
   —Y sobre...el león, ¿Taehyung, tu y cuantos más?
   —Tranquila, solo somos tres, creí que lo sabias.
   —No...¿Tres? ¿Son tres? Entonces esto no es un hechizo, ¿Qué es?
   Namjoon se quedó pensativo unos minutos.
   —Solo fieles servidores.
   —¿Qué tontería es esa? No tiene sentido.
   —Creí que lo sabias todo—Tomó uno de mis mechones y lo acarició—Hace muchos años, existió una mujer desconocida, una persona capaz de ver el futuro, sabía el caos que iba a suceder dentro de los años que venian, entonces para prevenir una enorme y fatal catástrofe, busco a los bebés que estarían involucrados y eligió a los tres más fuertes, para proteger, a la nueva soberana del reino.
   —¿Y tu como sabes eso?
   —Ella me crió, me encontró en una canasta por la calle, en busca de alguien fuerte, encontró esa energía en mi, me adoptó y me cuidó,
   Entonces era él. El hijo perdido del Sr. Deo.
   —Y...¿Quien es el otro?
   —¿El otro? Es Yoongi, ¿acaso no lo sabias? Él es el tigre de cobre.
   —¿Yoongi? Él no puede ser, es un traidor.
   —¿Traidor?
   —Las dagas, él, se las llevó.
   —Creo que las dagas son lo último, cariño, no deberías preocuparte—Dijo mientras me acariciaba la mejilla—Es solo un portal a tu mundo definitivo.
   Sabiendo que ya le había contado toda la historia desde que nos separamos en el ataque de la aldea.
   —¿Pero porque llevárselas él? Soy yo quin debería tenerlas.
   —Yoongi tenía la idea de que deberías quedarte, hasta que todo esto acabe, tal vez no tienes la culpa, pero eres la causante. Se guardo las dagas hasta el final, él es así.
   —¿Se ven aún?
   —Cada luna llena.
   —Oh, ya veo.
   —En el otro mundo, ¿soy igual de guapo?
   Me sorprendí, con un sonrojado extremo. Tosí y con eso Namjoon tuvo su respuesta y no pudo evitar reír.
   —La verdad es que no cambias nada, solo...tus ojos—Dije mirándolo fijamente—Son cafés oscuros.
   —¿Cafés oscuros? Wow, debo verme realmente guapo así.
   —No seas narcisista—Me burlé, dando un suave golpe en el hombro.
   En eso la puerta se abrió y asomó aquella melena rubia.
   —¿Qué hacen ustedes dos?
   —¿Porque Esmére no ataca?—Le susurré, algo confundida. Namjoon solo elevó los hombros, sin respuesta a esa pregunta.
   Esmére se acercó a mi con el paso decidido, iba a tomar mi cabello y a jalarme.
   —¡Estúpida! ¡No hables a mis espaldas con mi novio!
   Antes me quite a tiempo y Namjoon le detuvo la mano en ese preciso momento.
   —Dejala en paz, cariño, yo te explicaré todo, te veo en la habitación, voy detras de ti.
   —¡Más te vale!—Se zafó con brusquedad, se dio la media vuelta y desapareció por la puerta. Sin antes fulminarme con la mirada.
   —¿Será que por ahora tenemos que mantener esto en secreto?
   —Creo que si, no podemos mover el plan—Dijo Namjoon rascándose la nuca—De todos modos, creo que... Tienes que entrenar duro, Esmére no creo que sea alguien fácil de derrotar.
   —Aun faltan meses para que se desate todo, pero... ¿Porque no ahora? ¿Porque Esmére no ataca?
   —Crees que dentro de este tiempo, haya algo que ella pueda portar, ¿para ganar poder?
   —No lo sé...—Me detuve en seco—Será... ¿Greyston?
   —¿Greyston?
   —El Taehyung malo.
   No podía perder el tiempo, me apresuré a levantarme del sofá, pero nunca vi aquel movimiento inadvertido. Cuando Namjoon me abrazó.
   —Te extrañé.
   —Yo también te extrañé—Dije profundizando su abrazo.
   Después de un largo tiempo, su pecho se separó de mí y no me di cuenta de lo cómoda que estaba, quería seguir así.
   —Iré a calmar a Esmére, ¿que harás tu?
   —Necesito ir al bosque—Dije mirándolo decididamente a los ojos—Necesito encontrar a Taehyung y Yoongi, voy a traerlos.
   —¿Hoy? Es peligroso.
   —Me he vuelto fuerte, puedo ir y venir—Le dije con una sonrisa.
   —¿Quieres que te de un caballo?