Burning Snow ✧; MYG+PJM

Capítulo 5: Tormenta

Normalmente Yoongi mantenía el pasar el tiempo calculado, pero ahora estaba perdido dentro de sí. No sabía la hora, sin embargo el sol cada vez se veía menos, no sabía si se debía a la gran tormenta que caía o al anochecer que se avecinaba.

De todas formas él sabía que no iba a poder irse a la hora de todos los días. Le tocaba quedarse hasta muy tarde limpiando todo el desastre que iba seguramente quedaría después de aquella fiesta.

─¿Me puedes dar una menta?

Por un momento se quedó estático, pero al segundo logró reaccionar al pedido del chico.

─Claro ─dijo dándole el paquete─. Aquí tiene.

Al atender al chico, se dio cuenta de que el dinero en la caja registradora estaba algo desordenada, por lo que decidió arreglarla para que cuando el señor Park llegara con su hijo encontrara todo en orden. Comenzó a colocar cada billete y monedas juntas

Abrió un pequeño cajón bajo el mostrador, en donde guardaba las llaves y algunos objetos personales, y sacó uno de los libros que guardaba ahí para leer en el almuerzo.

"El alquimista" de Paulo Cohelo.

Yoongi amaba ese libro, pero no había tenido tiempo para leerlo. Su abuela se lo había regalado antes de morir, y él lo apreciaba como un valioso tesoro. Llevó la silla que se encontraba en el escritorio trasero y la trajo al mostrador. Necesitaba despejarse un poco de sus pensamientos, y aprovecharía ahora que ya había cumplido con sus deberes.

Al cabo de unos 10 minutos, una gran brisa azotó la ventana con mucha fuerza. Las pequeñas lámparas celestes que colgaban del techo se columpiaban de un lado a otro como niños llenos de energía en un parque. La gran tormenta estaba más cerca de lo que parecía.

─¡Desaparezcan todas las botellas de cerveza ya, joder! ─gritó alterado.

─¿Por qué? ─Inquirió uno de los chicos.

─Mi padre logró salir antes a causa de la tormenta y está por llegar ─contestó preocupado─. El detesta que los adolescentes consuman bebidas alcohólicas, y si se da cuenta puedo meterme en un problema.

─¡No puedes hacer eso, dañarás todo el ambiente! ─Se quejó una chica quien se mostraba desilusionada de la situación.

─Deberíamos seguir la fiesta en otro lugar ─añadió otra observando a Seokjin, un chico pelinegro y alto, quien tambien parecía tener mucho dinero.

─Apenas llevamos aquí cuatro horas, no puede ser que tengamos que irnos ya.

─¡No seas aguafiestas, Park!

Y antes de que Jimin pudiera siquiera responder a los comentarios de queja de sus amigos, una gran camioneta negra se estacionó frente al local, ocupando los únicos dos estacionamientos vacíos.

Un hombre con lentes negros, un abrigo de cuero muy fino, unas botas negras relucientes y que llevaba pegado a su oído uno de esos iPhones caros y recién salido al mercado, sin duda uno de los aparatos que más suelen usarse para demostrar alto status ante los demás.

─Mierda ─murmuró Jimin al ver a su padre acercándose a la entrada.

─¿Ese es tu padre? ─preguntó Taehyung viendo el rostro aterrado de Jimin.

─¡Mesero! ─llamó a Yoongi alterado─. ¿Quieres que no le diga a mi padre lo incompetente que has sido? ─preguntó con un tono que unía la soberbia con el temor de que su padre entrara.

─No entiendo ─respondió Yoongi rápidamente luego de haber tenido que dejar su libro para atender a su llamado.

─Recoge absolutamente todas las botellas de cerveza que veas y dezhaste de ellas ─gritó fuerte, alertando a todos los presentes.